Néstor Grindetti lanzó su candidatura a gobernador bonaerense y advirtió: “El conurbano no se puede convertir en el segundo Rosario”

La pelea por las candidaturas en la oposición está desatada en Buenos Aires, el distrito más importante del país. Tras el lanzamiento de Diego Santilli, la carta de Horacio Rodríguez Larreta en la provincia, el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, formalizó hoy su decisión de competir por la sucesión de Axel Kicillof con el respaldo de Patricia Bullrich, precandidata presidencial de Pro y rival del jefe porteño en la interna de Juntos por el Cambio.

“Hay que terminar con la doctrina Baradel y evitar que el conurbano se convierta en un segundo Rosario”, enfatizó Grindetti, uno de los dirigentes de confianza de Mauricio Macri en Buenos Aires, al confirmar su postulación en el Club Quintana de Lanús Oeste, donde estuvo escoltado por Bullrich y rodeado de dirigentes leales y militantes de Pro.

La titular de Pro presentó a Grindetti como un “gran candidato a gobernador”. Por ahora, también respalda la ambición de disputar la gobernación de Joaquín de la Torre y Javier Iguacel. Cristian Ritondo, en tanto, es apalancado por María Eugenia Vidal.

“Estoy dispuesto a pagar los costos políticos de las transformaciones que hay que hacer en la provincia, no me va a temblar el pulso para hacer un cambio de raíz y profundo”, remarcó Grindetti, quien dejará el municipio de Lanús en diciembre.

Desde que se alejó del esquema de Larreta, el intendente de Pro orbita cerca de Macri. A la espera de que el expresidente defina su futuro electoral, se sumó al equipo de Bullrich. “El cambio que inicio Mauricio (Macri) en el 2015 sé que Patricia va a saber continuarlo y profundizarlo, con coraje y convicción enfrentando a las mafias y devolviendo el orden y la previsibilidad que le falta a este país”, aseguró.

Desde hace meses, Grindetti alerta sobre el riesgo de la principal coalición opositora siga atrapada en las luchas internas. Le preocupa, sobre todo, la irrupción de Javier Milei en el escenario electoral de la provincia. Se trata de la batalla más complicada para Juntos por el Cambio, ya que allí rige el sistema de una sola vuelta. “Estamos en un momento de la política argentina donde los dirigentes se miran el ombligo y se olvidan del verdadero propósito de esta vocación que es servir a la gente, hay un divorcio de la gente con la política por eso surgen expresiones antisistema que venden soluciones que son impracticables y peligrosas”, apuntó.

Además, dijo que pretende “trasformar la provincia”. “Estoy dispuesto a pagar los costos políticos de tomar decisiones, a veces antipáticas, pero necesarias para encarar un proceso de transformaciones profundas. No me va a temblar el pulso para hacer un cambio de raíz”, planteó.

Grindetti propuso “terminar con la doctrina Baradel en las escuelas de la provincia y evitar que el conurbano se convierta en un segundo Rosario”. “Nos van a tirar piedras, como hicieron tantas veces, pero como dice siempre Mauricio: somos el cambio o no somos nada”, lanzó.

Participaron del acto los diputados nacionales Hernán Lombardi y Sebastián García De Luca; el diputado provincial Adrián Urreli, la senadora provincial Aldana Ahumada, el jefe de gabinete local y precandidato a intendente de Lanús Diego Kravetz; concejales, consejeros escolares y referentes territoriales, entre otros.

Por su parte, el jefe de la UCR, Gerardo Morales, formalizó el armado de su comité de campaña en la provincia de Buenos Aires. Lo acompañaron Gustavo Posse y Daniel Salvador, entre otros. El gobernador de Jujuy prepara su lanzamiento presidencial para el próximo 15 de marzo. Lo hará en el teatro Gran Rex. ¿Irá Facundo Manes, su rival en la interna?

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