Murió el abogado Ricardo Monner Sans, conocido por sus denuncias contra el menemismo

El abogado Ricardo Monner Sans murió a los 87 años, según pudo saber LA NACION. Monner Sans se convirtió en una figura conocida en los años 90 por las múltiples denuncias que realizó al gobierno de Carlos Menem, entre ellas la del escándalo por la venta de armas a Ecuador y Croacia, países que se encontraban en respectivas guerras.

Monner Sans también apuntó contra las irregularidades en el PAMI durante la gestión de Matilde Svatetz de Menéndez, titular entre 1992 y 1994, quien terminó renunciando por numerosas irregularidades y con decenas de causas judiciales a cuestas.

El abogado, que fuera presidente de la Asociación Civil Anticorrupción, también se encargó de denunciar a funcionarios de los gobiernos kirchneristas, como al exvicepresidente Amado Boudou por la causa Ciccone. También apuntó contra las autoridades de Aerolíneas Argentinas tras su reestatización en 2009 por supuestas irregularidades.

Fue muy crítico con los gobiernos kirchneristas, a los denominó como “impresentables” y pidió la destitución del juez Daniel Rafecas por su actuación en el caso de la muerte del fiscal Alberto Nisman.

Monner Sans egresó del secundario en el Colegio Nacional de Buenos Aires y luego cursó sus estudios de derecho en la Universidad de Buenos Aires (UBA). De formación socialista, era hincha de San Lorenzo de Almagro, club en el que participó de la vida política, aunque con menor intensidad que su hijo Ramiro, quien fue vocal y candidato a presidente.

Su padre, José María Monner Sans, fue un destacado académico y hombre de letras, además de ser abogado. Llegó a ser vicedecano de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de La Plata a principios de los años 40 y luego decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA entre 1060 y 1962.

Reconocido y criticado

Monner Sans fue una figura de amplia presencia mediática, sobre todo en los 90. Mientras algunos lo acusaban de ser un denunciador serial, otros lo admiraban por su valentía. En ese sentido, muchos jueces se quejaban de que con sus denuncias perdían el tiempo, pero otros celebraban sus presentaciones y las analizaban de manera detallada.

En diálogo con LA NACION, en 1998, el abogado afirmaba que no ganaba dinero con sus denuncias. “Vivo de la consulta individual y tengo mucha cantidad de clientes de sectores medios que se van empobreciendo”, explicaba.

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