Vacunación vip: la zona gris que facilitó a Hugo Moyano acceder a dosis de manera privilegiada
En el circuito de reparto de las vacunas existe una zona gris que fue la que facilitó a Hugo Moyano acceder de manera privilegiada a las dosis contra el coronavirus. Esa suerte de "peaje gremial" se dio en la ciudad de Buenos Aires, donde el Ministerio de Salud selló acuerdos con 40 centros vacunatorios, entre hospitales públicos, privados y los que dependen de las obras sociales sindicales.
"Estoy vacunado porque soy el presidente de las dos obras sociales. Eso fue por la provisión que nos hizo el gobierno de la ciudad al Sanatorio Antártida", argumentó Moyano al defender su inoculación, la de su esposa y la de su hijo Jerónimo, que tiene 20 años. En la nómina del personal a vacunar que la Obra Social de los Camioneros (Oschoca) presentó al solicitar las dosis, sin embargo, no figuraban ninguno de los tres, según informaron fuentes de la gestión porteña a LA NACION.
A partir de esta irregularidad, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, intimó ayer a Oschoca a que informe el listado de personas que se vacunó, el área que ocupa y el detalle de la dosis recibida. Según registros oficiales, el Sanatorio Antártida presentó una nómina de 1100 personas y recibió hasta ahora 700 dosis, tres de las cuales habrían sido utilizadas por Moyano, Liliana Zulet y su hijo menor.
Cada jurisdicción distribuye las vacunas de acuerdo a la demanda, pero siempre en base al plan oficial de vacunación trazado, en el que el personal de salud se estableció como prioritario. Es decir, las vacunas que recibió Moyano salieron de la Nación a la ciudad, y fue la administración porteña la que resolvió otorgarle determinada cantidad al Sanatorio Antártida, de los camioneros. "Ellos son los responsables de administrar y resguardar las vacunas. Ahora deberán informar a quién se le aplicó y qué criterio se utilizó para la aplicación", señalaron cerca de Quirós.
El director de una obra social sindical importante dio detalles a LA NACION sobre cómo funciona el engranaje de distribución de las vacunas, en el que hay controles sobre los lotes y la cantidad de dosis otorgadas. El dirigente, sin embargo, reconoció que el reparto en la ciudad comenzó recién la semana pasada para la inoculación de los mayores de 80 años. "Lo de Moyano más que vacunación vip, fue un delivery vip", ironizó la fuente.
La pulseada judicial que se avecina entre la ciudad y Moyano difícilmente se salde. En Oschoca aseguraron que "no hubo nada irregular" y argumentaron que según la letra chica del acuerdo de provisión en ningún lado se le restringe el acceso a la vacuna al personal administrativo, lo que en este caso serían Moyano, su esposa y el hijo.
"No formé parte para nada de ninguna nómina de vacunados vip. Se está vacunando todo el personal que está al frente del Antártida. Mi esposa y mi pibe [Jerónimo] trabajan en el Sanatorio. Se corren muchos riesgos al frente del Sanatorio", explicó Moyano en AM 750 el sábado pasado, después de conocerse de que había sido favorecido con las vacunas contra el Covid-19.
Controles y personal de salud
En la ciudad reconocieron que no están en condiciones de llevar adelante un control sobre quién está más expuesto al virus en cada institución médica, aunque aclararon que las dosis que se distribuyeron previo a los grupos de riesgo era exclusivamente para el personal de salud. En el Sanatorio Antártida, como en el hospital que los camioneros tienen en San Justo, queda aún personal médico sin vacunar, según fuentes gremiales y oficiales consultadas por LA NACION. Incluso, entre los profesionales que esperan una dosis hay algunos que están afectados a tareas de quirófano.
De la misma manera que Moyano accedió con privilegios a una vacuna, habría ocurrido algo similar con el municipal porteño Amadeo Genta y su hijo Emiliano, ambos miembros de la Obra Social de la ciudad de Buenos Aires (Obsba). Los Genta se vacunaron por primera vez el 8 de febrero en el Sanatorio Municipal Julio Méndez, según detalló el sitio Mundo Gremial. La Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que lidera Antonio Caló, también contó con anticipación de 140 dosis de la Sputnik V, según publicó Infobae.
"Si quieren encontrar mierda, van a encontrar. Pero la verdad es que no hubo todavía cupos para las obras sociales sindicales", reconoció un dirigente de peso de la CGT que se especializa en temas sanitarios. La sentencia del gremialista confirma de alguna manera el favoritismo que gozó el Sanatorio Antártida, puesto a disposición por los Moyano para enfrentar la pandemia.
La pelea entre Moyano y la gestión de Rodríguez Larreta por las vacunas vip podría complicar la negociación que el sindicato mantiene con la ciudad por la recolección de residuos. El gobierno porteño está dispuesto a reducir costos y evalúa disminuir el servicio, una salida que los camioneros rechazan. El martes hubo un paro parcial que finalmente se levantó, pero el conflicto está aún lejos de una resolución, según fuentes de ambas orillas.
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