Móviles y detenidos: lo que se sabe hasta ahora del homicidio de Gutiérrez

EL CALAFATE.- Hay veinte cuadras de diferencia entre la casa de Fabián Gutiérrez y el patio de la casa donde fue encontrado su cuerpo, cubierto de escombros y tierra, con un golpe en la cabeza y dos heridas de arma blanca en el cuello. La principal hipótesis que trabaja la justicia es que al exsecretario de Cristina Kirchner, de 46 años, lo habrían matado en su casa de la Zona de Chacras, y lo llevaron en su propia camioneta hasta la vivienda ubicada en el Aeropuerto Viejo, donde lo enterraron.

El juez Carlos Narvarte detalló que el escenario del crimen habría sido en la vivienda del exsecretario presidencial, donde se había mudado el miércoles pasado. Allí, ayer a la tarde y durante varias horas se realizó un intensivo peritaje. Encontraron manchas de sangre en el interior de la casa y también ropa y sangre en la camioneta, que se encontraba estacionada, con la llave en su interior.

Durante la tarde, la madre de Gutiérrez, Teresa García, había ido hasta el domicilio porque su hijo no le atendía las llamadas desde el día anterior. Encontró que el perro había pasado horas encerrado, sin haber salido en todo el día de la casa de dos plantas.

La dos viviendas involucradas en el hecho y la camioneta de Fabián Gutiérrez siguen siendo en estas horas sometidas a pericias y a la búsqueda de rastros. En tanto, alrededor de las 19.25 trasladaron a la morgue de Río Gallegos al cuerpo de Gutiérrez, para realizarle la autopsia.

Llegar al cuerpo les llevó varias horas a los investigadores. A partir de un teléfono de Gutiérrez, encontrado en el Barrio 50 Viviendas, y otros celulares que fueron secuestrados, se trató de establecer quienes fueron las últimas personas que tuvieron contacto con él.

Según pudo reconstruir LA NACION a partir de fuentes propias, entre la noche del jueves y la madrugada del viernes hubo voces y ruidos en la casa de Gutiérrez, información que ya consta en la causa judicial. A partir de la información de testigos y de los últimos contactos telefónicos, se realizaron cuatro detenciones, una de ellas durante la madrugada, en la zona de Punta Soberana, a 7 km del centro de la ciudad.

Hasta el mediodía, solo uno de los detenidos había prestado declaración indagatoria. Esa fue la declaración clave: a partir de allí, Narvarte, junto a la fiscal Natalia Mercado, fueron hasta la vivienda de la calle Gregorio "Nuno" Mansilla, en el barrio Aeropuerto Viejo, en la cercanías de la avenida Jorge Newbery, a buscar el un cuerpo, según declaró el propio juez.

Sin embargo, el hallazgo ocurriría varios minutos después. El cuerpo estaba enterrado en la parte posterior de la casa, en el vértice izquierdo. Allí lo encontraron, vestido y envuelto en una sabana manchada de sangre, con dos puntazos de arma blanca en el cuello y rastros de golpes en la cabeza.

Sobre el móvil, el juez prefirió no expresarse cuando le consultaron si estaba referido al carácter público. Sí esgrimió la posibilidad de "un tema pasional, o bien una desavenencia en la relación", pero no aclaró quién de los cuatro detenidos tendría esa relación con Gutiérrez.

Los detenidos

Los detenidos son cuatro jóvenes de entre 18 y 23 años. Por lo menos tres de ellos conocían a Gutiérrez, y pertenecen a dos familias muy conocidas de la ciudad, tanto por su actividad comercial como política.

Facundo (19 años) y Santiago Zaeta, hermanos sin trabajos registrados ante la AFIP, son hijos de un comerciante local y nietos del escribano Oscar Zaeta, que fue concejal por el lema "La Esperanza Vuelve", del FPV. Por su escribanía pasaron las principales operaciones inmobiliarias del pueblo, entre ellas las de la familia Kirchner. En el caso de Facundo, protagonizó un episodio por tenencia de estupefacientes en Río Gallegos, según reportan medios locales.

Otro de los detenidos es Pedro Monzón, de 18 años. Y el restante es Martín Andrés Gómez Chávez, de 23 años, domiciliado en la calle Fagnano al 1700 (Calafate). Está inscripto como monotributista para el comercio y reparación de autos y motos. Su padre es Martín Oscar Gómez y su madre es María Angélica Chávez Chávez. El joven recibió en 2016 una beca del Banco de Santa Cruz para estudiar Ingeniería Mecánica en la UTN de Río Gallegos. Su abuelo, Oscar Gómez, fue intendente peronista de la ciudad entre 1991 y 1995 y son una familia muy conocida en la localidad.

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