Milei pasó la jornada en Olivos: las noticias sobre el FMI, la charla con el fundador de Tinder y la señal que celebraron en el círculo íntimo por el futuro de la ley

Javier Milei pasó la primera jornada de debate de la ley ómnibus en la residencia oficial de Olivos. Fiel al esquema de trabajo que se planteó cuando se mudó allí, los miércoles trabaja desde el lugar, al igual que los lunes y viernes. Esa rutina no fue alterada hoy, día en el que se trataba en el Congreso la ley más importante para la administración libertaria, por la reformas estructurales que buscan introducir a partir de allí y que sufrió cambios desde su presentación a fines de diciembre pasado, por las diferencias parlamentarias.

Mientras en el Congreso de la Nación se sucedían las exposiciones y también las últimas negociaciones alrededor del proyecto que aún presentaba dificultades en puntos sensibles como privatizaciones, facultades delegadas e impuesto PAIS, Milei tuvo una jornada de trabajo activa en la que, cerca suyo aseguraban, que solo siguió “fragmentos” del debate, que le enviaban a su teléfono. “Miró algunos fragmentos que le mandaron al teléfono, pero es el presidente, no puede estar 50 horas (lo que se estimó que puede durar el debate) mirando la televisión. Tiene que trabajar”, explicaron cerca suyo a LA NACION.

Por estas horas, y en línea con lo que se hizo saber anoche a través de un comunicado oficial de la Oficina de Prensa, “lo que pasa es todo responsabilidad del Congreso”, agregaban este miércoles apuntando a los legisladores. La relación con los representantes parlamentarios no pasa por su mejor momento. No solo con el kirchnerismo, ubicado en las antípodas, sino especialmente con la oposición “aliada” o “dialoguista”, con los que durante este miércoles persistían las tensiones respecto de los puntos sensibles.

Quienes estuvieron en contacto con Milei en las últimas horas aseguran que “está tranquilo” y que se lo escucharon de buen ánimo. Explicaban que en la jornada de este miércoles recibió “tres buenas noticias”: la primera, que el FMI desembolsaba los 4700 millones de dólares para el pago de la deuda que el país mantiene con el organismo; la segunda, que a la Argentina vendría un grupo de empresarios tech para un encuentro que cerraría Elon Musk y evaluar posibles inversiones; y la tercera, el revés que recibió la mañana de este miércoles el kirchnerismo cuando buscó sin suerte que el dictamen volviera a comisión. Ese “sopapo” al kirchnerismo como calificaron fuentes libertarias se leía por estas horas como un indicio que llevaba una fuerte expectativa al entorno presidencial respecto de que la ley saldría favorablemente de la Cámara Baja. Eso alimentaba los mejores augurios, sumados al hecho inicial de que hubiera habido quorum para comenzar el debate.

En la residencia oficial el mandatario recibió la visita de su hermana y secretaria general de Presidencia, Karina Milei, quien luego de pasar parte de la jornada allí se dirigió a Casa Rosada. Ella junto a Santiago Caputo integran el círculo de extrema confianza del presidente. Caputo trabajó desde Casa Rosada y se mantenía al detalle de las idas y vueltas en el Parlamento.

En medio de la tarde, Milei recibió en su teléfono el llamado de Leonardo Madcur, exfuncionario de Sergio Massa y elegido por el líder libertario para representar a Argentina ante el Fondo Monetario Internacional (FMI). Madcur le comunicó que el FMI finalmente desembolsaba los 4700 millones de dólares para el pago de los compromisos de diciembre, enero y abril, tal como había adelantado semanas atrás.

Madcur es uno de los funcionarios con los que Milei tiene una relación previa a la gestión. Ambos vienen de Corporación América, y en el entorno presidencial explican que creen que la relación previa que Madcur acumuló en tiempos de Massa con el organismo internacional de crédito, le sirven para tener “vínculos aceitados” en este momento. “Todo fluye más rápido”, aseguraban.

Videollamada

Previo a eso, el mandatario recibió a un empresario amigo que residía en el exterior y planea volver a la Argentina, según contaron. El hombre, cuyo nombre no trascendió, en medio del diálogo le ofreció a Milei hacer una videollamada con Sean Rad, creador de la aplicación de citas Tinder. “Acabo de tener un conference call con Sean Rad, fundador de Tinder, y nos hemos puesto de acuerdo en hacer una reunión en Buenos Aires con otros grandes emprendedores del mundo tecnológico”, consignó Milei en su cuenta de la red social X.

Para el final de ese encuentro, aún sin fecha, podría venir el magnate Elon Musk, con quien Milei ya mantuvo contacto luego de ser elegido presidente.

Cerca del libertario contaban que Rad y otros referentes del mundo tech lo empezaron a seguir luego de su entrevista con el experiodista de la cadena FOX News, Tucker Carlson, pero más después de su exposición en el Foro Económico de Davos, a mediados de este mes. Rad fue uno de quienes aquel día lo elogió públicamente. “Es muy importante porque quieren venir a invertir acá”, aseguraban hoy en relación al encuentro que podría darse.

A poco de viajar a Israel e Italia, en su segundo viaje internacional, y a con un panorama en el corto plazo en el que se sabrá el fututo de su ley de “Bases”, Milei, terminaba el día en Olivos preparándose para su reunión de Gabinete de este jueves por la mañana. Será, como siempre en Casa Rosada. Será, también la última antes de su gira y la previa a las definiciones en el Parlamento, que definirán la suerte de la norma con la que se busca avanzar con una serie de reformas estructurales pese a los cambios que surgieron en el último tiempo y que obligaron incluso a retirar el capítulo fiscal del proyecto.

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