Mauricio Macri “recalcula” su rol en la campaña por la tensión de las internas
Desde Suiza, el expresidente planea mantenerse prescindente en las contiendas entre Pro y la UCR para evitar ruidos; su balance el cierre de listas y su mensaje a Manes
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“Mauricio es ingeniero. Miró las encuestas y se fijó quiénes eran los que más medían. Hace 16 años que decide así: ¿por qué iba a cambiar ahora?”. El dirigente que reflexiona sobre la actitud que adoptó Mauricio Macri antes del tenso cierre de las listas electorales es uno de los principales referentes nacionales de Pro. Varado en un hotel en Zurich, en Suiza, desde hace dos semanas, debido al cupo de ingresos diarios de pasajeros argentinos que viajaron al exterior que impuso el Gobierno por la variante Delta de coronavirus, el expresidente planea “seguir construyendo” su nuevo rol en Juntos por el Cambio: se ubica por encima de las internas y se pone el traje de controller, una suerte de “garante” de los valores y principios fundadores de la coalición opositora.
Macri escenificó su estrategia en la carta que difundió el 28 de junio, antes de abordar el avión para ir a Madrid, donde presentó su libro Primer Tiempo. En ese texto, que terminó de convencer a Bullrich de que debía bajarse de la pelea con Rodríguez Larreta en la Capital, bastión del macrismo, se declaró prescindente en las discusiones por las postulaciones. Ahora, también planea correrse de las internas entre el Pro y el radicalismo en los principales distritos electorales.
Fastidioso por la engorrosa misión de conseguir un vuelo para regresar al país -evitó pedir asistencia al Gobierno-, Macri se mantuvo en contacto permanente con sus colaboradores más estrechos y con los principales referentes de Pro: Horacio Rodríguez Larreta, María Eugenia Vidal y Patricia Bullrich, entre otros. Mientras exprime tareas vinculadas a su rol como presidente de la fundación FIFA para matar el tiempo, Macri se mantuvo atento a los primeros movimientos de la campaña. Es más, llamó al médico Facundo Manes, flamante incorporación de la fuerza y rival de Diego Santilli en la interna de “Juntos” en Buenos Aires, para felicitarlo por su candidatura.
Antes de irse a Europa, Macri tenía previsto realizar campaña y acompañar a los postulantes de JxC en los distritos clave para la oposición: Buenos Aires, la Capital, Córdoba, Mendoza y Santa Fe, entre otros. Pero el saldo que dejó el cierre de las listas para las PASO en el conglomerado opositor lo obliga a “recalcular”.
Por estas horas, Macri y sus asesores analizan si es conveniente que intervenga en actos proselitistas antes de las primarias, ya que en muchas provincias habrá internas entre el Pro y la UCR. Cerca de Macri afirman que dirigentes del partido en todo el país piden ahora que el expresidente los visite y les brinde su apoyo antes del 12 de septiembre. “Salvo Tierra del Fuego, llamaron todos. Ahora, lo necesitan, pero hace un año no querían que fuera porque no tenía buena imagen”, apuntan fuentes del macrismo. Es que, especulan cerca del expresidente, los postulantes de Pro en distritos donde la interna con la UCR es competitiva necesitan consolidar el voto “propio” con un espaldarazo de Macri. Incluso, el equipo que trabaja en la campaña de Santilli le hizo llegar al exmandatario un pedido para coordinar una fecha para una eventual recorrida. Ante la creciente tensión en el espacio por los cruces entre el Pro y la UCR que generó la irrupción de Manes en el tablero político o el cierre de listas en Córdoba y Santa Fe, el expresidente replantea su agenda y sus planes de campaña. La idea, cuentan en el entorno del exmandatario, es mostrar a Macri en una postura de respaldo al frente electoral y no a los candidatos de Pro para “no ofender a nadie”. “No está definido”, dice un estratega del exmandatario.
Cerca del expresidente observan que la disputa interna por la estrategia electoral es natural ya que no hay un liderazgo claro en el espacio que logre ordenar a todas las tribus de JxC. “El radicalismo está jugando fuerte y Manes es parte de eso”, evalúa uno de los interlocutores de Macri. El fundador de Pro, quien recibió al médico hace unos meses en sus oficinas de Olivos, suele apelar a una metáfora futbolera cuando habla del salto de Manes a la política. Para Macri, el neurólogo deberá lidiar en esta contienda electoral con el karma del “nueve suplente”: “Cuando sale del banco y entra a la cancha, tiene que demostrar que es mejor que el titular”, repite ante los suyos. En tanto, el médico reveló que Macri le sugirió que no mire las redes sociales porque “hay muchos trolls”. Me dijo que no lea los diarios ni las redes. Y que haga los deberes y no me estrese. Yo le respondí: ‘en casa de herrero, cuchillo de palo’”, contó el postulante de la UCR.
Los laderos de Macri remarcan que el expresidente impulsó al médico a integrarse a JxC y que evitará meterse en la contienda bonaerense. Recuerdan que el fundador de Pro ya les dio su opinión a Larreta, Vidal y Santilli antes de viajar a Europa. Por ejemplo, advirtió que el enroque de postulantes que impulsó el alcalde porteño era un error, ya que entendía que Vidal debía liderar la boleta en Buenos Aires para ordenar la tropa propia. “Fue una opinión, no un mandato. Dijo lo que pensaba, pero no participó en el armado de las listas”, cuenta una fuente cercana a Macri.
Desde Europa, el fundador de Pro usó sus redes para cuestionar al gobierno de Alberto Fernández: sostuvo que es víctima de un persecución judicial por la causa del Correo y dijo que la denuncia de la Casa Rosada por el presunto envío de armas a Boliva es “mentira”.
Dos pedidos
Antes de irse a Europa junto a su esposa Juliana Awada y su hija Antonia, el expresidente le dejó dos pedidos a Larreta para la confección de las nóminas en la ciudad y la provincia de Buenos Aires: que incluya en la oferta a Hernán Lombardi, quien quedó séptimo en la boleta de Santilli, y a su secretario, Darío Nieto, postulante a legislador porteño. Si bien Macri le recomendó a Larreta que le hiciera lugar a Fernando Iglesias -quedó octavo en la lista de Vidal-, el periodista entró por Bullrich. “Para mí, Fernando tiene que estar”, le dijo Macri al alcalde.
En una de sus últimas charlas con Larreta, quien jugó a fondo en la puja interna para definir las candidaturas, el expresidente le dejó un mensaje a su sucesor en la Ciudad sobre su gabinete -entiende que le faltan figuras de peso político- y el elenco de armadores de su proyecto presidencial. Macri le recordó que durante su gestión nacional sometía a votación de los integrantes de su mesa política -Larreta, Vidal y Marcos Peña, entre otros- las decisiones más trascedentes. “¿Te acordás cómo salieron esas votaciones?”, le preguntó al alcalde. Ante el silencio de Larreta, Macri continuó: “Yo sí me acuerdo: el 60% de las veces hice lo que ustedes me recomendaron. ¿Cuántas veces hiciste lo que dijo tu equipo?”, le preguntó. Un dato estadístico que un ingeniero no pasa por alto. Para Macri, un líder que tiene laderos que solo asienten sus jugadas comete un error.
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