Massa dijo que quiere pagarle al FMI “para que se vaya de la Argentina” y apuntó contra los que buscan “implosionar” el país
El precandidato oficialista cuestionó a la oposición desde Pilar por el entendimiento de 2018 y por no pensar en la gente que va a quedar “bajo los escombros”
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LA NACION
Activo este fin de semana con inauguraciones de obras en la provincia de Buenos Aires, el precandidato a presidente del oficialismo, Sergio Massa, ratificó hoy desde Pilar su intención de cumplir los compromisos con el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero siguió sin adelantar cuándo lo hará y en qué momento viajará a Washington la comitiva del Ministerio de Economía que conduce. “Nos hemos planteado pagarle al Fondo de vuelta y que se vaya de la Argentina”, dijo el postulante, que criticó a la oposición por querer “implosionar” el país sin pensar que hay gente que quedará “bajo los escombros” .
Junto al intendente Federico Achával, Massa llegó a Derqui para la inauguración del club Lionel Messi y dio su discurso rodeado por niños de esa zona bonaerense que se acercaron a entregarle un cuadro al jefe comunal antes de su alocución.
El primer dardo que le envió a la oposición fue por la falta de acompañamiento de iniciativas y por el “bloqueo” en el Congreso, como así también por la visión que tienen esos dirigentes de la educación. Dijo que los opositores consideran que “los hijos de los trabajadores no llegan a la universidad”, que dicen “que gastar en universidades públicas es un error” y que entienden que “debiera ser paga”.
“No desconozco la realidad, estamos peleando para corregirla, sabiendo que a la Argentina le dejaron un ancla muy complicada, que es un acuerdo en 2018 con el FMI que nos hizo perder soberanía”, indicó, en una crítica al expresidente Mauricio Macri.
Entonces dijo después, en cuanto a una negociación que todavía no logra destrabarse: “Nos hemos planteado un desafío: discutir de igual a igual, defendiendo nuestra soberanía, el interés de la Argentina. Pero también nos hemos planteado como proyecto de país un desafío para los próximos cuatro años: trabajar en aumentar las exportaciones, en vender el trabajo argentino al mundo, en lograr la propia acumulación de reservas para pagarle al Fondo de vuelta y que se vaya de la Argentina”. Así reivindicó al antes mandatario Néstor Kirchner, quien abonó en su momento la deuda que tenía el Gobierno con el organismo de crédito, en un guiño al voto duro de la coalición.
Dijo, también, que su apuesta es por un país soberano y porque desde acá se elija el proyecto de desarrollo. “No pretendemos que nos digan otros cómo desarrollarnos los argentinos”, remarcó el ministro que había ya apuntado a economistas de la oposición por boicotear el entendimiento con el FMI y que ayer inauguró un paso bajo nivel en La Matanza.
En un mensaje donde apeló varias veces a la idea de unidad y de convocar a los argentinos a trabajar juntos, Massa hoy recordó que esta administración pasó por la pandemia y por una sequía “que le robó a la Argentina 20 mil millones de dólares y la dejó en una posición incómoda”.
Asimismo admitió que es “muy difícil” convocar a los que “perdieron la confianza en la política” y en que los dirigentes resuelvan sus problemas. “Sé también que esa bronca y esa desesperanza tienen que ver con la idea de que el esfuerzo pareciera no tener premio, y que en la Argentina le va bien al vivo y mal al que trabaja”, alegó, para luego aclarar que él quiere cambiar esa visión y construir un país “con premios y castigos, para que al que se esfuerza le vaya bien y para que el vivo pague cuando hace las cosas fuera de la ley”.
“Implosión”
Comprometido además en mejorar la redistribución del ingreso -un planteo que llega reiteradamente desde el kirchnerismo-, Massa cuestionó “a aquellos que promueven el odio” y alentó: “Defendamos la Argentina del trabajo para que aquellos que construyen sobre la base de destruir, que dicen que hay que implosionar todo, puedan ver que lo que quieren implosionar es la casa de los argentinos y debajo de ese techo están todos ustedes”.
Bajo esa postura, que fue un claro dardo al ala más vehemente de Juntos por el Cambio representada en Patricia Bullrich y Macri, y también a los libertarios comandados por Javier Milei, siguió en diálogo con los presentes en el acto: “Los quiero invitar a reconstruir y arreglar esa casa, porque los que la quieren implosionar se olvidan que cuando produzcan la implosión, muchos van a quedar abajo de los escombros. Nosotros la vamos a arreglar con convicción, codo a codo, con cada intendente, con cada bonaerense, con Axel [Kicillof], con cada gobernador y con cada argentino”.
Para cerrar, expresó que “está en juego esa celeste y blanca que abrazamos cuando salimos campeones”, en relación con la bandera, y arengó hacia el frente interno: “Podemos ser campeones del desarrollo económico de la patria, del progreso, del trabajo todos juntos. No nos van a dividir. Primero la patria, primero la Argentina”.
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