María Servini, tras las acusaciones de la Cámara Electoral: “Quieren manejar la elección”
La magistrada se refirió a los dichos del tribunal que la criticó de causar “confusión y estrépito” en el electorado
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La jueza María Romilda Servini habló hoy tras las acusaciones de la Cámara Electoral y reafirmó su queja: “Quieren manejar la elección”, dijo.
En diálogo con Radio Mitre, la jueza federal argumentó: “Es un enfrentamiento que viene de 2008, no es de hoy: cada vez que hay una elección, la Cámara quiere manejar ella la elección en Capital Federal y creo, también, en algunas provincias”.
En este contexto, a dos días de las elecciones escala la tensión entre los jueces que deben controlar los comicios. La Cámara Nacional Electoral le envió hoy un oficio a la Corte Suprema con una dura respuesta a las quejas de Servini, a quien acusó de causar “confusión y estrépito en el electorado”.
La magistrada se había quejado ante la Corte de que la Cámara estaba invadiendo sus atribuciones. Hoy, los camaristas respondieron: “Planteos como el que suscita esta intervención producen confusión y estrépito en el electorado, en un contexto delicado como el que atraviesa la ciudadanía y, lejos de promover la confianza en las instituciones, abundan en el descrédito y la desazón de quienes deben cumplir sus obligaciones cívicas.”
Tras esto, Servini no se quedó callada y defendió su postura: “Para esta elección del domingo soy la jueza electoral que tengo que organizar, a la vez soy junta electoral; toda la responsabilidad de lo que pase en una escuela es responsabilidad mía”. Y cerró: “Estoy manejando las elecciones desde 1991. Nunca tuve un problema ni una denuncia, no soy la que maneja las elecciones, es la gente que trabaja conmigo, que para ellos la elección es una fiesta, son admirables”.
La Cámara Nacional Electoral está integrada por Santiago Corcuera, Alberto Dalla Vía y Daniel Bejas. Ellos explicaron en su nota de este viernes que debieron tomar medidas porque la pandemia “ha exigido la previsión de una serie de aspectos esenciales para asegurar a la ciudadanía el pleno ejercicio de los derechos políticos, de elegir y ser elegido y de asociarse políticamente”, pero dijeron que eso no implicó una “intromisión” en las atribuciones de los jueces federales de cada una de las provincias ni de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (el cargo de Servini).
Anteayer, Servini se había presentado ante la Corte para denunciar “graves circunstancias” que, según ella, afectan “el normal desenvolvimiento de las elecciones”. Cuestionó en ese escrito las decisiones que tomó la Cámara Electoral para la organización de los comicios. Asimismo, la jueza acusó al tribunal de una “intromisión constante” que “solo consigue entorpecer” el trabajo. Acusó a la Cámara de pretender erigirse en el único órgano para decidir sobre las cuestiones electorales, por encima de los jueces federales con esa competencia.
En la nota de doce carillas, la jueza dijo que el “afán de inmiscuirse” de la Cámara parece tener “como único motivo” transformarse en el único órgano “capaz de decidir sobre las cuestiones electorales todo el país” como ocurre en otros países de la región. Servini destacó además en el escrito que esta “estrategia” va contra el espíritu de las normas que regulan el fuero, donde la Cámara tiene un papel de revisión, de segunda instancia y con autoridad para dictar acordadas organizativas en general.
Los jueces le contestaron hoy que su función no se limita a ser un tribunal de revisión y destacaron la amplitud de sus “potestades reglamentarias, operativas y de administración”. La Cámara tiene -explicaron sus miembros-, una “naturaleza peculiar” que la hace diferente de otros tribunales judiciales. Con esas potestades, dijeron, tomaron las medidas que ahora Servini cuestiona.
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