Marcelo Achile: el dirigente del ascenso mimado por el Gobierno que sueña con AFA

En el Gobierno aseguran que la elección del estadio de Defensores de Belgrano como escenario para la entronización de Alberto Fernández en el PJ fue una casualidad. Casi una elección por descarte. Pero más allá de cómo se definió la sede para la puesta en escena partidaria, el titular del club, Marcelo Achile, tenía sobrados lazos en la Casa Rosada y en el peronismo porteño para ser anfitrión del acto. Su foto junto a lo más alto del poder político despertó suspicacias en un momento muy convulsionado para la conducción de la AFA.

Presidente de Defensores de Belgrano desde hace 25 años, Achile tiene buen predicamento entre los clubes del ascenso, es responsable de la mesa de la Primera Nacional y ocupa una silla en la AFA como vicepresidente. Tiene tanta historia en el club ubicado en el barrio de Núñez como en el peronismo. De muy chico militó en el barrio junto al actual secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello, y al hoy embajador en Uruguay, Alberto Iribarne. Achile es uno de los niños mimados del PJ porteño. De hecho, hoy es uno de los consejeros metropolitanos del partido en la Ciudad, que conducirá el camporista Mariano Recalde.

La cancha de Defensores de Belgrano no fue la primera opción que tuvo el Presidente para asumir como cacique el PJ Nacional el pasado lunes, aseguraron fuentes oficiales. El casting de sedes arrancó por la quinta de San Vicente, devenida hoy en un museo de liturgia peronista. Pero Fernández, días antes del acto, desistió de la idea. Dijo que le parecía una alusión demasiado melancólica al pasado en un momento en el que pretende modernizar al partido de Perón y Evita. A partir de allí comenzó una búsqueda veloz. Primero se pensó en el microestadio de Pilar. Hasta allí fueron enviados de la Casa Rosada para hacer una avanzada y estudiar el lugar, pero concluyeron que el lugar es demasiado cerrado para el protocolo Covid.

Entonces buscaron estadios en Capital Federal. Apareció como alternativa atractiva el estadio de Argentinos Juniors, el club del que es hincha Presidente. Pero asomó un problema logístico, por la falta de espacio para el estacionamiento. El jefe de asesores de Presidencia, Juan Manuel Olmos, ofreció entonces dos opciones: el estadio de Platense y el de Defensores de Belgrano. “Platense no”, descartó Fernández por una cuestión de rivalidad futbolística que lo hubiera hecho sentir “visitante”. Y quedó Defensores.

Las gestiones no fueron difíciles, por la amistad que Vitobello y otros miembros del PJ porteño tienen con Achile. Es más, el presidente del club recibió a Fernández con honores. Le obsequió una camiseta estampada con su nombre y le entregó una placa. Todo ocurrió en la secretaría del club donde, luego de recorrer las instalaciones, el jefe de Estado y su pareja, Fabiola Yáñez, se demoraron conversando. Todos ya se conocían desde antes.

La postal que consiguió Achile junto al Presidente le permite asomar políticamente en un momento donde el actual presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, acumula conflictos legales y problemas de legitimidad con los dirigentes que lo habían respaldado cuando asumió en 2017 y que luego se sintieron “vencedores vencidos”. La Inspección General de Justicia (IGJ), que conduce Ricardo Nissen, hoy tiene en su poder una denuncia de Nueva Chicago, que pidió impugnar la asamblea por la cual Tapia proclamó su reelección en mayo de 2020.

En la Casa Rosada creen que Tapia ya tiene el “boleto picado”. No es ningún secreto que Fernández es hípercrítico de su gestión en AFA y que anhela otra conducción. De esto conversó con Marcelo Gallardo semanas atrás, confiaron fuentes oficiales. “La política del Gobierno es meterse lo menos posible en el fútbol”, aseguró un ministro a LA NACION. Sin embargo, fue público y notorio que Fernández evitó la foto con Tapia cuando viajó especialmente a la inauguración del Estadio Único Madre de Ciudades en Santiago del Estero. “Lo hizo para que no lo utilicen, ni para revalidar a Tapia ni en sentido contrario”, aseguró un estrecho colaborador presidencial.

Lo cierto es que el lunes, durante el acto del PJ, Fernández no escatimó para la foto con Achile. Algunos en Casa Rosada sumaron sin pudor al presidente de Defensores de Belgrano a una danza de nombres para la sucesión en AFA (una lista larga, que incluye a Marcelo Tinelli, pero también a Nicolás Russo, el máximo directivo de Lanús y a Mario Leito, ex presidente de Atlético Tucumán). Pero otros funcionarios advirtieron que es muy difícil que el referente del ascenso junte voluntades entre los clubes de primera división.

Achile llegó a pegar afiches con su nombre para la elección de AFA de 2017. Pero no presentó los avales tras cerrar un acuerdo para acompañar a Tapia como prosecretario de la entidad. El presidente de Defensores de Belgrano siempre puso al club a disposición de la militancia del PJ, en un barrio históricamente adverso al peronismo. Su primo, Diego Achile, es miembro de la junta de la comuna 13, en la zona.

“Vengo de la política y siempre me gustó participar de las elecciones. Pero cuando se resuelva lo de la AFA y llegue el momento se verá”, le dijo Achile en los últimos días a sus interlocutores. Por ahora fue solo una foto con el Presidente de la Nación.

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