Los viajes de Javier Milei por el mundo, con los premios personales como un atractivo adicional

Con su última gira por Europa partida en dos tramos, el presidente Javier Milei acumulará para fin de mes un total de nueve salidas del país, con 14 viajes realizados que lo llevaron a tocar suelo en ocho países. Premios, distinciones, conferencias, encuentros religiosos, visitas a fábricas y universidades, reuniones oficiales y otras de carácter más informal, son algunos de los motivos detrás de los viajes internacionales que emprendió el primer mandatario desde su llegada a la Casa Rosada en diciembre del año pasado.

Este viernes el primer mandatario arribó a Madrid donde fue distinguido, en primer lugar, por María Isabel Ayuso, figura central del Partido Popular -opositor al socialista Pedro Sánchez- con la medalla internacional de la comunidad de la capital española. Por la noche, el Presidente recibió un nuevo reconocimiento por parte de la Fundación Juan de Mariana en el Casino de Madrid por su “defensa ejemplar a las ideas de la libertad”.

El Presidente seguirá este sábado su periplo por la ciudad alemana de Hamburgo, donde será galardonado por la Sociedad Friedrich von Hayek con el premio homónimo que la institución acostumbra a entregar anualmente. Se prevé que la gira concluya en Republica Checa, donde Milei recibirá su cuarta y última distinción a manos de otra institución liberal.

No fue la primera vez, sin embargo, que el Presidente recoge premios por el mundo. En Miami, en la que fue su tercera salida del país, el mandatario fue reconocido por un sector de la comunidad judía de Estados Unidos con la distinción “embajador internacional de la luz”, premio que también recibió su hermana Karina, la secretaria general de Presidencia, quien acostumbra a acompañarlo en sus viajes.

Esa visita a Estados Unidos concluyó con un recorrido por la fábrica que Tesla, la empresa de automóviles, tiene en Austín, estado de Texas. Allí, el Presidente se reunió por primera vez con Elon Musk, dueño de la firma, con quien Milei mantiene una recíproca simpatía que se ha plasmado en numerosos guiños que ambos se prodigan en redes sociales.

Antes de ello, en su primer viaje oficial, Milei fue la figura saliente en la 54° reunión anual del Foro de Davos, en Suiza, conferencia en la que inauguró en el plano internacional su enérgica prédica en favor del capitalismo. Allí se reunió con la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.

Un carácter tan personal como religioso tuvo su viaje a Israel, donde se lo vio fuertemente conmovido frente al Muro de los Lamentos, acompañado por Axel Wahnish, el rabino que conduce espiritualmente al Presidente en su tránsito hacia el judaísmo y para quien Milei tenía reservada la embajada del país en Tel Aviv.

El encuentro con el primer ministro Israelí, Benjamin Netanyahu, cambió el tenor de un viaje que continuaría por Italia -donde mantendría un encuentro con la primera ministra, Giorgia Meloni- y terminaría en el Vaticano, donde el abrazo con el Papa Francisco le puso fin a la ofensiva del Presidente contra el sumo Pontífice.

Luego de esa primera gira por Europa, el Presidente encadenó tres viajes a Estados Unidos. El primer destino fue la cumbre conservadora del partido republicano en Washington, que tuvo como principal orador al expresidente Donald Trump, a quien Milei le entregó un efusivo abrazo en los pasillos del congreso.

Luego de Miami -donde recibió la distinción de la comunidad judía junto a su hermana- y Austin -donde visitó la fábrica de Tesla-, Milei prolongó su idilio con EE.UU. en California. Utilizando por primera vez el avión presidencial, partió rumbo a Los Ángeles para brindar una charla en un encuentro de empresarios en el Instituto Milken, donde volvió a coincidir con Musk, y, tras una serie de reuniones con potenciales inversores se juntó con el director de la FIFA, Gianni Infantino.

El siguiente destino estuvo marcado por la polémica, los cruces y versiones encontradas. El Presidente realizó su primer viaje a España, enmarcado por la escalada retórica que protagonizó con Pedro Sánchez. El motivo detrás del viaje fue la participación de Milei en la cumbre política organizada por Vox, el partido de ultraderecha cuyo principal referente es el amigo de Milei Santiago Abascal. Mientras Manuel Adorni aseguraba que se trataba de un viaje oficial, en España desmentían al vocero presidencial alegando que era un viaje privado.

En su último periplo por Estados Unidos, el presidente Milei partió a buscar inversiones a Silicon Valley, cuna de las empresas tech, donde resaltó su encuentro con el dueño de Meta, Mark Zuckerberg. Antes de volver al país, el Presidente se trasladó a El Salvador para presenciar la reasunción presidencial de Nayib Bukele.

Antes de emprender la gira en curso, el presidente Milei viajó a Italia por segunda vez, específicamente a la ciudad de Bari para participar del G7, la cumbre que reúne a los jefes de Estado de los países más industrializados del mundo. El Presidente coincidió allí con el sumo Pontífice, quien participó por primera vez de la cumbre.

Así, la polémica en España, el nuevo viaje a Estados Unidos (Silicon Valley), el G7 en Italia y la asunción de Bukele en El Salvador completaron la agenda internacional de Milei antes de esta última gira por Europa.

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