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Los movimientos sociales y los gremios, con lugares confirmados en las listas del oficialismo
El Frente de Todos lleva como candidatos a varios referentes del sindicalismo y las organizaciones sociales; el reclamo de Juan Grabois por “un gobierno dispuesto a darle protagonismo político a los últimos”
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LA NACIONPedro Lacour
Tanto los movimientos sociales como los gremios aliados al oficialismo tendrán representación en las listas que competirán en las PASO de septiembre. Como cofundadores del Frente de Todos y protagonistas de la contención social durante la pandemia, los dirigentes sindicales y de la “economía popular” presionaron hasta último momento para ocupar lugares en las boletas de precandidatos que se terminaron de cerrar este sábado.
Finalmente, el kirchnerismo logró colocar en las listas al titular de la CTA oficialista, Hugo Yasky, quien busca otro mandato como diputado, al igual que Vanesa Siley, secretaria general de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Judiciales (Fesitraju) y ahijada política de Máximo Kirchner. Siley integra la Corriente Federal de Trabajadores que lidera el también candidato Sergio Palazzo y el titular de la Federación del Cuero, Walter Correa, otro diputado oficialista que será candidato y cuyo mandato vence en diciembre.
La inclusión del bancario Palazzo fue una de las sorpresas de las lista del Frente de Todos bonaerense. Tendrá el cuarto lugar, por lo que su ingreso está casi asegurado. De esta manera, además de Claudia Ormachea y Carlos Cisneros, la Asociación Bancaria contaría con tres diputados sindicales propios en el recinto de la Cámara baja.
Por su parte, quien figura en el puesto sexto de la lista de legisladores porteños por el Frente de Todos es Maia Daer. La hija del cosecretario general de la CGT, de 36 años y abogada, se reconoce en el liderazgo de Alberto Fernández y todo indicaría que fue el propio mandatario el que pidió incluirla en la lista. De este modo, quedaron atrás los rumores que indicaban que la hija de Hugo Moyano, Karina, ocuparía algún lugar en las nóminas de diputados del oficialismo.
En tanto, la fusión del Movimiento Evita con Somos-Barrios de Pie tuvo sus frutos y el subsecretario de Políticas de Integración, Daniel Menéndez, también fue confirmado como candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires en la lista del Frente de Todos. Mientras que Cecilia Barros, responsable del Frente de Mujeres del Movimiento Evita, irá sexta en la nómina de diputados nacionales por la Ciudad.
Otra figura que integrará la lista del oficialismo, en este caso impulsada por el Frente Patria Grande, es Daniela Castro, directora de Políticas de Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires e integrante del colectivo travesti-trans. Castro aseguró a LA NACION que será candidata, aunque todavía sin un lugar confirmado en la lista. “Comprendemos que esta nueva etapa política tiene que ser con los movimientos sociales, ya que fuimos los que tuvimos un rol fundamental durante la pandemia al sostener comedores, merenderos, y garantizando los planes de vacunación”, apuntó.
En la organización, que tiene como referente a Juan Grabois, aseguran que “falta representación de los sectores populares”. Esta semana sonó con fuerza un rumor que ubicaba a Grabois rompiendo con el Frente de Todos. Pero rápidamente el dirigente social salió a desmentirlo. “El tema es que se negocia con desventaja. El kirchnerismo tiene que hacer un equilibrio con el massismo, con el albertismo y con los barones del Conurbano, y ahí la variable de ajustes siempre somos nosotros”, se quejaron en el entorno del abogado cercano al papa Francisco.
Con sus matices, Grabois, Menéndez y otros dirigentes sociales hace tiempo que reclaman un debate serio en torno a la agenda de recuperación pospandemia. Los movimientos sociales demandan un “salario básico universal” que complemente los bajos ingresos de los trabajadores de la economía popular y una política progresiva que permita transformar planes sociales en trabajo formal. En definitiva, “un gobierno dispuesto a darle protagonismo político a los últimos”, con figuras que no sean, en palabras de Grabois, exclusivamente “de la clase media profesional”.
En este contexto, hoy también se confirmó que el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, será finalmente precandidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires. “Lamentaría su salida del ministerio, porque estamos en medio de una tormenta y, salvo que venga alguien con una política muy clara, no hay que cambiar al timonel”, dijo ayer Grabois en una entrevista con El Cronista. Arroyo dejará el ministerio luego de perder la pulseada interna con el ministro de Economía, Martín Guzmán, respecto de la transferencia de ingresos a los sectores golpeados por la pandemia durante 2021.
Por Pedro Lacour
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