Los intendentes bonaerenses de Pro acusan a Axel Kicillof de retacearles obras públicas

Los intendentes macristas de la provincia de Buenos Aires acusaron al gobernador Axel Kicillof de discriminar a sus distritos en materia de obras públicas y le pidieron “equidad”, tras reunirse el mes pasado y subrayar que tuvieron respuestas negativas a sus planteos vinculados a infraestructura y seguridad. Desde La Plata indicaron que no discriminan a los distritos opositores y, aunque admitieron ciertas dificultades, subrayaron que no hay obras paralizadas.

“La crisis económica nacional compromete las obras y las políticas de seguridad acordadas, y la actitud de la gobernación frente a esta situación es diferente según el color partidario”, cuestionaron los intendentes de Pro bonaerenses en un comunicado. En el documento que difundieron los jefes comunales macristas, se subrayó: “Sabemos que hubo asistencia financiera directa y discrecional hacia los municipios oficialistas, y nos consta que existe discriminación en las obras públicas según el espacio que gobierna”.

Los intendentes señalaron que tuvieron respuestas negativas a los planteos que hicieron en una reunión con Kicillof. “Manifestamos la preocupación por la respuesta negativa del gobernador de la provincia de Buenos Aires ante las inquietudes acercadas el día jueves 21 de julio, en la reunión que tuvimos en La Plata. Esta falta de respuesta es una nueva muestra de la discriminación que el gobierno provincial ejerce respecto de los municipios gobernados por Juntos”, puntualizaron. Y remarcaron que es necesaria una actualización de los montos del Fondo de Infraestructura Municipal (FIM) y del Fondo de Seguridad. “La respuesta no puede ser achicar las obras”, remarcaron.

El 21 de julio, Kicillof recibió en La Plata a los intendentes Pablo Petrecca (Junín), Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Julio Garro (La Plata) y Guillermo Montenegro (General Pueyrredón). Fue una reunión tensa, en la que los jefes comunales de Pro le reclamaron más recursos a Kicillof, y de la que no se retiraron conformes. En el comunicado que difundieron hoy, destacaron que debieron afrontar gastos corrientes como el pago de combustibles para los patrulleros con el Fondo de Seguridad, y pusieron el foco sobre “cuantiosos recursos discrecionales que llegan desde la Nación y que no se han coparticipado con los municipios ($152.000 millones a julio)”. Plantearon que impulsarán una ley para que esos fondos discrecionales se coparticipen.

En tanto, fuentes de confianza de Kicillof negaron que se hayan paralizado obras en distritos gobernados por la oposición. “No hay ningún tipo de discriminación. Cada uno de los programas avanza al ritmo de las presentaciones que hace cada municipio”, aseguraron a LA NACION. No obstante, admitieron complejidades para el avance de los trabajos. “Trabajamos para que eso no suceda”, respondieron a la consulta sobre una posible reducción de las obras en marcha.

“Entendemos el rol de dinamizador que tiene la obra pública, por lo que sería contraproducente frenarla”, sostuvo una fuente cercana al gobernador. “Algunas avanzan con ritmo más constante; otras, con no tanta celeridad. Pero no hay ninguna obra discontinuada”, añadió la fuente consultada.

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