“Ley pandemia”: el modelo alemán que inspira a Alberto Fernández para evitar conflictos judiciales por las medidas contra el coronavirus
El proyecto de ley que prepara el Presidente ya generó críticas de la oposición, que advirtió que no le otorgará poderes extraordinarios; busca evitar nuevas judicializaciones y lograr mayor acatamiento
- 4 minutos de lectura'
La “inspiración” oficial surgió del modelo que la canciller Angela Merkel aplica en Alemania. Se trata de una herramienta que le brinda criterios objetivos para tomar decisiones sanitarias, pero también mucho más poder para ordenar restricciones en todo el país durante el tiempo que le quede a la pandemia, que se avizora largo. El objetivo: saldar las discusiones políticas con un instrumento que evite nuevas judicializaciones y eventuales “actos de desobediencia” de las provincias.
El Presidente anunció, casi al final de su mensaje, que enviará al Congreso un proyecto de ley que fije parámetros sanitarios y sus correspondientes restricciones. “Enviaré una iniciativa para que en función de criterios científicos claros y precisos se me faculte como Presidente y que faculte a los gobernadores a tomar restricciones y medidas de cuidado. De este modo estoy ratificando mi vocación de diálogo”, dijo Alberto Fernández.
El titular del interbloque de Juntos por el Cambio en Diputados, Mario Negri, ya advirtió que la oposición en el Congreso no le otorgará “facultades extraordinarias” a Fernández. “Debatiremos el proyecto que enviará el Presidente. Pero bajo ningún punto de vista vamos a conceder facultades extraordinarias para disponer de la libertad de los argentinos o avasallar las autonomías de las provincias o la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, advirtió en Twitter.
También hubo cuestionamientos por la legalidad de una herramienta de ese tipo, ya que la Constitución fija que “el Congreso no puede conceder al Ejecutivo nacional, ni las legislaturas provinciales a los gobernadores de provincia, facultades extraordinarias, ni la suma del poder público”. “Una ley no puede ir en contra de la Constitución”, deslizó Horacio Rodríguez Larreta en su conferencia de prensa.
Debatiremos el proyecto que enviará el Presidente. Pero bajo ningún punto de vista vamos a conceder facultades extraordinarias para disponer de la libertad de los argentinos o avasallar las autonomías de las provincias o la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
— Mario Raúl Negri (@marioraulnegri) April 30, 2021
“Está verde”
El “modelo Merkel” se coló en los debates internos del Gobierno cuando se desató la disputa con la Ciudad de Buenos Aires por las clases presenciales. La comparación que hicieron en los despachos oficiales es que la ley alemana fija que las escuelas deberán cerrar y pasar a la educación remota en aquellas regiones donde haya más de 100 nuevos casos por cada 100.000 habitantes. “A mediados de abril, cuando la Ciudad se rebeló contra el DNU estaba en 623 contagios cada 100.000 habitantes y llegó a tener mucho más”, dijeron a LA NACION fuentes al tanto de esas conversaciones.
La redacción del proyecto todavía está “verde”, aseguran en la Casa Rosada, pero aún así Fernández optó por anunciarlo. Lo único que existió fue la instrucción política del Presidente para que las áreas de Jefatura de Gabinete, del Ministerio de Salud, del Ministerio de Educación y de la Secretaría Legal y Técnica se pongan a trabajar en el tema.
Detrás de la idea del proyecto también hay una convicción que se afianza cada vez más fuerte en el Gobierno: que la segunda ola va a ser larga y que el DNU de hoy está lejos de ser el último. “Lo que esperamos es pasar a un esquema de abrir y cerrar medidas, porque la pandemia va a ser larga. Hay que tener criterios para saber a qué atenerse en cada momento”, dijo un importante portavoz oficial.
Los criterios epidemiológicos que pondrá por escrito el Gobierno todavía no están definidos, pero muy probablemente se apliquen parámetros similares a los índices que hoy figuran en los decretos: la “razón de los casos”, que surge del cociente entre el número de casos confirmados acumulados en los últimos 14 días y el número de casos confirmados acumulados en los 14 días previos. Hay riesgo epidemiológico si es superior a 1.20. Y la “incidencia” es el número de casos confirmados acumulados en los últimos 14 días por 100.000 habitantes. Es de alto riesgo si es superior a 150. A eso podría sumarse el factor del nivel de ocupación de camas UTI, entre otras variables.
En Alemania, por ejemplo, le da el poder a la Merkel para suspender las clases presenciales y para fijar toques de queda en determinados horarios. El recurso le permitió empoderarse frente a autoridades locales que ignoraban algunas de las medidas que decretaba la canciller.
La herramienta legal también oficiaría de blindaje político a Fernández ante la discusión de cada ronda de medidas. “Es un Indec de la pandemia que lo exime de situaciones como las que pasaron la semana pasada en la Ciudad”, reconocieron en Balcarce 50.