Lejos de Macri, Bullrich suma influencia en el núcleo duro de Milei, lanza un “think tank” liberal y arma para 2025
A punto de dejar la conducción de Pro, la ministra gana influencia en el círculo de confianza del Presidente y reflota su plataforma política; sus laderos no descartan una candidatura a senadora en la ciudad de Buenos Aires; ratificó su defensa a la nominación de Lijo
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“Los dos talibanes del grupo somos los que ponemos los votos en la mesa: Patricia y yo”. Hace nueve días, en una extensa entrevista con Alejandro Fantino en el canal Neura, el presidente Javier Milei ratificó que considera a la ministra de Seguridad como una pieza clave de su núcleo duro. Él mismo reveló que pone a Bullrich en una categoría diferente no solo del resto del Gabinete, sino también de la todopoderosa Karina o el estratega comunicacional Santiago Caputo, a la hora de describir cómo funciona la dinámica interna de la toma de decisiones en el gobierno de La Libertad Avanza.
Cuando Milei se prepara afrontar los meses más duros por la creciente conflictividad social frente al avance del ajuste fiscal y el desafío urgente de lograr una reactivación económica y obtener el aval legislativo a las reformas, Bullrich vuelve a cobrar protagonismo en el mundo de los libertarios. Tiene autonomía para manejar su cartera, donde se rodeó de dirigentes de confianza y “hace y deshace” sin consultar a la Casa Rosada -hasta consiguió que Luis Caputo le habilite la reactivación de obras en cárceles-, y se jacta de haberse ganado la confianza de Milei.
De hecho, le hizo saber a sus colaboradores íntimos que el Presidente, receloso de su entorno, le anticipó que planea integrarla más pronto que tarde a su mesa política, donde solo orbitan Karina Milei y Santiago Caputo, con intervenciones esporádicas de Nicolás Posse o Guillermo Francos.
Al igual que ellos, Bullrich se convirtió en “un soldado de la causa”: defiende a rajatabla el rumbo de la gestión y evita diferenciarse del Presidente, incluso en los temas más espinosos que hacen ruido o provocan asperezas en la galaxia de Pro, como la nominación del juez federal Ariel Lijo a la Corte Suprema o los ataques a la prensa y el Congreso. Es más: anoche ratificó que respalda la candidatura de Lijo: “Es una persona práctica, que resuelve cosas de acuerdo a la ley y el derecho; él termina metiendo preso por primera vez en la historia a un vicepresidente”, aseguró anoche en diálogo con Todo Noticias. Además, cuestionó los aumentos a las dietas de los senadores.
Está claro que Bullrich se pone el traje de fundamentalista libertaria en la esfera pública. Prefiere no hacer hincapié en las discrepancias y mostrarse como el “talibán” de Milei. Quienes la rodean esperan un clima áspero en las calles por el impacto de la recesión y el ajuste, pero lucen optimistas sobre el futuro económico.
Desde que rompió con Mauricio Macri, a quien visualiza cada vez más lejos de asumir el papel de árbitro con Milei, pese a que el expresidente recuperó las riendas de Pro, Bullrich promete lealtad a su nuevo jefe y aspira a tener una influencia decisiva en el renovado tablero de poder. “Ya tiene vida propia, va a hacer lo que se le antoje en 2025″, vaticina un interlocutor habitual de la ministra de Seguridad, quien se frota las manos cada vez que Milei la elogia en público.
Envalentonada con su buena imagen en las encuestas y la alta valoración del jefe del Estado, a pesar de los traspiés o errores no forzados en la gestión, como el insólito conflicto diplomático que provocó con Chile por sus dichos sobre supuestos integrantes de la agrupación terrorista Hezbollah en el país vecino, la ministra de Seguridad comenzó nuevamente a dedicarle tiempo a la construcción política.
Think tank, fondos y “círculo rojo”
Mientras se alista para abandonar la presidencia de Pro, Bullrich relanzó esta semana su asociación civil -el Instituto de Estudios Estratégicos en Seguridad (IEES) que armó hace 15 años y que el año pasado fue intervenido por la IGJ durante el gobierno del Frente de Todos-, donde trabaja el equipo que la acompañó durante la campaña.
Si bien seguirá funcionando en las oficinas ubicadas en la avenida 25 de Mayo, la ministra decidió rebautizar su instituto con el nombre de Icona (Intercambio y Convergencia para una nueva Argentina). Desde esa plataforma política, una suerte de “think tank” con el que planea “articular al sector público con el mundo privado” y “generar políticas públicas” -quiere replicar el modelo norteamericano-, Bullrich intenta contener a sus allegados, estrechar lazos con políticos y académicos de la nueva derecha en el exterior y tener una herramienta de recaudación de fondos.
Sin el sello de Pro, Bullrich requería un espacio para preservar los vínculos que construyó con el círculo rojo por su postulación presidencial. ¿Piensa que podría necesitar una plataforma para una eventual candidatura en las elecciones de 2025 o 2027? Icona ya realizó distintos eventos con empresarios a los que asistieron desde Bullrich y Federico Sturzenegger, el ideólogo de la desregulación de Milei, hasta el exministro Dante Sica, los diputados nacionales Damián Arabia y Alejandro Bongiovanni o consultores. Se realizan en el tercer piso de un edificio ubicado en la Avenida de Mayo al 953, búnker histórico de Bullrich.
Como ocurría durante la campaña María Oneto, la recaudadora de fondos de Bullrich, se ocupa de organizar las convocatorias y cobrar las invitaciones a los seminarios. El precio de las entradas oscila entre los 350000 y 500000 pesos y ofrecen cupos para quince personas. Moira Coupe y otros allegados a Juan Curutchet, director del Banco Central y uno de los representantes de una agrupación liberal de Pro, colaboran con la difusión para atraer a empresarios y dirigentes cercanos.
A cambio del aporte para cubrir los gastos del “seminario”, el think tank de Bullrich ofrece un canal directo con funcionarios del Gobierno o sus equipos técnicos. ¿Charlas sobre “la coyuntura política” y el “cambio cultural” o asesoramiento?
Resquemores en Pro
La movida despertó críticas en el seno de Pro. Desde aliados en JxC hasta exfuncionarios macristas consideran que las actividades rentadas de la asociación civil de Bullrich, que emulan su esquema de recaudación de campaña, cuando organizada cenas o eventos, podrían implicar un conflicto de intereses e incompatibilidades con la ley de ética pública. Al lado de Bullrich, relativizan la sensibilidad del tema o niegan falta de transparencia. “Hay actividades rentadas y otras, no. Ella dice que es la madrina”, justifican. Además, arguyen que se trata de una práctica habitual de la política emplear fundaciones para canalizar ayuda y contener a los equipos técnicos. Por caso, Sergio Massa lanzará su fundación en los próximos días. El año pasado los gastos del IESS de Bullrich quedaron bajo la lupa por la intervención del Ministerio de Justicia, pero en octubre la Cámara Civil declaró nula la intervención. “Fue una persecución del kirchnerismo; la IGJ no hacía inspecciones desde los noventa”, remarcan.
Cerca de Bullrich, además, anticipan que prevén buscar acuerdos internacionales, como con la universidad de Florida, en Estados Unidos, u organizaciones de derecha, para otorgar becas y “formar nuevos liderazgos”. A tono con el corrimiento de la oferta electoral, quieren darle a la asociación civil un tinte “libertario”. Apuntan, sobre todo, a ampliar el alcance del viejo instituto de Bullrich: no solo apostar a proyectos vinculados al eje de la seguridad, sino a todo el abanico de políticas públicas y una agenda internacional. La conducción está a cargo de Oneto, el legislador porteño Juan Pablo Arenaza, mano derecha de la ministra, y Guillermo Yanco, pareja de Bullrich.
El martes, la funcionaria de Milei asistió a la presentación de Icona, en la que participaron el gobernador de Chaco, Leandro Zdero (UCR) y el intendente de San Isidro, Ramón Lanús (Pro), entre otros legisladores y dirigentes cercanos a Bullrich. Por allí desfilaron empresarios que aportaron fondos a la campaña de la excandidata de JxC.
Macri y el plan 2025
Mientras Macri se alista para asumir de manera formal a mediados de mayo la presidencia de Pro, Bullrich ya teje junto con los armadores de Milei el esquema electoral de 2025. Sus asesores descuentan que habrá dos polos de electores: el filoperonista y los seguidores del Gobierno de Milei.
Así como ella apostó a insertarse en el corazón de la estructura de los libertarios para ganarse la confianza del Presidente, Bullrich les pidió a sus laderos que entablen nexos con los lugartenientes de Milei en el territorio de Buenos Aires, la Capital o el interior del país. “A diferencia de Macri, no va a pararse en lo orgánico para negociar lugares o condicionar. Vamos a construir desde abajo hacia arriba”, comenta uno de los miembros fieles de la tropa bullrichista.
De hecho, ya hubo reuniones entre Bullrich, que estuvo escoltada por Pablo Walter y Juan Pablo Allan, y Sebastián Pareja, el arquitecto territorial de LLA en la provincia de Buenos Aires, para coordinar el despliegue y cerrar filas en una “mesa de trabajo”. En el bastión de Pro, pese a que Karina Milei puso en marcha el armado del partido y provocó tensiones, también hay contactos para unir las piezas. Arenaza tiene diálogos frecuentes con las legisladoras de la hermana del Presidente. Y Arabia tiende puentes en el interior.
Si bien ella repite que no piensa en una candidatura y, menos aún, en volver al Congreso, los seguidores de Bullrich no descartan la chance de que sea candidata senadora en 2025 en la Ciudad. Especulan que Milei requerirá figuras taquilleras en la casa matriz de Pro o la provincia y que ella solo contemplaría la idea si se lo pidiera el Presidente. ¿Pondrá los “votos en la mesa” si la economía cruje? “No le va a pedir permiso ni a Mauricio ni a Jorge Macri”, advierte un consejero de Bullrich. Están convencidos de que esa apuesta perturbaría a Macri y encendería las alarmas en Uspallata. Cerca de Bullrich aventuran que el expresidente atravesará un tormento político en su tarea como conductor partidario.
Aún no dejó formalmente la presidencia de Pro, pero la ministra de Seguridad da señales de que se mueve sin ataduras y que imagina su futuro al lado de Milei. Y, aunque presionó para imponer a Arabia como vicesegundo de Macri, proyecta una fusión con los libertarios. Se replica la escena de 2015, cuando se integró al Gabinete de Macri y sumó su partido Propuesta Republicana.
Ella ya soltó amarras de sus exsocios, pese a que mantiene una tropa de diputados, quienes hoy salieron a ratificar que votarán sin peros la ley bases y el paquete fiscal, en un nuevo gesto de alineamiento a Milei. El viernes pasado, Macri se reencontró con Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal en el evento íntimo que hizo Marcos Peña para presentar su libro El arte de subir (y bajar) la montaña. Bullrich, que tuvo roces con el exjefe de Gabinete en la gestión, no participó. “No la invitaron, pero tampoco tenía interés. Mauricio está reeditando el ‘club de amigos sociedad anónima”, dicen al lado de la ministra. Su vínculo con Macri y la mesa fundadora de Pro es parte del pasado.
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