Larreta, el regreso al eje del poder de la rueda de auxilio de Macri

En la Casa Rosada definiendo medidas económicas. Pero también en Rosario con José Corral, en Lanús con los candidatos "sin tierra" bonaerenses de Pro y grabando spots para Emmanuel Gainza, candidato macrista a intendente de Paraná.

Al veloz compás de la preocupante situación de la economía, y en consenso con la Casa Rosada, Horacio Rodríguez Larreta distrae muchas de sus horas de gestión porteña para hacer política al lado de Mauricio Macri y Marcos Peña, el jefe de Gabinete que hoy lo llama "varias veces al día", como reconocen cerca de ambos dirigentes.

"Habría que ser tonto si no lo llaman, está en el top 3 del macrismo. Marcos le pidió que se meta y aporte a la campaña", lo describe uno de sus funcionarios de confianza. Lo cierto es que el jefe de gobierno porteño trabaja en la campaña nacional por la reelección del Presidente. Y en tándem con María Eugenia Vidal -a quien está unido desde que le dio su primer trabajo en la Anses, hace casi dos décadas-, Rodríguez Larreta lleva la voz cantante en reclamos como el de "medidas ya" para frenar la inflación y alentar el consumo, analizadas el jueves en la Casa Rosada con otros funcionarios y los gobernadores de la UCR.

Ante sus colaboradores, el jefe de gobierno es cauto cuando habla de economía. "Marcos le dijo que los acuerdos de precios y las medidas van a funcionar", repitieron en su entorno. Otro de sus colaboradores insiste en que su jefe "está del lado de los que presionan para que se haga algo, mientras [Nicolás] Dujovne cree que manteniendo el dólar estable y sin agitar olas se llega bien a la elección", describe el asesor. Al igual que Peña, Larreta es uno de los encargados de "reparar" el vínculo de Macri con el empresariado, un objetivo del propio Presidente.

Aunque preocupado por la economía, Larreta es optimista. "Esto se termina polarizando con Cristina", afirma, y sugiere que la candidatura de Roberto Lavagna "está terminada". En público, Rodríguez Larreta solo afirmó que le parecía "contradictoria" la actitud del exministro de Néstor Kirchner, sin entrar en detalles. Pero la sensación que tiene, de sus charlas con Sergio Massa y Marcelo Tinelli -dos de sus amigos de la política- es que no habrá acuerdo "de consenso" que impulse a Lavagna sin una interna. Con relación a Tinelli, cerca suyo son contundentes. "Marcelo no juega, no va a cerrar con nadie. Cien por cien seguro", coinciden distintos referentes del larretismo.

La misma convicción aparece cuando el tema de conversación es Martín Lousteau, que multiplicó sus acercamientos a Balcarce 50 sin definir su futuro. "Desde 2017, nunca habló de política porteña", afirman cerca de Larreta. Y aunque referentes del espacio radical porteño aseguran que Lousteau "va a competir", el jefe de gobierno calma a quienes temen un tándem con Lavagna que ubique al diputado como rival "por fuera" de Cambiemos en octubre.

"Estábamos muy bien, ahora estamos bien", graficó un miembro del gabinete cuando LA NACION le preguntó por el efecto de la crisis económica en las chances de reelección de Rodríguez Larreta. "María Eugenia la tiene muy difícil y a nosotros nos preocupan tanto ella como el escenario nacional", aseguró un miembro de la mesa chica larretista, quien recordó la reunión del jefe de gobierno con el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, y los candidatos de Cambiemos en distritos bonaerenses donde gobierna la oposición.

Sin Lousteau, el escenario es más tranquilizador: sus colaboradores cercanos solo ven al kirchnerista Mariano Recalde y a los economistas "de centro", Matías Tombolini o Marco Lavagna, pero "sin chances de pelearnos la ciudad". Salvo, sugieren, "que se desbarranque la economía. Ahí vamos a sufrir", distinguen. Si bien esperarán un "cambio de planes" de Elisa Carrió, quien ya avisó que no será candidata en estas elecciones, ya hay nombres para la senaduría porteña: además de Federico Pinedo y el propio Lousteau, suenan Mariana Zuvic, aliada de Carrió; Paula Bertol, hoy en la OEA; Marta Varela, y el asesor presidencial José Torello. Su ministro de Ambiente, Eduardo Macchiavelli, se encarga de armonizar las relaciones con los 11 partidos del oficialismo porteño.

Con los radicales tiene sintonía, tanto con los gobernadores como con el eterno operador Enrique "Coti" Nosiglia, quien lo elogia porque "del macrismo es uno de los que entiende el juego". Más allá de los rumores sobre discusiones y distanciamiento, el jefe de la ciudad asegura que su relación con Macri es "la de siempre" y que aunque no tienen "la cotidianeidad" de los años del Presidente en Bolívar 1, "el vínculo es muy bueno y lo seguirá siendo". Con relación a su compañero de fórmula, no es descabellado que Diego Santilli vuelva a ser candidato a vicejefe de gobierno, aunque otros en el espacio quisieran "preservarlo" para la hoy lejana competencia de 2023.

Con una "ola" de inauguraciones por delante -el Paseo del Bajo, dos viaductos y estaciones de subte-, Rodríguez Larreta acelera el camino a su reelección. Por obra y gracia de la necesidad, también es rueda de auxilio para Balcarce 50.

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