La trama oscura de los tripulantes del avión venezolano: un contacto en la triple frontera con un narco que domina la hidrovía
Los 19 tripulantes de la aeronave que fue incautada por el juez Villena se reunieron con Santoro Vasallo en Ciudad del Este, el lugarteniente del prófugo Sebastián Marset, un uruguayo que está sospechado de manejar el tráfico de drogas por la ruta del agua
- 6 minutos de lectura'
En la oscura trama que envuelve al avión de Emtrasur y a los 19 tripulantes de venezolanos e iraníes aparece una relación con el crimen organizado en la triple frontera, donde en Ciudad del Este quienes llegaron en la aeronave tuvieron contacto con un miembro del grupo narco que comanda el uruguayo Sebastián Marset –actualmente prófugo-, quien domina el tráfico de drogas en la hidrovía y está acusado de ser quien encargó el crimen en Colombia del fiscal paraguayo Marcelo Pecci el 10 de mayo pasado, tres días antes de que aterrizara la aeronave con los tripulantes iraníes y venezolanos en la ciudad paraguaya de la triple frontera.
El avión venezolano iraní, que fue “incautado” en Argentina por el juez Federico Villena por pedido de la justicia de Estados Unidos, había hecho una parada previa en Paraguay, entre el 13 y el 16 de mayo. El gobierno de Paraguay sostiene que los 19 tripulantes del avión fueron trasladados en Ciudad del Este, en la zona de la Triple Frontera, por el uruguayo Federico Santoro Vasallo, un hombre que pertenece –según informes oficiales- a una organización narco internacional que domina el tráfico de cocaína de la hidrovía, como reveló LA NACION el 16 de junio pasado.
Esa organización criminal, que está acusada de realizar los contrabandos de droga con destino a Europa más grandes de la historia (por más de 40 toneladas de cocaína), está liderada por Sebastián Marset, un empresario narco que está prófugo, tras huir de Asunción a Dubai, cuando se habría enterado que estaba por ser detenido. En ese país se habría realizado a principios de mayo una especie de convención narco del Mercosur.
Marset, la cabeza del Primer Comando Uruguayo (PCU), con lazos con el Primer Comando Capital brasileño, está acusado por el Ministerio Público de Colombia de encargar el asesinato en la isla de Barú, en Cartagena, del fiscal Pecci, quien fue ejecutado durante su luna de miel el 10 de mayo pasado.
El viernes pasado el presidente de Colombia, Gustavo Petro, advirtió a través de Twitter que “la investigación sobre el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci cometido por el narcotraficante uruguayo Marset en territorio colombiano demuestra que hace mucho el narco dejó de ser un problema bilateral colombo-estadounidense y es hoy un problema americano y mundial”. De esa manera, el flamante mandatario colombiano confirmó que Marset ordenó el crimen del fiscal guaraní, que provocó conmoción a nivel regional.
La investigación sobre el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci cometido por el narcotraficante uruguayo Marset en territorio colombiano demuestra que hace mucho el narco dejo de ser un problema bilateral colombo estadounidense y es hoy un problema americano y mundial. https://t.co/YlJ3d4ysvs
— Gustavo Petro (@petrogustavo) August 12, 2022
Un informe del llamado Comando Tripartito en la triple frontera, que integran Paraguay, Brasil y Argentina, al que tuvo acceso LA NACION, lo sitúa a Santoro Vasallo, mano derecha de Marset, como uno de los engranajes de esta organización que está sospechada de hacer la logística para enviar grandes cargamentos de cocaína a los puertos de Rotterdam y Amberes. Pero también lo pone en escena el 13 de mayo pasado, tres días después del crimen del fiscal, como el contacto en Paraguay de la tripulación venezolano iraní.
Según información de la Fiscalía Anticorrupción de Paraguay, este hombre de nacionalidad uruguaya fue quien se encargó de los traslados y el alojamiento de la tripulación iraní, que se hospedó en el hotel Dazzler de Ciudad del Este. El avión aterrizó el 13 de mayo en el aeropuerto de Ciudad del Este y se quedó allí durante tres días. El 16 de mayo voló hacia Aruba con un cargamento de cigarrillos valuado en 755.000 dólares.
Según publicó LA NACION, en la factura emitida por la empresa Tabacalera del Este SA (TABESA), vinculada al expresidente de Paraguay Horacio Cartes, consta que se trasladaron 6010 paquetes de “Ibiza extra suave” y 1076 paquetes de “Ibiza King Size”. El cliente declarado en ese mismo documento es la empresa Tabacos USA Inc, pero la firma receptora fue Tabacal Free Zone Nv, con sede en Aruba.
En la línea de tiempo de la llegada del avión venezolano-iraní aparece muy cercano el crimen del fiscal que lideraba la Unidad de Crimen Organizado en Paraguay, en su luna de miel en Colombia. Pecci fue asesinado en la playa de Barú por sicarios que se movían en jetsky el 10 de mayo. Tres días después aterriza el avión de la firma Empresa de Transporte del Sur SA (Emtrasur) en Ciudad del Este. El jefe de la Unidad de Narcotráfico de Paraguay, Marcos Alcaraz, confirmó a LA NACION que Santoro Vasallo está siendo investigado en Paraguay por ser un engranaje de la organización que lidera el prófugo Marset.
Avance de la justicia paraguaya
“Podemos decir objetivamente que tuvieron contacto, que esta tripulación iraní-venezolana estuvo contactada con esta persona (Santoro Vasallo) que tiene antecedentes por trata internacional de personas y por narcotráfico”, aseguró René Fernández, fiscal Anticorrupción de Paraguay. Esta información que investigó Paraguay aún no consta en el expediente que se tramita en Argentina, donde esperaban el informe oficial que elaboró el área de Anticorrupción.
Marset está prófugo, a pesar de que fue detenido en Dubai en setiembre pasado, por tener un pasaporte paraguayo falso. El consulado de Uruguay le suministró un pasaporte uruguayo y luego se fugó, algo que provocó un escándalo en Montevideo. El fiscal paraguayo que estaba encargado de investigar a Marset en Paraguay, Lezcano es un funcionario ligado al expresidente Horacio Cartes, cuya empresa aportó los cigarrillos que los venezolanos e iraníes llevaron desde Ciudad del Este a Aruba.
Marset, que se movía en un Mercedes Benz D350, entre otros vehículos de alta gama, mantenía reuniones permanentes con narcos brasileños, uno de ellos, Marlon Douglas Silva, quien –de acuerdo al informe- sería unos de los proveedores de cocaína desde Bolivia. Marset figura con un ingreso a la Argentina el 27 de abril de 2018. Y desde Argentina tomó un vuelo a Río de Janeiro. También registra varios ingresos a Santa Cruz de la Sierra, Bolivia.
Lezcano había recibido información de la Dirección de Drogas de Uruguay el 4 de mayo de 2021 sobre las maniobras de Marset en Paraguay y en la hidrovía. La policía paraguaya investigó al uruguayo, que jugaba al fútbol en el club Capiatá y vivía en un lujoso departamento en Palacio Los Patos en Asunción, pero el fiscal nunca ordenó su detención a pesar de las pruebas que aparecían en la causa. El viernes pasado la embajada de Estados Unidos en Paraguay hizo un anuncio inédito al calificar al vicepresidente de ese país Hugo Velázquez como “significativamente corrupto” e impedirle el ingreso a territorio norteamericano. El funcionario anunció que renunciará y se retirará de la política.
Temas
Otras noticias de Terrorismo
Terrorismo. El FBI arrestó en Houston a un sospechoso de planear atentados: investigan sus vínculos con ISIS
Terrorismo. La ministra Bullrich dijo que identificaron al jefe operativo de Hezbollah en América Latina
Hoy vota el GAFI. La Argentina, ante un examen crucial de su efectividad contra el lavado de dinero
Más leídas de Política
Caso Chocolate. El Senado bonaerense se resiste a entregar a la Justicia a una legisladora acusada de corrupción
El escándalo de los aviones. Analizan sancionar a la pareja del exjefe de la Fuerza Aérea que hizo viajes irregulares
Allanamientos e impacto político. Un escándalo de corrupción golpea a la vicegobernadora de Neuquén
Negociación caliente. La kirchnerista Lucía Corpacci sumó su firma al pliego de Lijo y el juez está un paso más cerca de la Corte