La Patria, Dios o la marihuana: las fórmulas y los momentos más insólitos en la jura de los nuevos diputados
Los nuevos legisladores libertarios, trotskistas, macristas y kirchneristas coincidieron en la Cámara baja, pero no a la hora de elegir su juramento
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En un clima marcado por las expectativas que genera la nueva conformación del Congreso, la sesión preparatoria de la Cámara de Diputados no estuvo exenta de momentos curiosos. Con puños, abrazos y hasta besos, los intercambios entre los legisladores nacionales que asumirán formalmente en sus bancas el próximo viernes no parecieron, a simple vista, dar cuenta de las tensiones que prometen abrirse a partir del 10 de diciembre.
Esa tensión subterránea fue disimulada a la perfección por Sergio Massa. Minutos antes de que la diputada Paula Penacca lo propusiera nuevamente como presidente de la Cámara baja, el tigrense recorrió el recinto repartiendo saludos entre los nuevos integrantes. En su rol de anfitrión, a Massa no le faltó darle la mano a casi nadie. Hasta Javier Milei recibió una caricia en la cara de su parte. Un gesto de bienvenida de la “casta política”.
El saludo con Massa fue uno de los pocos momentos en los que pudo verse al referente libertario sin su celular en la mano. Sentado en su banca y con los ojos puestos en la pantalla, el economista también pareció ignorar lo que ocurría en ese momento al lado suyo: justo a su izquierda, se sentaban Romina Del Plá y Nicolás Del Caño, los dos referentes del Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT-U). Fue la imagen más contrastante del día.
Como la novedad principal de las últimas elecciones, la mayoría de las miradas estuvieron puestas en las juras de Milei y José Luis Espert. Sin embargo, pese a sus estilos vehementes con los que se mostraron durante la campaña, ninguno de los economistas tomó la palabra y se limitaron a jurar por “Dios, la Patria y los santos evangelios”. Aunque Espert pareció atinar a decir algo, pero lo hizo a destiempo y le apagaron el micrófono, algo similar a lo que le ocurrió a la kirchnerista Vanesa Siley.
La compañera de lista de Milei, Victoria Villarruel, juró por “las víctimas del terrorismo”, fórmula que fue contestada con silbidos y gestos de reprobación dentro del recinto y en las gradas.
Es que, al momento de jurar, no fueron demasiados los futuros diputados que tomaron la palabra para ir más allá del tradicional “sí, juro”. Entre ellos estuvo Nicolás del Caño, uno de los primeros en hacer uso del micrófono. El referente de la izquierda aprovechó su tiempo para pedir “echar al FMI de Argentina y América Latina” y “desconocer la deuda fraudulenta”, en nombre de “la clase trabajadora internacional y los pueblos del mundo”, consignas que son banderas clásicas del trotskismo.
En ese sentido, una de las juras más esperadas fue la del diputado electo por Jujuy, Alejandro Vilca. El recolector de residuos y dirigente del FIT-U, que fuera la sorpresa en las elecciones legislativas de esa provincia al lograr el tercer puesto, juró con la wiphala en la mano, la bandera cuadrangular de siete colores que representa a los pueblos indígenas. “Por el sacrificado y combativo pueblo jujeño, por la rebelión de los oprimidos y por la resistencia por más de 500 años de nuestros pueblos originarios”, exclamó Vilca.
Por su parte, quien dio la nota con una de las juras más llamativas fue la diputada electa por Entre Ríos Carolina Gaillard. La legisladora, que pasó sola al estrado, tras reivindicar “la patria justa, libre y soberana que soñaron nuestros compañeros detenidos desaparecidos”, pidió por que se respeten derechos de los consumidores y cultivadores de marihuana y reclamó “un Estado que cuide y acompañe y no que estigmatice y criminalice a los usuarios, no más presos por plantar”.
Tampoco faltó una jura en lenguaje inclusivo. La encargada de hacerlo fue la también diputada de izquierda Del Plá: “Por les trabajadores de la salud, héroes contra la pandemia, por la docencia que tuvo el peso de garantizar la educación que los gobiernos no, por les jubilades que son las víctimas de todos los ajustes, contra el pacto con el FMI y por el gobierno de les trabajadores en Argentina y en todo el mundo, sí juro”, dijo la diputada, quien también se desempeña como docente.
Otra de las escenas curiosas de la jornada tuvo lugar durante el turno de jura de los diputados electos por la ciudad de Buenos Aires, cuando coincidieron frente al estrado la dirigente de izquierda, Myriam Bregman, y el diputado de Juntos por el Cambio, Fernando Iglesias. Es que, en línea con Del Caño, la diputada de izquierda hizo una de las juras más largas de la jornada, con referencias varias: “Por los 30.000 detenidos desparecidos, por la lucha de las mujeres y la diversidad, por los pueblos que enfrentan la destrucción del plantea, por los trabajadores y trabajadores que se organizan para terminar con la barbarie capitalista, porque no puede haber verdadera libertad sin terminar con la opresión”.
Fue en el instante posterior que, ante la extensión de la jura de Bregman, Iglesias no dudó en echar mano a su característico estilo provocador y al momento de tomar su compromiso, dijo: “Juro porque respetemos por una vez y demos el ejemplo respetando la Constitución, las leyes y la fórmula de juramento establecida por el reglamento interno”. Bregman le respondió juntando los dedos y agitando la mano, junto a la mueca clásica del “montoncito”.
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