La oposición dura se plegó a la marcha de las universidades y embistió contra Javier Milei

La dirigencia política opositora más refractaria a la administración de Javier Milei se unió este martes a la masiva marcha que protestó contra el recorte presupuestario a las universidades. Desde dirigentes peronistas como Axel Kicillof y Sergio Massa, pasando por jerarcas de la CGT y llegando a referentes de la izquierda, además de grupos piqueteros, todos confluyeron en la Plaza de Mayo para nutrir la demostración en las puertas de la Casa Rosada.

Entre los popes de la central obrera se los pudo ver a los triunviros Héctor Daer y Pablo Moyano, al tiempo que en la Plaza del Congreso estuvo Roberto Baradel, el sindicalista bonaerense de Suteba.

La izquierda aportó a dirigentes como Nicolás del Caño, Myriam Bregman, Manuela Castañeira, Alejandro Vilca, Alejandro Bodart y Vilma Ripoll. En la columna del partido Patria Grande, que se ubicó sobre la calle Solís, detrás de los militantes de La Cámpora y de Nuevo Encuentro, se pudo ver al diputado nacional Itai Hagman. Con algunos militantes de su agrupación Movimiento Independiente de Justicia y Dignidad (MIJD), se observó caminando por la calle Alsina al líder de ese grupo piquetero, Raúl Castells, y a su exesposa Nina Pelozo.

También fue de la partida el presidente de la UC, el senador Martín Lousteau, se sumó a la protesta callejera y afirmó: “La universidad y la educación pública es lo que nos hizo como sociedad, es lo que vertebró toda nuestra sociedad”. El radicalismo tiene fuerte presencia en el rectorado de la Universidad de Buenos Aires (UBA), donde cuenta con Ricardo Gelpi (rector) y Emiliano Yacobitti (vicerrector). También lidera otras universidades, como la Universidad Nacional Guillermo Brown (UNAB), cuyo rector es el diputado bonaerense Pablo Domenichini, del sector del radicalismo que lidera Lousteau. Domenichini fue uno de los rectores que estuvieron en el escenario de Plaza de Mayo.

El diputado radical Facundo Manes también participó de la marcha. En fotografías, se mostró con Julián Domínguez, expresidente de la Cámara de Diputados e integrante del PJ. Los desprendimientos de lo que fue Juntos por el Cambio tuvieron una actitud dispar en la movilización, con participaciones y ausencias (ver página 9). La UCR aportó otros dirigentes a la marcha, como Danya Tavela o Carla Carrizo.

Cristina Kirchner no participó de caminata, pero saludó desde un balcón del Instituto Patria a los militantes que pasaron por allí rumbo al epicentro de la movilización. Mostró un buzo con las siglas de la Universidad Nacional de La Plata. El Instituto Patria, usina de la expresidenta, está en la zona cercana al Congreso.

La Cámpora tuvo su columna, sobre la calle Solís en su cruce con Yrigoyen. Temprano, antes del arranque de la marcha, el senador y titular del PJ porteño, Mariano Recalde, estaba en esa columna. En tanto, Eduardo “Wado” de Pedro, también senador y uno de los referentes de la agrupación que lidera Máximo Kirchner, participó de la movilización en la Plaza de Mayo. Se mostró con jóvenes que integran la agrupación estudiantil La Mella de la Facultad de Psicología de la UBA.

Varios intendentes del peronismo dieron el presente en el bar Vittorio, a pocas cuadras del Congreso, donde los citó el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof. Entre otros, se congregaron allí Jorge Ferraresi (Avellaneda), Julio Alak (La Plata), Fernando Espinoza (La Matanza), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Mario Secco (Ensenada), Andrés Watson (Florencio Varela), Nicolás Mantegazza (San Vicente), Pablo Descalzo (Ituzaingó) y Cecilio Salazar (San Pedro).

En ese bar cercano al Congreso también se reunieron el gabinete de Kicillof y algunos legisladores, como la diputada nacional Victoria Tolosa Paz. El exintendente de Ituzaingó y actual concejal en ese distrito, Alberto Descalzo, se anotó también allí, al igual que el secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de la provincia de Buenos Aires, Oscar “Colo” De Isasi.

Otros intendentes peronistas participaron de la movilización, aunque sin acompañar a Kicillof en el punto de concentración marcado. Fernando Gray (Esteban Echeverría) fue uno de ellos. “El gobierno nacional debe entender que continuaremos luchando por nuestras universidades, verdaderos pilares de ascenso social y desarrollo nacional”, afirmó Gray. Otro de los que también participó, fuera de la lista de los que concurrieron al bar Vittorio, fue el intendente de Tigre, Julio Zamora.

En la Plaza del Congreso, donde el gobierno bonaerense desplegó dos banderas bajo las cuales se agruparon algunos de sus funcionarios, se observaron dirigentes del peronismo provincial como Roberto Salvarezza (exministro de Ciencia durante parte del gobierno de Alberto Fernández, quien asumió como presidente de la Comisión de Investigaciones Científicas de Buenos Aires) o el médico Jorge Rachid (director del Instituto Superior de Educación del IOMA, y uno de los doctores que atendió a Milagro Sala en su internación en La Plata el año pasado). El jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, hombre de estrecha confianza de Kicillof, fue otra presencia en ese lugar. Hasta allí se acercó también el titular del gremio docente Suteba, Roberto Baradel, que estrechó en un abrazo a Bianco.

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