La mesa ultrakirchnerista que recibió a Cristina Kirchner tras el fallo lleva meses de reuniones en el conurbano

Suelen comer asado y reunirse en bastiones del kirchnerismo duro, como Ensenada y Avellaneda, pero también en distritos gobernados por Juntos por el Cambio, como La Plata. Los más fieles representantes del cristinismo en la provincia de Buenos Aires llevan meses de encuentros políticos que, no obstante, tomaron trascendencia recién el martes pasado, cuando la vicepresidenta Cristina Kirchner fue la invitada principal, tras conocerse su sentencia condenatoria por el caso Vialidad y su renuncia a las candidaturas en 2023.

La estrategia electoral es un tema central de las reuniones de este grupo, que es una derivación de otros armados que no lograron continuidad, como los encuentros de la mesa bonaerense del Frente de Todos que se había presentado en abril, en la Casa de Gobierno provincial, con el gobernador Axel Kicillof como anfitrión.

Kicillof fue uno de los comensales del último encuentro de la mesa kirchnerista de la provincia de Buenos Aires, en el que la vicepresidenta, parafraseando a Juan Domingo Perón, les pidió a los presentes tomar “el bastón de mariscal”. Según pudo saber LA NACION, en este último encuentro la convocatoria fue mayor por la presencia de la exmandataria tras el fallo por el caso Vialidad, en el que fue condenada a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.

La Cámpora tiene representación en la mesa kirchnerista bonaerense. En la cumbre del martes estuvo el jefe de esa organización, Máximo Kirchner, aunque su presencia no sería permanente en los encuentros periódicos que realiza el grupo, según pudo saber este diario. También fueron de la partida el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, y el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés “Cuervo” Larroque, quien sí participa de las reuniones con mayor asiduidad.

“La idea es que estén todos adentro: sindicatos, intendentes, La Cámpora”, sostuvieron en el entorno de uno de los protagonistas de los encuentros. En el último de ellos, además de Cristina, Kicillof y los referentes camporistas, estuvieron Carlos Castagneto (titular de la AIFP); la directora ejecutiva de Anses, Fernanda Raverta; Cristina Álvarez Rodríguez (ministra de Gobierno bonaerense); los intendentes Jorge Ferraresi (Avellaneda), Mayra Mendoza (Quilmes), Fabián Cagliardi (Berisso), Pablo Zurro (Pehuajó) y Gustavo Barrera (Villa Gesell); sindicalistas como Roberto Baradel (Suteba), Sergio Palazzo (La Bancaria), Abel Furlán (UOM), Mario “Paco” Manrique (Smata) y Omar Plaini (canillitas), y legisladores nacionales y provinciales, como Carlos Heller, Vanesa Siley, Leopoldo Moreau, Teresa García y César Valicenti, además de dirigentes como Martín Sabbatella (Acumar), Florencia Saintout (Instituto Cultural bonaerense) y Diana Conti (comisionada del Comité Nacional de Prevención de la Tortura), entre otros.

El asado es el menú predilecto en estos encuentros, que en numerosas ocasiones se realizaron en Ensenada, distrito que conduce Mario Secco, uno de los intendentes bonaerenses más identificados con el kirchnerismo duro. El Complejo Recreativo Cristina Fernández de Kirchner, en la costa de Punta Lara, donde se hizo la reunión del martes pasado, es el lugar elegido cuando los encuentros son en Ensenada. También hubo reuniones al menos en Avellaneda (bastión del exministro Ferraresi, que volvió a la intendencia) y La Plata (sede del gobierno provincial, pero municipio gobernado por Juntos por el Cambio).

Las reuniones son al menos una vez por mes y comenzaron en los primeros meses del año. “Es una mesa kirchnerista pura, así como otras vertientes [del Frente de Todos] tienen sus propias reuniones. Se repasan los temas del momento y la situación política de la provincia, no son reuniones con un tema específico”, afirmó una fuente de confianza de uno de los invitados.

“Se habla del armado para 2023, de forzar el diálogo y construir puentes”, plantearon a LA NACION desde el entorno de otro participante de las reuniones de la mesa kirchnerista bonaerense.

El origen del grupo, según confió una fuente al tanto de los encuentros, es una derivación de fotos anteriores que no tuvieron continuidad. Una de ellas es la que se tomaron referentes de los partidos que integran el Frente de Todos bonaerense en la Casa de Gobierno de La Plata, con Kicillof como anfitrión. Esa imagen, que se presentó como el inicio de la “institucionalización” del frente, no se repitió. “Se discontinuó y quedó esta mesa superkirchnerista. Tiende a ser en Ensenada y los invitados cambian”, resumió la fuente, que agregó que la temática suele ser “bastante coyuntural”.

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