“Silla eléctrica”: habló la funcionaria que renunció al Ministerio de Guzmán y mostró su postura sobre el acuerdo con el FMI
Mercedes D’Alessandro defendió la labor del titular de la cartera económica ante las críticas internas y contó por qué dejó la conducción de la Dirección Nacional de Economía, Igualdad y Género
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Después de su salida del Ministerio de Economía, la exdirectora nacional de Economía, Igualdad y Género Mercedes D’Alessandro volvió a referirse a los motivos que aceleraron su partida y dijo que no estaba “tan claro hacia dónde seguir” dentro del Gobierno. Al revelar que formó parte de las negociaciones por la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que sacudió la interna oficialista, la antes funcionaria dio por hecho que habrá que reajustar el pacto alcanzado. “El acuerdo no es de fácil cumplimiento en el contexto en el que estamos”, admitió pese a que defendió al ministro Martín Guzmán, blanco de las críticas kirchneristas.
Convencida de que la guerra entre Rusia y Ucrania “marca la cancha” sobre las tarifas y los subsidios -y en el marco de una convergencia que se alcanzó antes de que estallara la invasión-, D’Alessandro consideró que el plan con el FMI se deberá rever.
“Estamos hace bastante en una situación inédita, desde mi perspectiva no hacía falta demorar una firma. Sí entiendo que va a haber que tomar recaudos e ir ajustando los tornillos del programa. Estamos en una situación conflictiva a nivel interno, pero hay un agravamiento internacional de la situación económica y va a haber que replantearse las reglas de juego porque tampoco se puede seguir como si no existiera”, afirmó en Futuröck la exfuncionaria, que dijo haber estado en los idas y vueltas con el staff del organismo principalmente cuando se discutieron los lineamientos del gasto social.
“Son discusiones que van y vienen, con números que van y vienen. Y paso a paso. Es un proceso muy largo en donde alguien toma las definiciones y se firma así”, describió D’Alessandro. “Es un acuerdo difícil de cumplir por la situación de la Argentina hace mucho tiempo y por la crisis política que tenemos en este contexto, que no ayuda a la gestión de un gobierno”, consideró sobre el pacto finalmente alcanzado y ante los duros cuestionamientos del kirchnerismo a Guzmán, actor principal de la negociación, y al círculo más cercano al presidente Alberto Fernández.
“Silla eléctrica”
Sin embargo, a Guzmán -con quien compartió más de dos años de gestión- le dio un espaldarazo cuando analizó por qué a él le caen los dardos. “Siempre el ministro de Economía tiene una silla eléctrica, en todos los gobiernos se apunta al ministro de Economía, y muchas veces hay temas que los gobiernos los toman de manera separada”, planteó D’Alessandro.
Entonces, puso como ejemplo aquel acto en la Provincia cuando Fernández anunció que iniciaría una “guerra contra la inflación” y dijo que las decisiones que derivaron de eso fueron tomadas en distintas áreas. También reparó en que varias carteras tienen influencia cuando se determinan las políticas de ingresos. Pero advirtió que pese a esa multiplicidad de actores involucrados, “todos lo van a mirar al ministro de Economía” por los resultados.
“El ministro de Economía tuvo durante dos años tareas y misiones determinadas por el problema del endeudamiento, eso es una decisión política. Y es un problema, porque lo van a mirar por todas las otras cosas que aparecen repartidas”, dijo D’Alessandro en cuanto al rol de Guzmán.
Lo contrastó, asimismo, con el de Axel Kicillof cuando pasó por la cartera, durante el segundo gobierno de Cristina Kirchner. “Tienen que ver con cómo se llevan las acciones en cada gobierno. En otros sí estaban representados [los distintos temas] en el ministro de Economía, que tenía una visión mas fuerte. Kicillof era un ejemplo de eso. Antes de que Axel concentrara el debate económico, había una mesa muy grande con la AFIP, Industria, Economía... Son formas de armar un Gabinete”, dijo la exfuncionaria sobre el actual gobernador, que es una figura clave para el kirchnerismo en política económica.
No obstante, aseveró que ahora Economía debería rever si esa división de tareas es efectiva o si habría que organizarse de otra manera. “Esa es la pregunta. Más que si el ministro de Economía está ocupándose o no, si tenemos un gabinete económico que se está ocupando de los problemas y si esa forma está dando resultados o no”, indicó la doctora en Economía, visiblemente disgustada por algunas metodologías de la administración nacional.
Los motivos de su partida
Esas disidencias fueron las que también precipitaron su salida de la Dirección de Economía, Igualdad y Género y así lo planteó. “En todo caso las limitaciones que encontramos muchas de las mujeres que hacemos cosas es cómo crecés después de eso, porque lo interesante hubiese sido ‘y ahora qué’ dentro del Gobierno. Y el ‘ahora qué’ dentro del Gobierno no fue tan claro hacia dónde seguir”, remarcó la exfuncionaria que arribó desde Estados Unidos a sumarse al equipo de Guzmán y así “incorporar la demanda del movimiento feminista a la programación económica”.
Ya esa cuestión de la falta de maniobra que supuestamente tenía se había manifestado cuando renunció, a fines de marzo. “Quedarme ahí 20.000 años no tiene sentido, porque si uno se pone un objetivo y los cumple, en mi caso soy una persona que le gusta seguir avanzando y creo que si me quedaba ahí era repetirme, volver a hacer lo mismo”, comentó D’Alessandro, quien también consideró que cuando las cosas funcionan “no necesitan una persona” y que fue reemplazada por Sol Prieto.
Fue en ese momento cuando la doctora en Economía criticó la falta de mujeres en el Gabinete de Fernández y lo comparó con el de Gabriel Boric, el presidente chileno que llegó con su comitiva a la Argentina esta semana. “Una ve las fotos y es evidente, estos días circularon las fotos del Gabinete de Boric con el de nuestro gobierno, ayer en la reunión del Ministerio de Economía con representantes de los trabajadores y las trabajadoras, de las empresas, y la mayoría de esas fotos habla por sí misma: la ausencia de mujeres en los espacios de toma de decisiones, en temas centrales para las mujeres”, cuestionó D’Alessandro.
Y siguió: “Hablar de economía feminista no es solo hablar de tópicos, de temas, sino también de la representación de las mujeres en el momento de definirlos. Las fotitos esas no son solamente una ilustración sino que también reflejan la realidad de lo que aparece ahí”.
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