La frase de Pablo Moyano que desalienta un inminente paro de la CGT
El dirigente camionero desestimó que la central obrera llame hoy a una huelga porque “en enero y febrero los laburantes se toman vacaciones”
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Tras su primer desafío al gobierno de Javier Milei, la CGT convocó para hoy a un Comité Central Confederal, su máximo órgano ejecutivo y del que participan las regionales de todo el país. Se resolverá un plan de lucha y algunos dirigentes amagan con llamar a un paro general, como exigió la semana pasada el ferroviario Omar Maturano. Sin embargo, una reciente frase de Pablo Moyano, uno de los tres jefes de la central obrera, desalentó un medida de fuerza inminente.
“Creo que ya hay que instalar un plan de lucha. En enero y febrero los laburantes se toman vacaciones. Entonces tomar una medida en ese momento no tiene mucho valor. Pero sí ir movilizando con actos, plenarios, en las regionales del interior, y que en cada provincia visiten a sus diputados y senadores para que después no voten leyes contra los derechos de los trabajadores. Alerta y movilización sí”, dijo Moyano el martes en una entrevista en la Revista Zoom. De esta manera, blanqueó su postura para el Confederal que comenzará a partir de las 12 en el salón Felipe Vallese de la CGT.
Habría casi unanimidad entre los sindicatos para activar un plan de lucha en rechazo al decreto de Milei, que modificó, entre numerosas cuestiones, la legislación laboral y el sistema de salud. El malestar se agudizó al conocer la letra chica de la ley ómnibus enviada ayer al Congreso. Causó enojo y sorpresa, sobre todo, el capítulo en lo relativo a las restricciones a la protesta social. “Es despótico”, lo calificó ante LA NACION un jerárquico de la CGT. A pesar de que el enfrentamiento con el Gobierno va camino a elevarse, la cúpula cegetista apostaría por ahora a la prudencia y a seguir con su estratégica hoja de ruta. Ayer, con la marcha a los Tribunales, se dio el primer paso. Hoy se activará un plan de lucha a la espera de que sea la Justicia o la misma política la que frene las ambiciones reformistas de Milei.
“Hay que voltear el decreto de Milei en la Justicia, en la política o en la calle”, dijo ayer Héctor Daer, otro de los jefes de la central obrera. La enumeración no fue casual: los gremios ya presentaron un amparo contra el DNU y avanzaron en gestiones con legisladores y gobernadores peronistas y opositores para articular una oposición al libertario en el Congreso. Agotadas esas instancias, recién ahí la CGT estaría dispuesta a llamar a un paro general. Creen que podría ser en marzo. La última huelga de la central obrera fue el 29 de mayo de 2019, la quinta que activaron durante la gestión de Macri.
“Creo que mañana [jueves] vamos a definir una medida de acción directa contundente”, señaló anoche Daer, en TN. “Mañana [jueves] lo vamos a debatir en el Comité Central Confederal “, insistió y detalló que no adelantaría nada más, por respeto a Moyano y Carlos Acuña, sus compañeros en el triunvirato de mando.
El Confederal de la CGT debiera votar un paro activo nacional con marchas masivas en Plaza de Mayo y en todo el país que sea el comienzo de un plan de lucha. La derrota de este plan de guerra será obra de los trabajadores.
— Gabriel Solano (@Solanopo) December 28, 2023
Las dos vertientes de la CTA y la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (Utep) tendrá hoy también un plenario para definir medidas de protesta. Es posible que se desmarquen de la CGT y activen algún reclamo inmediato, pero siempre en busca de la unidad en la acción con la central peronista. La izquierda sindical, en tanto, exige desde ayer con fuerza el llamado a una huelga.
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