La fractura del peronismo de Santa Fe tensa la disputa entre Omar Perotti y Agustín Rossi

ROSARIO.-Después de un cierre de listas agitado, y un arranque de la campaña electoral crispado, los dos sectores en pugna, encabezados por el gobernador Omar Perotti y el ministro de Defensa de la Nación, Agustín Rossi, desgranaron miradas contrapuestas, que tienen un punto en común: la relación con el polo de poder del Frente de Todos en Buenos Aires.

Perotti se jactó este martes de que “nadie” le impuso la fórmula desde Buenos Aires. “No nos gusta que nos impongan cosas. Nos gusta definir y trabajar desde Santa Fe”, afirmó el gobernador, tres días después de un cierre de listas intenso en esta provincia, que volvió a mostrar que el motor de las negociaciones para el armado electoral se terminó de definir en Buenos Aires, luego de que el viernes a la tarde Cristina Fernández acordara con Perotti, un dirigente que por su perfil nunca estuvo cerca de la vicepresidenta, cómo iba a ser la lista del Frente de Todos en esta provincia.

Perotti cedió su anhelo de que Roberto Mirabella, quien ocupó el lugar que dejó en el Senado cuando asumió en la gobernación, encabezara la lista para el Senado. En su lugar hubo consenso para que liderara la boleta el periodista deportivo Marcelo Lewandovsky, excomentarista de Fútbol para Todos, enrolado en el sector de la exministra de Hábitat María Eugenia Bielsa. La trayectoria en la TV le dio un capital hoy escaso y apreciado en la política como es un alto nivel de conocimiento, el principal déficit de Mirabella.

La condición de ese acuerdo era que María de los Ángeles Sacnun, actual senadora, secundara a Lewandovsky, y Mirabella, el delfín de Perotti, encabezara la lista de diputados nacionales. Perotti se anotó como senador suplente, algo que generó suspicacias en el otro frente. Aunque en una tipografía más pequeña, el nombre del gobernador estará en la boleta.

En diálogo con LA NACION, Perotti consideró que “el peronismo de Santa Fe tiene que tener una renovación y no se puede ir con los mismos candidatos desde 2005”. Lo dijo en clara referencia a Rossi. El gobernador está convencido de que el crecimiento de la gestión en Santa Fe –según su mirada- en base al plan de vacunación y de una reactivación del consumo que dio la app Billetera Santa Fe –que reintegra el 30 por ciento del valor de las compras- y un plan de obra pública cambió la mirada de la gente en medio de la posible salida de la emergencia por la pandemia.

Unas horas antes de esa reunión en Buenos Aires, en la que se definió el acuerdo entre Perotti y Cristina Kirchner, Rossi había lanzado su candidatura a senador con la actual vicegobernadora Alejandra Rodenas, y con el concejal del Movimiento Evita Eduardo Tognolli encabezando la lista de diputados nacionales. Parecía no haber vuelta atrás, aunque las negociaciones continuaron hasta el lunes al mediodía, cuando se podían modificar las listas. Rossi ofreció bajarse y encabezar la lista de diputados, pero el gobernador de Santa Fe no aceptó.

A mediados de junio pasado, el presidente Alberto Fernández le advirtió a Perotti durante una caminata por los jardines de Olivos que el ministro de Defensa debía ser el primer candidato a la Cámara alta. El gobernador rechazó esa idea. Y luego acordó con Cristina Fernández.

Rossi está convencido que la jugada de Perotti apunta a terminar con su salida del Frente de Todos. Una semana antes de la reunión entre el gobernador y el presidente por los jardines de Olivos, Perotti lanzó Hacemos Santa Fe, un nombre que es casi idéntico al Hacemos por Córdoba, de Juan Schiaretti, gobernador cordobés, quien comparte con el rafaelino el mismo asesor político: Guillermo Seita, el creador del eslogan. Desde el entorno del gobernador salieron a replicar que el nombre era una casualidad. Nadie lo creyó.

La mirada del ministro de Defensa es que Perotti busca alejarse del gobierno nacional. Y señala que él es la garantía de que el peronismo en Santa Fe jugará siempre en el Frente de Todos.

“Eligiendo su heredero”

En una charla con los militantes de La Corriente a través de Facebook Live, horas después del cierre de listas, Rossi fue claro al explicar porqué Perotti estaba empecinado en que Mirabella encabezara la lista de senadores, donde el gobernador va como suplente. “Estaba eligiendo su heredero dentro de dos años…subsumía a todo el PJ detrás de un hecho hegemónico. El próximo paso era sacar al peronismo del Frente de Todos y emparentarlo con el peronismo cordobés”, afirmó el ministro de Defensa.

El problema que surge por fuera del contexto de la pelea electoral es la administración del gobierno de Santa Fe, donde hay varios dirigentes alineados con Rossi. Por ahora ninguno va a dejar el cargo, según prometieron el martes. “Nunca va a estar en juego la gobernabilidad porque esto es sólo una interna, una disputa electoral que se concretó en varias ocasiones en Santa Fe. Jamás perjudicaría la gestión provincial”, advirtió Rossi a LA NACION.

Lo que aparece como un escenario complejo en un futuro cercano es si el resultado de la PASO va a afectar la gobernabilidad de la gestión de Perotti, que jugó fuerte en este turno electoral nacional. La vicegobernadora actual secunda a Rossi en la lista de senadores. La exjueza tiene el respaldo de la mayoría de los senadores provinciales del peronismo, entre ellos, Armando Traferri, que fue citado para el 23 de agosto donde se prevé que lo imputen como “organizador” de una asociación ilícita que manejaba el juego clandestino en Santa Fe.

Marcelo Lewandovsky, el primer candidato de Perotti, buscó bajar el tono crispado de la campaña en esta primera etapa. En diálogo con LA NACION, consideró que “hay que bajar el tono beligerante y poner las energías en los problemas que hay que resolver”. Reconoció además que “las tensiones dentro del peronismo terminan por favorecer a la oposición”. Sin embargo, admitió que “si la pelea electoral está planteada con una estrategia para debilitar al gobierno de Perotti el que se va a terminar favoreciendo es a Juntos por el Cambio”.

Lewandovsky, como varios dirigentes de ese espacio, dijo que la fórmula de la “unidad” –que no existe en los papeles- la expresa ese espacio. Las declaraciones del ministro del Interior Wado De Pedro al periodista Iván Schargrodsky, publicadas en el sitio Cenital, eran citadas por los dirigentes cercanos a Perotti como una especie de confirmación de que la lista que encabezan Lewandovsky y María de los Ángeles Sacnun es la que tiene el respaldo del gobierno nacional. “Lamento que el ejemplo de Cristina de priorizar el interés colectivo por sobre los individuales no haya llegado a todos los dirigentes”, aseguró De Pedro en referencia a la situación de Santa Fe.

Rossi asegura lo contrario. Señaló que la lista de Santa Fe De Pie “es la que va a defender el modelo de país que nos propone Alberto Fernández y Cristian Fernández, representando absolutamente a todos los sectores de la provincia de Santa Fe”. “El perottismo tiene fecha de finalización en 2023 y ya tiene un acta de defunción en este proceso electoral”, lanzó con dureza. La estrategia del ministro de Defensa va a apuntar a exaltar su histórico rol dentro del kirchnerismo, un espacio del que nunca se apartó un milímetro ni mostró fisuras, señalaron cerca del ministro de Defensa.

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