La Cámpora gana espacio en el entorno kirchnerista
Creada por Máximo Kirchner, sus dirigentes ocupan cargos relevantes
Suelen juntarse por las noches en el restaurante y centro cultural El Tasso, en San Telmo. Salvo algunas excepciones, casi ninguno viste de traje, incluso cuando visitan a Néstor Kirchner en la quinta de Olivos. Prefieren los jeans caídos, las zapatillas, y las camperas informales.
Se hicieron fuertes en el Gobierno tras la pelea con el campo, en 2008, y tienen como mentor, hoy algo alejado de la militancia, al hijo mayor del matrimonio presidencial, Máximo.
En los últimos meses, varios de los militantes de La Cámpora, la agrupación que creó el hijo de los Kirchner en Río Gallegos, escalaron posiciones en la estructura gubernamental y frecuentan con asiduidad la quinta presidencial. Tienen revista propia, sitios de Internet, militan en comedores, se expanden por las provincias y llegaron a la Universidad de Buenos Aires para promover las ideas del oficialismo dentro de la Federación Universitaria (FUBA).
Los jóvenes K están esparcidos en tres líneas centrales, cuya cabeza central es La Cámpora. La agrupación está dirigida hoy por Andrés Larroque, un militante de 32 años que presidió en 1996 el centro de estudiantes del Colegio Nacional de Buenos Aires. Creó comedores comunitarios y fundó el Frente Barrial 19 de Diciembre de Villa Lugano, Bajo Flores y Villa Soldati. Su mayor logro fue acceder a la Subsecretaría para la Reforma Institucional y Fortalecimiento de la Democracia, que depende de la jefatura de Gabinete. Su llegada provocó el alejamiento de la entonces titular, Marta Oyhanarte, que denunció "obstáculos" por parte de Aníbal Fernández para ejercer su función.
Dentro de su subsecretaria trabaja también Jordana Timerman, hija del canciller Héctor Timerman, nombrada asesora el pasado 9 de junio. El decreto de nombramiento requirió por parte de Aníbal Fernández una cláusula de excepcionalidad. Por ser de nacionalidad norteamericana, la joven no podía acceder a un cargo en la administración nacional. De todas maneras, contaron fuentes de La Cámpora a LA NACION, la hija del canciller no milita en la agrupación.
La cercanía de Cabandié
Detrás de Larroque y de muy buena llegada al matrimonio presidencial está el legislador porteño Juan Cabandié, amigo de Máximo, que supo ganarse la confianza de Néstor y de Cristina Kirchner, quien suele repetir que quiere a Cabandié como a sus hijos. Le dispensa un trato de cariño. Cabandié fue el nieto número 77 recuperado por las Abuelas de Plaza de Mayo y hoy es secretario de la juventud en el PJ a nivel nacional.
"La Cámpora es la nave insignia de todas las agrupaciones", resumió a LA NACION Federico Martelli, secretario general del Movimiento de Unidad Popular (MUP), otra de las organizaciones de jóvenes kirchneristas. Martelli es director de Comunicaciones en Red del Ministerio de Desarrollo Social, que conduce Alicia Kirchner. "Mi trabajo es fortalecer a los medios del interior y a las pymes barriales para que tengan acceso a la pauta oficial", explicó Martelli.
Otro joven funcionario con peso propio es Mariano Recalde, presidente de Aerolíneas Argentinas. La Presidenta lo llama Marianito. Es hijo del diputado Héctor Recalde, mano derecha del líder de la CGT, Hugo Moyano. Algunos jóvenes kirchneristas atribuyen su nombramiento a su militancia en La Cámpora. Otros, en cambio, definen su llegada a Aerolíneas como un gesto hacia Moyano.
Recalde, Cabandié y Larroque siempre andan juntos en los actos de la Presidenta en la Casa Rosada. Son el trío de jóvenes K más influyentes en el mundo oficialista.
La tercera línea es José Ottavis, también funcionario. Es secretario de la JP en la provincia de Buenos Aires, uno de los bastiones en los cuales Kirchner ordenó fortalecer la militancia. Aunque fue su socio fundador y la llevó a nivel nacional, Ottavis está hoy algo alejado de La Cámpora. Ganó influencia en el equipo del ministro de Economía, Amado Boudou, que ya recorre la provincia y está lanzado a la carrera por la gobernación. Tiene el privilegio de contar con despacho propio en la Casa Rosada: es director de Estudios Políticos y Monitoreo de la Secretaría General de la Presidencia, que comanda Oscar Parrilli.
Otro que accedió a un cargo es Iván Heyn, de 32 años, también militante de La Cámpora. Fue nombrado presidente de la Corporación Puerto Madero. Los jóvenes en el poder se reparten, además, en varias dependencias estatales. "Tenemos muchos militantes mezclados como asesores", confió una fuente.
La juventud, al mando de La Cámpora, prepara para el 14 de septiembre en el Luna Park el lanzamiento de una corriente más amplia: los "Sub 45". Incluyen en el grupo a Diego Bossio, director de la Anses, y una de las últimas incorporaciones de Néstor Kirchner a los picaditos de los viernes en Olivos.