Karina Milei y Patricia Bullrich sellaron el pacto para fusionar los bloques en la provincia durante una cumbre en Casa Rosada
La secretaria general de la Presidencia y la ministra de Seguridad encabezaron un encuentro con diputados y senadores en Buenos Aires para oficializar la unificación de las bancadas
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Todo estaba hablado hace días, pero hoy terminaron de urdir la jugada durante una cumbre en la Casa Rosada. La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, sellaron esta tarde el pacto para unificar sus bloques legislativos en la provincia de Buenos Aires.
La excusa formal del acuerdo es sumar musculatura para darle batalla a Axel Kicillof en el principal bastión del kirchnerismo. Sin embargo, el movimiento de fichas implica, ante todo, un mensaje a Mauricio Macri, jefe de Pro, de cara a la discusión por el armado electoral de 2025.
Después de varias semanas de negociaciones -el anuncio se había postergado por el viaje de Milei a los Estados Unidos-, la hermana del jefe del Estado y flamante presidenta del partido nacional libertario cerró el trato para que los diputados y senadores bonaerenses que responden a Bullrich y Diego Valenzuela, intendente de Tres de Febrero, se incorporen de manera oficial a las bancadas de La Libertad Avanza en Buenos Aires.
Hubo un buen clima en el Salón de la Ciencia Argentina de la Casa Rosada. “Es la evolución natural del acuerdo con Milei. Patricia es parte del Gobierno y ya coordinábamos miradas legislativas. Queremos llevar la expresión del proyecto de cambio del Presidente a la provincia”, aseguró uno de los referentes de Pro Libertad que participaron de la reunión.
Además de Bullrich y Karina Milei, asistieron las autoridades de los bloques de ambos espacios -Agustín Romo (LLA), Florencia Retamoso (Pro Libertad), Carlos Curestis (LLA) y Daniel Reich (Pro Libertad)-, Sebastián Pareja, armador del mileísmo en Buenos Aires, y Valenzuela, el intendente del conurbano que luce más alineado al proyecto de Milei. A partir de ahora, Retamoso y Reich serán las vicepresidentas de las bancadas libertarias.
Apenas terminó el cónclave, los libertarios y bullrichistas expresaron que se unieron para “defender” a los bonaerenses de la “voracidad impositiva” de Kicillof, con la promesa de impulsar proyectos para desregular la economía o reducir la presión tributaria y el costo de “la producción, los servicios y el comercio”. “Esta unidad en la acción tiene un solo fin: que los ciudadanos de la provincia de Buenos Aires sean parte del país de la libertad que construye el presidente Milei”, concluyeron, a través de un comunicado.
La maniobra que ejecutaron Karina Milei y Bullrich impacta en el tablero de la provincia, pero aún no altera la correlación de fuerzas que existe en la Legislatura. Es que los libertarios todavía lamentan las deserciones de los “díscolos”, la línea interna que encabeza Carlos Kikuchi, exarmador nacional de Milei. Con el pase de los cinco diputados de Bullrich, LLA tendrá doce representantes y quedará a tiro de empardar a Pro como la segunda minoría. Ya sumaron a Jazmín Carrizo (BA Libre), del sector de Carolina Píparo, quien volvió de forma sorpresiva al ecosistema libertario tras una gestión de Karina Milei. Y en los próximos días aspiran a finiquitar un trato con el marplatense Guillermo Castello (Libre). Si lo anexan, llegarán a 13 y quedarán empatados con el grupo Agustín Forchieri (Pro), hombre de confianza de Diego Santilli.
En el caso del Senado, Pro Libertad solo aportará una senadora –Reich– al bloque de tres representantes que comanda Curestis. No obstante, ya activaron gestiones para sumar a Betina Riva, cercana a Píparo. La fusión, dicen, podría trasladarse a los concejos deliberantes de municipios, como ya ocurrió en San Andrés de Giles. “Vamos a analizar caso por caso con Pareja”, dicen los bullrichistas, que soltaron amarras de Pro y están decididos a correr de la cancha a Macri.
Por ahora, la convergencia bonaerense no tendrán un correlato en el Congreso nacional, donde los bullrichistas suelen votar en coincidencia con los intereses del oficialismo y reniegan de las instrucciones de la jefatura de Pro. En la Legislatura porteña, en tanto, los alfiles de la ministra no ocultan su identificación con el grupo que comanda Karina Milei, que endureció sus posturas frente a los proyectos enviados por Jorge Macri.
Tensión con Macri
Mientras el expresidente Macri rechaza una fusión con LLA y toma distancia de la Casa Rosada por sus diferencias respecto a la capacidad de gestión, el manejo de la política exterior o el pliego de Ariel Lijo, Bullrich se diferencia de su exsocio y acelera la convergencia con los libertarios. Al Presidente no solo lo defiende ante la opinión pública, sino que también les acerca a sus leales en Pro, quienes prometen acatar los lineamientos de la Casa Rosada y apoyar sin peros el rumbo del oficialismo. Así, Bullrich pretende limitar la influencia de Macri, que se quedó con las manijas del partido y controla estructura orgánica, en el momento de la disputa por conformación de las listas para las próximas legislativas.
Los armadores de Karina Milei y los delegados de Bullrich apuntan a conformar un frente anti-Kicillof en Buenos Aires, pero también a discutir de manera formal la mejor estrategia para converger en las legislativas de 2025. Hoy consensuaron comenzar a coordinar acciones en los territorios para posicionarse como la principal “alternativa opositora” al kirchnerismo. A lo largo de la charla, coincidieron en que el oficialismo requerirá “robustecer” su armado en la provincia de Buenos Aires y, ante todo, el conurbano, un esquivo para Milei.
En ese sentido, los libertarios y bullrichistas se comprometieron a exhibir una oposición férrea al peronismo en Buenos Aires. De esa manera, apuntan a dejar expuestos los acuerdos entre un sector del macrismo y la UCR para “colaborar” con Kicillof, como ocurrió con la suba del impuesto inmobiliario provincial. Su primer test será la discusión por el Presupuesto 2025.
A sabiendas de que la coyuntura económica y social marcará el pulso de las conversaciones con Pro, los arquitectos políticos de Milei congelan las tratativas con Macri para construir una coalición electoral y apuestan a seducir a dirigentes afines que sean competitivos en Buenos Aires para que se muden a La Libertad Avanza en las elecciones de medio término. “El que se quiera sumar, que se sume”, sentenció Karina Milei, durante la reunión. Cerca del “El jefe”, destacan que los bullrichistas se sumaron “sin negociar nada a cambio” o reclamar un acuerdo partidario. Otro tiro por elevación a Macri.
Bullrich y Valenzuela estrecharon lazos después de que Cristian Ritondo, con el aval de Macri, se quedó con el control de Pro en Buenos Aires. Fue después de que el macrismo le vaciara el partido a Reich, extitular y esposa de Valenzuela, con una ola de renuncias. En ese momento, la ministra y el intendente de Tres de Febrero denunciaron un “golpe institucional”. Hoy, dieron otro paso para confluir con Milei y, atentos a la reconfiguración del mapa político, sospechan que su jugada provocará un efecto dominó en Pro y la UCR. “No habrá un circuito partidario y muchos dirigentes se van a tentar con venir del lado del ‘cambio’”, dicen cerca de los adversarios de Macri.
Por el momento, los macristas se repliegan y se alistan para competir en Buenos Aires. Pese a la renuencia de los estrategas de LLA a diseñar un esquema de convivencia de partidos -una coalición o frente electoral-, confían en que Milei no podrá prescindir del poder territorial de Pro, que tiene una extensa red concejales e intendentes, para enfrentar al kirchnerismo en las urnas.
El bloque #ProLibertad se une a #LLA en la Provincia de Buenos Aires. Juntos, vamos a darle la estocada final a un kirchnerismo en decadencia y construir la Provincia y el país de la libertad que nos propone el Presidente @JMilei.
— Florencia Retamoso (@florretamoso) October 1, 2024
Vamos a luchar contra la voracidad impositiva… pic.twitter.com/jvs6GTtuuG