Juntos por el Cambio advirtió que la crisis se agrava por una “fuerte debilidad política” del Gobierno
Los presidentes de los partidos que integran la coalición criticaron las “luchas intestinas” del oficialismo cuyo “único objetivo es el poder”; volverán a encontrarse el martes 19
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Hace días que la cúpula de Juntos por el Cambio está en alerta. Preocupados por los fuertes vaivenes y la “profundización de la incertidumbre” que se desataron tras la renuncia de Martín Guzmán, los dirigentes opositores se reunieron de manera virtual para monitorear el avance de una crisis económica y política que ven “agravarse” en todo el país y “la debilidad política” del gobierno de Alberto Fernández.
En el encuentro por Zoom participaron los presidentes de partidos de la principal coalición opositora: Patricia Bullrich (Pro), Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica), Gerardo Morales (Unión Cívica Radical) y Miguel Ángel Pichetto (Encuentro Federal Republicano).
Durante una hora y media, los jefes partidarios analizaron la secuencia de hechos de la última semana, a partir de la llegada de Silvina Batakis al ministerio de Economía. Ante lo que describen como la “desorganización y la disputa entre facciones” del Frente de Todos, la coalición opositora redobló esfuerzos para exhibir una postura unificada. En busca de “preservar la consistencia y la unidad de Juntos por el Cambio”, así como evitar aparecer fogoneando la crisis, decidieron dar a conocer su análisis a través de un comunicado.
“Observamos con mucha preocupación una fuerte debilidad política que genera graves consecuencias en millones de argentinos”, comienza el texto difundido tras el encuentro. “Estamos frente a un gobierno dividido en luchas internas intestinas cuyo único objetivo es el poder, y esto agrava aún más la difícil situación económica, social, política e institucional”, plantearon.
En esa línea, señalaron que “los cambios y las medidas de la última semana han profundizado la pérdida del poder adquisitivo de manera significativa, lo que implica cada día una menor capacidad de compra de los argentinos”, al tiempo que generaron “una alta volatilidad del dólar y graves restricciones a la industria por la falta de insumos para la producción, acrecentado además la falta de gasoil, entre otros problemas”.
Los líderes partidarios resolvieron, además, convocar a un reunión de la mesa nacional de Juntos por el Cambio para el martes 19, que se realizaría en la sede de Pro. El objetivo: volver a evaluar el estado de la crisis y ampliar la discusión al resto de los referentes de la coalición.
Entre los dirigentes opositores prima la cautela ante una situación de crisis que, reconocen, aún se mantiene en evolución y sobre la que se desconoce el alcance. “Estamos siempre atentos, pero preferimos dejar esta semana –antes de la reunión– para ver cómo sigue”, señaló un jerarca de la coalición.
La escalada de la crisis reafirmó la decisión que había tomado la coalición opositora el año pasado: tomar distancia del Gobierno, evitar caer en la trampa de llamados al diálogo sectorizados o reuniones individuales y circunscribir los contactos al ámbito del Congreso.
En diálogo con LA NACION desde Oxford, Inglaterra, a donde viajó para participar de un curso, Patricia Bullrich señaló: “Juntos por el Cambio está trabajando con la responsabilidad que la gente nos dio, viendo con desazón lo que está pasando en el país y la lucha de poder en el Gobierno”.
“Si el Gobierno nos llama, yo no voy. ¿A qué nos van a llamar? ¿A que nos hundamos con ellos en el bote? No. Yo prefiero que Juntos por el Cambio sea una reserva democrática para la Argentina”, agregó más tarde, entrevistada por LN+.
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