Juntos por el Cambio anticipó a Massa su rechazo a debatir la expropiación de Vicentin en sesión remota
Los líderes del interbloque de diputados de Juntos por el Cambio, Mario Negri (UCR), Cristian Ritondo (Pro) y Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica), plantearon ante el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, su decisión de no avalar el debate de proyectos conflictivos -como la posible expropiación de la empresa Vicentin- bajo la modalidad de las sesiones remotas.
Durante una reunión que compartieron en el despacho de Massa, los legisladores acordaron esperar hasta la semana próxima para definir la renovación del protocolo de funcionamiento remoto de la Cámara de Diputados, cuyo plazo de vigencia venció la semana pasada. Para renovarla por otros 30 días todos los bloques deben prestar su consentimiento, y Juntos por el Cambio pretende que el oficialismo, durante ese lapso, no impulse iniciativas conflictivas, como el impuesto extraordinario a las grandes fortunas (que el oficialismo anunció pero hasta ahora no presentó) y la eventual expropiación de la firma Vicentin.
"Las sesiones remotas son excepcionales y son para discutir temas donde se está de acuerdo. Con estos temas donde el debate será profundo y de muchas horas, creo que no están dadas las condiciones para hacerlo por vía remota . Habrá que buscar una manera de hacerlo presencial", había advertido ayer el diputado Negri.
"Las sesiones virtuales solo pueden llevarse adelante con proyectos que reúnan consenso", enfatizó el diputado Ferraro. "Los temas controversiales o de alta sensibilidad política -añadió- son imposibles de tratar en forma remota. Es importante no cercenar el debate parlamentario y el espíritu del legislador".
En rigor, el proyecto de ley sobre Vicentin -el que genera más inquietud en las filas de Juntos por el Cambio- no ingresó aún en el Congreso, aunque se espera que lo haga por el Senado, donde el oficialismo cuenta con mayoría propia para aprobarlo en un veloz trámite. En la Cámara de Diputados el escenario es distinto: aquí, el bloque del Frente de Todos, que conduce Máximo Kirchner, cuenta con 119 integrantes, por lo que necesitan el aporte de otros 10 legisladores de bloques opositores para alcanzar el quorum. El oficialismo confía en reunir esa mayoría, aunque reconoce que los márgenes para la aprobación serán muy estrechos si el proyecto que envíe el Poder Ejecutivo propone la expropiación de la empresa para la posterior estatización.
Otro sería el panorama si, contrario a lo anunciado, el Gobierno desiste de impulsar la expropiación de Vicentin para proponer, como alternativa, su reconversión en una empresa mixta de capitales públicos y privados, con la incorporación de cooperativas y pequeños productores acreedores de la compañía como futuros accionistas. Esta iniciativa, que genera más adhesiones, es la que alienta silenciosamente el sector moderado del PJ en la cual se enrolan Massa, el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, como también el bloque de diputados de Consenso Federal, que responden al ex ministro de Economía Roberto Lavagna.
El temor de Juntos por el Cambio es que el oficialismo pretenda apurar la discusión de este tema en una sesión remota en ambas cámaras; por ello, propusieron esperar a la semana próxima para definir la continuidad de la vigencia del protocolo de las sesiones remotas. Pese a sus suspicacias, confían en que el Gobierno demore el envío del proyecto sobre Vicentin; si es así, reanudarán el martes próximo las sesiones en la Cámara baja.
De momento, hay al menos tres temas consensuados en agenda: la nueva ley de economía del conocimiento, la regulación del teletrabajo (que recibiría dictamen el lunes próximo) y la nacionalización del sistema de transporte público SUBE (Sistema Único de Boleto Electrónico).
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