Juicio político contra la Corte: el Gobierno creyó lograr la adhesión del gobernador Bordet, pero al final no acompañó
Su nombre figuró en el comunicado oficial de la Casa Rosada y en el primer borrador del pedido de juicio político, pero en el entorno del gobernador entrerriano lo negaron
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Finalmente eran once y no 12. El Gobierno creyó y comunicó que había obtenido el apoyo de la mitad de los gobernadores para avanzar con el pedido de destitución de lo supremos. Pero uno de ellos no se convenció de la iniciativa presidencial.
Para avanzar en su embestida contra el máximo tribunal y pedir la destitución de los supremos, el Presidente mantuvo hoy una reunión con ocho gobernadores en la Casa Rosada, más otros tres conectados vía videoconferencia. Entre los que estuvieron de forma remota figuró el mandatario de Entre Ríos, Gustavo Bordet. Cuando finalizó el encuentro, la Presidencia difundió un comunicado y el texto que se presentará en la comisión de Juicio Político con los nombres de la mitad de los gobernadores del país, incluido el entrerriano. Pero el mandatario del PJ no será de la partida, confirmaron en su provincia.
“No firmó el comunicado ni va a acompañar la petición contra los miembros de la Corte”, dijeron fuentes oficiales de Entre Ríos a LA NACION.
En la Casa Rosada aseguraron que “Bordet habló con el Presidente antes de que empezara la reunión y le dijo que acompañaba”. Agregaron que “estuvo presente toda la reunión por Zoom donde se decidió la firma y nunca dijo que no firmaba”.
La presidenta de la comisión de Juicio Político de Diputados, Carolina Gaillard, es entrerriana y del bloque del Frente de Todos. Si bien el gobernador de su provincia no acompaña la iniciativa del Gobierno, la diputada -que mañana recibirá el escrito del Presidente- también tiene muy buena sintonía con Fernández.
Durante toda la tarde hubo llamados cruzados de funcionarios nacionales, gobernadores y colaboradores para ejercer presión sobre la lista de adherentes a la iniciativa del Presidente contra los supremos. Jorge Capitanich (Chaco), Axel Kicillof (Buenos Aires), Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Alicia Kirchner (Santa Cruz) que tienen las posturas más beligerantes contra la Corte, presionaron por el sí. De hecho, algunos de ellos ya le habían pedido a Fernández que avanzara con el juicio político en la reunión de diciembre, una idea que recién prendió en el Presidente con el Año Nuevo.
“Somos una mayoría de gobernadores”, llegó a decir el mandatario chaqueño, de buena llegada a Cristina Kirchner, a la salida de la reunión en la Casa Rosada. Pero las firmas, al menos por ahora, no llegan a la mitad de los mandatarios provinciales del país.
El Gobierno -que durante el día pedía tiempo para dar a conocer la lista- y los gobernadores más convencidos trabajaron durante el mediodía en convencer a los caciques provinciales más dubitativos. A algunos no lograron convencerlos. Además de Bordet, otros dos mandatarios peronistas, el sanjuanino Sergio Uñac y el puntano Alberto Rodríguez Saá, tampoco acompañaron la iniciativa. En diciembre, los tres habían acompañado al Presidente cuando apeló el fallo de la Corte que repuso fondos de la coparticipación a la Capital Federal.
En la reunión de hoy, en tanto, se ausentó el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, quien, pese a integrar el Frente de Todos, jamás acompañó la decisión del Presidente de ir contra la Corte. Tampoco acompañaron al Gobierno el mandatario cordobés, Juan Schiaretti, ni los cuatro mandatarios de Juntos por el Cambio.
Los gobernadores “aliados” que en su momento emitieron críticas a la Corte, tampoco respaldaron la decisión de intentar destituir a los supremos. Se trata de Arabela Carreras, de Río Negro; Omar Gutiérrez, de Neuquén; Gustavo Sáenz, de Salta, y Oscar Herrera Ahuad, de Misiones.
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