Juicio de Vialidad: “No era una persona de máxima confianza de Néstor Kirchner”, sostuvo el abogado de Abel Fatala

“Abel Fatala no era una persona de máxima confianza de Néstor Kirchner. Esto es un invento, una mención que hace la fiscalía y que no tiene ningún tipo de justificación, ni en el expediente, ni a partir de conocer la historia pública de Fatala”, dijo el abogado Lucio Simonetti, defensor de Abel Fatala, exsubsecretario de Obras Públicas, como parte de su alegato en el juicio oral de la causa Vialidad.

Según la acusación del fiscal Diego Luciani, Fatala, que trabajaba bajo la órbita de José López en la Secretaría de Obras Públicas -dependiente del Ministerio de Planificación-, fue responsable por haber omitido realizar sus funciones y controlar a la Dirección Nacional de Vialidad. Y parte de la acusación en esta causa reside en que los exfuncionarios implicados en la maniobra de direccionamiento de contratos de obras a Lázaro Báez y falta de control sobre la ejecución de las mismas habían sido expresamente designados por Néstor Kirchner para llevarla adelante. Simonetti negó que Fatala tuviera cercanía con Kirchner y dijo que “no era alguien de procedencia kirchnerista pura, de paladar negro, por llamarlo de alguna manera”.

Y cuestionó la interpretación que hizo el Ministerio Público Fiscal sobre el rol de su defendido. Dijo que nunca estuvo regulado mediante una norma o acto administrativo el rol de control que le cabía a Fatala sobre la DNV. “La Subsecretaría de Obras Públicas no tenía competencia para inmiscuirse en lo que sucedía en la DNV”, dijo el abogado.

“La Subsecretaría de Obras Públicas no tenía ningún tipo de intervención en la DNV. Tenían relaciones a partir de que estaban en el mismo ministerio”, dijo el abogado. Y Refutó que todo lo que ocurriera en la DNV fuera controlado por Fatala. “No hay norma que estableciera cómo debía realizarse dicho control. No hay un reglamento, una disposición administrativa que detallara en qué consistía la intervención de la Subsecretaría respecto de la DNV”, agregó.

Además de negar la responsabilidad de Fatala en los hechos que se le imputan, Simonetti cuestionó que el fiscal Luciani hizo una “utilización maliciosa” de los mensajes que intercambió José López con su defendido, y negó que las obras a las que se aludía en esos intercambios tuvieran relación con la causa de este juicio oral. Dijo que se interpretaron de manera discrecional y que “la fiscalía no ha querido descubrir la verdad de lo sucedido”.

Después de que Luciani y Sergio Mola dieran a conocer los pedidos de pena para los trece acusados en esta causa, y de que la UIF pidiera la absolución de la mayoría de ellos -excepto por los exfuncionarios provinciales de Santa Cruz-, ya alegaron los abogados defensores de Héctor Garro, Raúl Daruich, Mauricio Collareda, Julio De Vido y Abel Fatala. La próxima semana estará abocada al alegato de defensa de Cristina Kirchner. Hablarán sus abogados, Carlos Beraldi y Ary Llernovoy, en las audiencias de los días lunes y martes. La vicepresidenta prevé alegar personalmente en el juicio. Para eso, pedirá constituirse como “abogada en causa propia”. Si el tribunal la habilita, quedará para ella la última jornada del alegato de su defensa, programada para el viernes 23.

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