Javier Milei no dará su discurso en el Congreso, usará un descapotable muleto y quiere un “baño de multitudes”
El libertario no quiere hablar ante la Asamblea Legislativa sino en la explanada del Palacio y pidió caminar desde la 9 de Julio hasta la Casa Rosada, pero hay objeciones de seguridad; el reemplazo del “Cadillac de Perón”
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Javier Milei no hablará ante la Asamblea Legislativa y, luego de tomar los atributos presidenciales en el Congreso de la Nación, dará su primer discurso como presidente en la explanada del Palacio Legislativo. Así lo aseguraron a LA NACION fuentes del espacio libertario y se desprende del cronograma estipulado a esta hora. Después de eso se subirá a un Valiant descapotable, el reemplazo elegido para el Cadillac Serie 62 que compró pero nunca usó Juan Domingo Perón. En ese auto “muleto”, Milei avanzará por la Avenida de Mayo, a contramano, rumbo a la Casa Rosada. Según cuentan por estas horas cerca suyo, el libertario sueña con bajarse a la altura de la avenida 9 de Julio y desde allí caminar rumbo a Balcarce 50, la sede de Gobierno en la que ya anunció en que no trabajará.
Pero esa larga caminata es objetada por el área de seguridad presidencial. Si logran imponer su posición, probablemente la caminata de Milei se reduzca a la distancia entre el Cabildo, en el otro extremo de Plaza de Mayo, y la Casa Rosada. Porque algo hay seguro, según cuentan cerca del presidente electo: Milei quiere tener contacto con la gente que lo irá apoyar. De hecho, según fuentes de la organización y las fuerzas federales, se espera un importante número de movilizados. Un dato nada llamativo teniendo en cuenta que el libertario ganó con casi el 56% de los votos.
El trayecto desde el Congreso a la Casa Rosada está previsto que comience a las 12.30 y apenas media hora más tarde está agendada la celebración interreligiosa en la Catedral Metropolitana, ubicada a uno de los costados de la Plaza. Sea el recorrido que sea, cerca del libertario cuentan que le recomendaron que antes de la Catedral pase, aunque sea brevemente, por la Casa Rosada. Si Milei concreta, aún en parte, su “baño de multitudes”, es un hecho que los horarios no se cumplirán.
En toda la zona se espera un impresionante operativo de seguridad, con un amplio radio cortado al tránsito y con dispositivos de las cuatro fuerzas federales: Policía Federal Argentina (PFA), Gendarmería Nacional (GNA), Prefectura Naval (PNA) y hasta de Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). A eso se suma la intervención de Casa Militar, el cuerpo mixto de militares y civiles que se encarga de la seguridad del presidente, su familia, de la Casa Rosada y la residencia oficial de Olivos.
En el armado de la jornada trabajan, entre otros, el experto en Ceremonial Darío Lucas, que ocupó la titularidad de ese área durante la gestión de Mauricio Macri; el excancilller de esa gestión, Jorge Faurie, y el responsable de Casa Militar, Alejandro Guglielmi.
En las últimas horas se ubicó el Valiant convertible que reemplazará al icónico Cadillac Serie 62 Coupe convertible, que compró Juan Domingo Perón, pero nunca usó, y que sí trasladó el día de la asunción a Raúl Alfonsín, Carlos Menem y Fernando de la Rúa. El vehículo descansa en el subsuelo de Balcarce 50, en el Museo del Bicentenario. A pesar de la voluntad manifiesta de Milei de usarlo para desplazarse el día de su jura, no pudo ser de la partida.
Problemas técnicos y trabas administrativas, según reconstruyó LA NACION, habrían formado parte de los impedimentos para su utilización. Entre otras cosas, se habría argumentado como razón para no autorizar su uso que el auto “no tenía seguro al día ni Verificación Técnica Vehicular (VTV) hecha”, de acuerdo con las fuentes de la Fundación Museo del Automóvil. También, que faltaba la cédula verde.
Cuando logre arribar a la Casa Rosada, lo primero que hará Milei será saludar a mandatarios y autoridades extranjeras, que llegarán al país especialmente para su asunción y serán recibidos en la explanada de la Avenida Rivadavia.
Para las 17.30 está prevista la jura de ministros en el Salón Blanco, con sus respectivas familias y los representantes extranjeros. En tanto que para las 18.30 fue planeado un cocktail que tendrá lugar en dos salones distintos, en forma paralela, en los que se dividirán los invitados de acuerdo a su rango. Uno será en el “Salón de los Pueblos originarios”, en la planta baja del edificio. El otro, en el “Salón Mujeres Argentinas”, en el primer piso, donde se despliega el área presidencial.
Luego de eso está previsto en la agenda oficial un breve descanso de Milei en la propia sede de Gobierno, donde ya avisó que no trabajará, dado que prefiere usar para eso la quinta de Olivos.
Para el cierre del día está prevista la gala en el Teatro Colón. Se trata de una de las opciones que se barajan tradicionalmente para la noche de la asunción. La otra es una cena. En este caso, el presidente entrante eligió la opción del Colón y la obra Madame Butterfly: se trata del mismo escenario y la misma ópera en la que fue abucheado horas antes de imponerse en el balotaje. Sobrevuela insistentemente una versión, no del todo desmentida por su entorno, de que se pedirá que la orquesta ejecute un tango de Astor Piazzola: “Balada para un loco”.
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