Invitan a dirigentes políticos a dar gestos de unidad en Luján, a diez años del pontificado de Francisco
La Iglesia hará un encuentro para sellar un compromiso de políticas a largo plazo para combatir las adicciones; la convocatoria partió de los curas villeros y se invitó a Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Rodríguez Larreta, entre otros.
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LA NACIONMariano De Vedia
La Iglesia convocó a la dirigencia política a un encuentro en Luján para buscar caminos de unidad y bajar los niveles de confrontación, a partir de un compromiso de políticas a mediano y largo plazo por el lema #NiUnPibeMenosPorLaDroga. La cita es el sábado 11 de marzo, al mediodía, por los diez años del pontificado de Francisco y el objetivo, también, es dar una señal de unidad hacia el papa argentino, con representantes de todo el arco político, a los que se unirán representantes de organizaciones sociales y más de 50 sacerdotes de villas y barrios populares.
El presidente Alberto Fernández, la vicepresidenta Cristina Kirchmer, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y todos los gobernadores recibieron ya las invitaciones de la Familia Grande de los Hogares de Cristo, que reúne a más de 200 centros barriales dedicados al acompañamiento y recuperación de los jóvenes que son víctimas de adicciones y que conduce el padre José María “Pepe” Di Paola.
Se espera que en ese encuentro se dé a conocer un mensaje de Francisco sobre la misión que desde hace 15 años vienen desarrollando los Hogares de Cristo, surgidos por iniciativa del entonces cardenal Jorge Bergoglio, cuando era arzobispo de Buenos Aires.
No será el único acto de la Iglesia para celebrar los diez años del pontificado de Francisco. Al día siguiente –el domingo 12– el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Poli, celebrará una misa en la Basílica de Luján, en la que participarán los obipos de las veinte diócesis que conformn las regiones pastorales Buenos Aires y Platense. Y el presidente del Episcopado, monseñor Oscar Ojea, presidirá el lunes 13, a las 18, un encuentro ecuménico e interreligioso con representantes de otros cultos.
La jornada de los Hogares de Cristo será el final de una peregrinación federal iniciada en agosto del año pasado en el Litoral y que recorrió los 200 centros barriales extendidos en todo el país. Este fin de semana, por ejemplo, habrá actividades en la arquidiócesis de La Plata, que finalizarán el domingo, con una misa que oficiará, a las 12, el arzobispo local, Víctor Manuel Fernández.
El encuentro con la dirigencia política será al mediodía en el Cabildo de Luján y se invitó a los representantes de las distintas fuerzas políticas a firmar un documento y sellar un compromiso con el lema #NiUnPibeMenosPorLaDroga. A lo largo de la jornada habrá distintas actividades, incluido un festival popular con los artistas Palito Ortega y Nahuel Pennisi, elegidos por los valores que transmiten en sus presentaciones, y la convocatoria finalizará con una misa, a las 18, que celebrará el presidente del Episcopado y obispo de San Isidro, Oscar Ojea, en la plaza de Luján.
“Invitamos a todos los dirigentes argentinos que fueron elegidos por el voto popular, incluidos sus ministros”, explicó el padre Pepe, ante una consulta de LA NACION.
Además de las invitaciones, en algunos casos hubo diálogos telefónicos. “Las cartas las tienen todos, confirmados todavía no están”, apuntó una fuente eclesiástica.
En el Gobierno recibieron con satisfacción la convocatoria y no se descarta la presencia de Alberto Fernández, confiaron fuentes gubernamentales. Tiene ya decidido asistir el secretario de Culto, Guillermo Oliveri.
Sectores de la Iglesia explicaron a LA NACION que para la jornada en Luján, así como para las distintas instancias de la peregrinación que ya pasó por otras provincias y municipios, se recibió la cooperación de distintas autoridades políticas, de diversos signos políticos y de organizaciones sociales, para la organización y difusión de los encuentros, desde alimentos y movilidad hasta difusión en la vía pública. Ya se han difundido, por ejemplo, afiches con el rostro de Francisco para promover la convocatoria a la misa, en homenaje a los diez años dl pontificado.
Por todo el país
“Durante ocho meses recorrimos provincias y municipios que tienen distintos colores políticos. En todas dimos el mismo mensaje, en todas fuimos muy bien recibidos. Encontramos gente que tiene la voluntad de trabajar y sentir como propio el lema #NiUnPibeMenosPorLaDroga y concretarlo en su comunidad”, señaló el padre Pepe, al mostrarse que es posible asumir compromisos positivos en favor de la gente.
El sacerdote explicó los alcances de la convocatoria, frente al escenario de confrontación política que se vive en el comienzo del año electoral e insistió en que el mensaje estará centrado en trabajar juntos por una problemática específica. “El mensaje #NiUnPibeMenosPorLaDroga es lo que nosotros podemos proponer como una causa nacional que va más allá de las grietas. Lo dijimos en todas las provincias y es un tema sobre el que pueden trabajar todas las expresiones políticas y sociales de la vida argentina y lograr un objetivo común. Eso es lo que nos corresponde a nosotros”.
El referente de los curas villeros recordó que “cuando era arzobispo de Buenos Aires, Bergoglio acompañó los primeros centros barriales, que se fueron replicando en el país como una propuesta simple, práctica y concreta, como es el abordaje territorial e integral de las adicciones”.
Una propuesta similar para lograr un compromiso de sectores políticos con políticas para combatir las adicciones ya fue realizada en noviembre por la Familia Grande de los Hogares de Cristo en la Casa Histórica de Tucumán, con presencia de dirigentes políticos de distintas fuerzas. “Ahora lo repetimos en el final de la peregrinación”, comentó el padre Pepe, en referencia a las recorridas realizadas por los centros barriales de todo el país y que llevaron a la peregrinación a Mar del Plata, Bahía Blanca, Ushuaia y Río Gallegos, entre otros puntos del país.
La peregrinación es encabezada habitualmente por una imagen de la Virgen de Luján y su objetivo a lo largo del último año fue unir los centros barriales que las organizaciones sostienen en todo el país, para visibilizar el problema de las adicciones e impulsar “la prevención y políticas nacionales que ayuden a brindar respuestas efectivas a este flagelo”. En la Iglesia sostienen que una política de Estado en este campo podría ser el punto de partida para acuerdos posteriores.
Por Mariano De Vedia
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