Horas antes de la marcha contra el aborto, mancharon con pintura verde la fachada de la Catedral de Moreno
LA NACIONMariano De Vedia
Horas antes de que comience la marcha del 28-N, convocada para esta tarde por organizaciones provida con el fuerte respaldo de la Iglesia, para expresar el rechazo al proyecto de legalización del aborto, la fachada de la Catedral de Merlo-Moreno apareció manchada con pintura verde, el color que identifica a los movimientos que defienden la interrupción legal del embarazo.
El ataque fue perpetrado contra el frente de la Catedral Nuestra Señora del Rosario, ubicada en el centro de Moreno, y, según pudo saber LA NACION no se registraron otros daños en la iglesia.
Además de las pintadas en la fachada de la iglesia, los agresores dejaron una leyenda en la vereda, también con pintura verde: "Ni Fernández ni Bergoglio. Aborto legal".
En la esquina de la iglesia están las cámaras del municipio, que podrían aportar imágenes para ayudar a esclarecer lo que pasó.
El padre Fabián Sáenz, párroco de la Catedral, expresó que la intimidación provoca "dolor y pena, porque además de ser una agresión hacia nosotros, es una manifestación de que en la Argentina nos cuesta dialogar". Reveló a los medios que ya hubo otras pintadas de verde, menos llamativas, en ocasiones anteriores.
El sacerdote, que es párroco desde marzo desde 2004, llamó a "mantener la cordura, rezar por los agresores y tratar de buscar vínculos de comunión y no de peleas". Sostuvo que el tema del aborto no es una cuestión religiosa, sino una cuestión ética frente a la vida humana".
La diócesis es conducida por el obispo de Merlo-Moreno, Fernando Maletti, quien integra la Comisión de Pastoral Social del Episcopado.
En la última semana, monseñor Maletti y el obispo auxiliar de Merlo-Moreno, Oscar Eduardo Miñaro, adhirieron a las palabras del papa Francisco y del Episcopado sobre el momento inoportuno para plantear el debate sobre el aborto en medio de la crisis sanitaria y la emergencia social y animaron a participar de las movilizaciones organizadas para hoy por la Unidad Provida, entre otras entidades civiles.
Los obispos Maletti y Muñarro señalaron en un comunicado que "este no es el momento propicio para presentar un debate que puede generar más divisiones en estos tiempos en que el país necesita unidad para enfrentar la pandemia y otros desafíos".
"Acompañando la realidad de tanta gente de nuestros barrios y que como argentinos vivimos, busquemos caminos de encuentro y no de enfrentamiento", dijeron los obispos de la diócesis. Y concluyeron: "Es tiempo de abrirnos a la vida, de poner la atención en el cuidado que tantos enfermos y tantos trabajadores de la salud necesitan".
Por Mariano De Vedia
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