Guillermo Ferraro repasó los primeros meses de gestión del Gobierno y dijo que el apoyo del Pro “era medio clandestino”
El exministro de Infraestructura dio detalles sobre cómo fue el armado de la campaña; “el foco estuvo y sigue estando en lo que es la economía entendida”, analizó
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El exministro de Infraestructura Guillermo Ferraro supo ser uno de hombres de confianza de Javier Milei. De hecho, fue uno de los primeros nombres confirmados para integrar el gabinete libertario. Sin embargo, también fue uno de los primeros en abandonar la gestión, a poco menos de dos meses de haber tomado su cargo. “El gabinete de este Gobierno, como de cualquiera, se supone que es un equipo”, comenzó, en una entrevista con LN+.
“Entiendo que en los partidos tradicionales, donde tienen esa gimnasia de haber sido gobierno provincial o nacional, el equipo ya está conformado y el funcionamiento de los primeros meses arranca. En el caso nuestro, una fuerza nueva donde para llegar a la elección general tuvimos que armar la estructura capaz de enfrentar una elección nacional y definir los equipos técnicos, estuvimos trabajando un año y medio antes con [Nicolás] Posse, que ocupaba el rol de coordinador”, dijo.
Al mismo tiempo, subrayó el rol de Juntos por el Cambio para llevar adelante las elecciones de forma satisfactoria: “Mucha gente que ya había estado en el gobierno de Juntos por el Cambio se acercaba, pero tenían la expectativa de que ganara su partido. Por lo cual, era medio clandestino”.
“Esa parte de equipos técnicos tenía que tener cierta intensidad. Así se arribó al primer gabinete, donde, en mi caso, yo nunca había trabajado con por ejemplo Diana Mondino. Salvo en estas cosas de campaña”, sumó. Y aclaró que no era un equipo de gente conocida, “que tuviera un foco y direccionalidad, que permitiera jugar un poco a ciegas, o que se supiera que el que estaba al lado pensaba lo mismo”, aclaró, con cierta desconfianza sobre los primeros armados de La Libertad Avanza (LLA).
La macroeconomía de Javier Milei
“Así se vivieron los primeros meses, con un Javier Milei que tenía una impronta, donde el foco estuvo y sigue estando en lo que es la economía entendida. Hay una parte de la macroeconomía que no fue lo prioritario; podemos hablar de política monetaria, política fiscal. En los primeros tiempos, el Presidente enfocó al equipo económico en eso”, criticó el exministro.
Sobre si volvió a hablar con Milei y el rumor acerca de que su salida fue precipitada, sostuvo: “Tengo el mismo dato porque dentro del gabinete tengo gente, en el tiempo que tuvimos desarrollado juntos”. Asimismo, aseguró que retomó el diálogo con el jefe de Estado ya que él participó de manera activa en la fiscalización de los votos libertarios durante la campaña para llegar la Casa Rosada.
“Dada la disparidad de fuerzas contra quién competíamos, [Sergio] Massa, había muchas dudas sobre si éramos capaces de defender el espacio y que no nos llevaran puestos con todas las trampas que tiene la política”, explicó. En cuanto a si la gente tenía miedo de ir a fiscalizar, planteó: “Miedo no, pero miedo de que estas trampas se produzcan en territorio y la votación se perdiera por estas cosas”.
“Hablando con Diana Mondino, el sábado anterior [a las elecciones] me dijo ‘mañana vas a ser héroe o villano porque en ese momento daba mucha paridad, uno o dos porciento de diferencia”, agregó y cerró: “El PRO tuvo un papel importante para fiscalizar. Pusimos en blanco y negro lo que tenía cada uno y duplicamos”.
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