Fuerte reacción política por la muerte del militante radical jujeño

SAN SALVADOR DE JUJUY.- La conmoción por la muerte de Ariel Velázquez, el militante radical que fue baleado en esta provincia horas antes de las PASO, impactó de lleno en la campaña electoral nacional. En pocas horas, el voltaje se elevó y la escena política se trasladó a esta zona del país.

Mientras la Juventud Radical anunciaba para hoy a las 19 la realización de una marcha "pacífica y con velas" en distintas ciudades del país para pedir justicia, el senador radical Gerardo Morales -principal candidato opositor a la gobernación- apuntó contra Milagro Sala y su poderosa Organización Barrial Tupac Amaru como responsables del episodio.

"Tenemos sobradas sospechas de que se trataría de un crimen político", dijo anoche Morales, quien decretó el duelo y la suspensión de actividades partidarias hasta hoy. Desde el sector de Sala calificaron las denuncias del senador radical de "canalladas" y aseguraron que Velázquez estaba afiliado a la Tupac Amaru.

En tanto, por cadena nacional, Cristina Kirchner apuntó contra la UCR, aunque sin nombrarla, por la "utilización política" del caso, planteó: "Ese tipo de actitudes le hacen muy mal a la democracia" y que "utilizar a un chico muerto debería avergonzar a quien lo hizo". El Comité Nacional de la UCR respondió no bien terminó la cadena nacional. Ratificó que Velázquez "pertenecía a la UCR" y que la ficha de afiliación al partido de Sala que la Presidenta exhibió ayer "es el método compulsivo y extorsivo que utiliza la Tupac Amaru para cooptar a jóvenes".

En tanto, la fiscal del caso, Silva del Valle Farall, no descartó ayer que se tratara de un hecho con vinculaciones políticas y dijo: "Están abiertas todas las hipótesis".

Las repercusiones por el asesinato del joven militante fueron subiendo de tono. El jefe de Gabinete de la Nación, Aníbal Fernández, se metió en la agitación que produjo el caso y apoyó al gobernador de Jujuy, Eduardo Fellner, quien -dijo- estaba "muy preocupado" por el tema. "El consejo más sano que doy, como conductor de una parte importante del Frente para la Victoria en la provincia de Buenos Aires, es, cuando hay un lío, desaparecer, salir de ahí, correrse", sostuvo, según la agencia DyN. Fernández pidió "que se investigue y se encuentre rápidamente a los culpables", aunque dijo desconocer quiénes eran.

Las críticas se escucharon en todo el arco opositor. La diputada Patricia Bullrich (Pro-Cambiemos) responsabilizó a la presidenta Cristina Kirchner, que "debe hacerse responsable por la conducta violenta de Milagro Sala, que se llevó la vida de Ariel". Por su parte, Mauricio Macri dijo que el crimen "es inaceptable". Aunque inicialmente no había hecho ningún comentario, el gobernador Fellner consideró ayer que el asesinato de Velázquez es "lamentable", y se solidarizó con la familia. A la vez, pidió "que se esclarezca el hecho y se condene rápidamente a los culpables".

Jorge Ariel Velázquez, de 22 años, murió anteayer luego de 11 días de agonía. El viernes anterior a las PASO, había estado repartiendo boletas del frente radical en San Pedro de Jujuy, a unos 50 kilómetros de la capital provincial. Pasada la medianoche, fue atacado por un grupo de personas y recibió un disparo por la espalda. Luego, fue internado en terapia intensiva en el Hospital Pablo Soria de esta ciudad, hasta que falleció.

Varios dirigentes ya anticiparon que participarán de la marcha convocada por la Juventud Radical (JR). El jefe de la UCR, Ernesto Sanz, anunció que lo hará desde Mendoza, y el diputado nacional Mario Negri, desde Córdoba. En Jujuy, la marcha tendrá como epicentro la plaza Belgrano, frente al Palacio de gobierno, y habrá una caminata por calles céntricas. En la ciudad de Buenos Aires, uno de los puntos será la Casa de Jujuy, en avenida Santa Fe al 900.

En un vuelco en la investigación, la fiscal Farall no descartó que se tratara de un crimen con tinte político: "Hoy [por ayer] no descarto ninguna hipótesis y la fiscalía va a abrir todo el abanico de posibilidades", expresó. Inicialmente, y a las pocas horas de que Velázquez recibiera un tiro por la espalda, la funcionaria judicial había dicho que se trató de un robo.

Por la muerte de Velázquez fueron detenidos tres hombres mayores de edad; también se secuestraron tres motos y un arma calibre 22, que fue entregada por uno de los detenidos y cuyo propietario se busca identificar. También se hicieron cuatro allanamientos y se tomaron declaraciones testimoniales.

Al ser consultada sobre si los detenidos pertenecían a la Tupac Amaru, la fiscal dijo desconocerlo: "Estamos averiguando el hecho, no a qué partido político pertenecen", agregó, tajante. En contraposición, según afirmó a LA NACION el diputado provincial Julio Bravo (UCR), los sospechosos tendrían vinculación con la agrupación de Sala.

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