"Fomenta una cultura de la vagancia"

El presidente de Caritas Argentina y obispo de San Isidro, monseñor Jorge Casaretto, aconsejó ayer unificar los planes sociales y advirtió que una de las cuestiones que ve con mucha claridad es que si no tienen una contrapartida laboral, "lo que fomenta es una cultura de la vagancia, de la dejadez. Para que se genere una verdadera cultura del trabajo, esto tiene que ser implementado a través de todo el orden educativo".

Al disertar sobre "políticas sociales y educación", en un cátedra abierta organizada por el Centro Universitario San Isidro, el obispo recordó que fue la Iglesia, mediante el Diálogo Argentino, la que "más insistió (durante la crisis de 2002) en la necesidad de incentivar políticas sociales fuertes y firmes".

El prelado recordó que fue en esa crisis política social y económica, que se inició a fines de 2001, que "surgió el famoso Plan Jefas y Jefes de Hogar".

Pero, consideró que "la gran tarea es la de despolitizar a todos los planes sociales y esto requiere de un nuevo empadronamiento de todos los necesitados. Hay muchos planes y personas que reciben más de un plan y eso no lo podemos determinar. Por eso, la solución es el padrón único".

Casaretto abogó por la necesidad de unificar los planes sociales para que exista solo uno y que se creen consejos consultivos en cada municipio y en cada barrio para que se decida quiénes reciben la ayuda.

"Veo un ánimo novedoso tanto en el orden nacional como en la provincia (de Buenos Aires), un cierto impulso y me parece que hay una conciencia más adquirida en el pueblo de que sin educación no podemos salir (de la crisis)", concluyó el obispo.

El director de Cultura y Educación bonaerense, Mario Oporto, habló sobre inclusión y exigencia educativa. "Uno de los grandes temas de este fenómeno mundial de las últimas décadas es la masividad en la educación. Es uno de los temas de tensión a resolver: que la inclusión no va en detrimento de la calidad educativa."

Fomentar el trabajo

Por su parte, el director nacional de Caritas, Eduardo Serantes, planteó ayer la necesidad de que "la educación, la capacitación y la cultura del trabajo sean clave para la recuperación de nuestro país".

Por eso, en sintonía con Casaretto, reclamó la importancia de fomentar la cultura del trabajo.

"Si bien desde su inicio se pensó que el programa (Jefas y Jefes de Hogar Desocupados) pudiera generar contraprestaciones para fomentar la cultura del trabajo, el gobierno de transición no logró alcanzar este salto cualitativo. Por eso, es esperable que las actuales autoridades puedan generarlo."

Serantes señaló que se debe "lograr una base única de beneficiarios, ya que hay una gran cantidad de familias indigentes y sin trabajo que no reciben ningún plan, mientras que en otras existe superposición de distintos planes".

A su criterio, también "hay que pasar de un programa de subsidios a uno de capacitación y de generación de microemprendimientos y de trabajo articulado con las pymes y otros sectores productivos, como por ejemplo "Manos a la Obra", ya que son dos millones de personas a las que hay que darles una participación activa".

Y concluyó: "Hay que recomponer la situación de los consejos consultivos para que tengan una verdadera participación de la sociedad civil".