Fernández, sobre la corrupción: “No nos hemos enriquecido, no enriquecimos a nuestras familias, no entregamos obras a nuestros amigos”
El Presidente se mostró junto al precandidato Agustín Rossi; dijo que el titular de un laboratorio le aseguró que este es el primer gobierno que no le pide plata; malestar e indiferencia del kirchnerismo
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Alberto Fernández volvió a tocar una fibra sensible para el kirchnerismo: la de la corrupción. Fue al presentar, junto al jefe de Gabinete y precandidato presidencial, Agustín Rossi, este martes la Mesa Nacional de Integridad y Transparencia, que busca apuntalar la gestión pública con esas característica. “No nos hemos enriquecido, no enriquecimos a nuestras familias, no somos amigos de los empresarios, no entregamos obras a nuestros amigos”, deslizó el mandatario sobre su gestión, cuando esta es una de las principales críticas que recibió la administración de Cristina Kirchner, que incluso está condenada en primera instancia en la causa Vialidad, ya que la Justicia entendió que redireccionó obra pública en Santa Cruz para favorecer a Lázaro Báez.
La referencia no pasó desapercibida en el kirchnerismo, con el que la relación presidencial está completamente rota. La mayoría de los consultados por LA NACION coincidió en ver los dichos del mandatario como “siempre sinuosos” y “ambiguos” que “buscan decir algo sin apuntar directamente”. “Nada nuevo”, sintetizó un hombre de las filas del ala dura del oficialismo “Otra cosa no se puede esperar”, deslizó otro. Y un tercero consideró que era “preferible no hablar. Hacerlo es subirle el precio que no tiene”. El enojo y la distancia acumulada a lo largo de los últimos años con el mandatario es total. La molestia estaba latente, pero la indiferencia más aún.
Terminado el discurso y con las primeras repercusiones desde el círculo cercano del mandatario buscaban alejar cualquier referencia al kirchnerismo y sostenían que: “es obvio que se refería a (Mauricio) Macri, sin ninguna duda. Fue clarísimo”. En esa línea acotaban que “habla de la familia Calcaterra, los amigos por (Nicolás) Caputo y los parques y autopistas (en referencia a dos causas judiciales que involucraron al exmandatario de Juntos por el Cambio y su familia)”.
Pese a los esfuerzos de Balcarce 50 estaban quienes no dejaban de ver que las nuevas declaraciones de Fernández llegaron pocos días después de que en su reciente entrevista con Diario AR dijo que no considera que su vice sea corrupta, pero deslizó que tal vez “alguna razón le quepa” a la gente que considera que Cristina Kirchner incurrió en “imprudencias éticas muy graves”. Este mediodía pareció volver sobre ese concepto. “Nunca nadie cuestiono nuestra ética y nuestra moralidad”, aseveró en cuanto a la administración que él conduce. “No lo escuché y sinceramente creo que ya nadie le da entidad a lo que diga”, fue el comentario de otro hombre del kirchnerismo.
A las declaraciones de este martes y las de la mencionada entrevista se suma los dichos de Fernández en el coloquio de Ideas, en 2022, cuando preguntó a los empresarios presentes: “alguien les pidió un centavo para hacer obra pública”
Pese a que formó parte de la gestión de Néstor Kirchner, se atrevió a contar una charla que supuestamente tuvo con el presidente de un laboratorio. “Me dijo: ‘Hace mucho que estoy en este rubro y es la primera vez que un gobierno no me pide plata’”, reveló Fernández. “Eso me llena de satisfacción. Sé que son mis funcionarios los que hacen eso. No dejo de pensar en que esto que ocurre en nuestro gobierno debe ser una regla permanente para el futuro de la Argentina”, comentó y, por ese motivo, dijo que le “subió mucho la vara” a la próxima administración. “¿Así que ningún gobierno ante pidió nada? y eso no es un palo al kirchernismo, mirá vos”, ironizó uno de los consultados, quien en línea con los demás evitó darle mayor trascendencia a la exposición del mandatario.
Fernández le apuntó directamente al paso de Macri por la Casa Rosada, a quien suele criticar por la forma en que distribuyó las concesiones viales que se hicieron con el sistema de participación público-privada (PPP).
“Cuando uno ve firme la ética en los niveles más altos de gobierno parece desparramar para abajo. Parece permear hacia abajo. Parece que arriba no perdonan el robo”, consideró Fernández en otro tramo y expresó que la definición de ética que mejor le parece es una que da el cantante Litto Nebia: “Quisiera poder descansar en paz antes de morir”. Entonces reflexionó: “Poder irnos a dormir en paz con nuestra conciencia cada noche es saber que hemos actuado éticamente bien, que no somos cómplices de un desfalco. Eso nos permite dormir en paz cada noche y tener la conciencia limpia”.
Convencido, sin embargo, de que la mayoría de funcionarios públicos son honestos, pero que quedan empañados por quienes corrompen la administración pública, destacó que su gobierno licitó más de 6 mil obras y que nunca nadie dijo que estaban robando.
Así, prometió que cuando termine su administración va a enviar a los diarios su declaración jurada de bienes, como lo hizo cuando salió de la Superintendencia de Seguros y de la Jefatura de Gabinete. “No quiero que haya un fideicomiso ciego; quiero que todos vean que hay un presidente y muchos funcionarios de mi gobierno que se van a su casa igual que cuando llegaron”, marcó en una frase que fue resaltada desde su círculo cercano. “El macrismo fue corruptísimo y este es un gobierno decente”, insitían aclarar cerca de Fernández una vez terminado el discurso.
Entre sus consideraciones manifestó también que la corrupción “no es patrimonio del Estado”, sino que es “un problema de la sociedad argentina”. En ese sentido, acotó: “En el mundo está lo permitido y lo prohibido. Pero en la Argentina está la categoría intermedia: el curro, que no está bien, pero que podemos tolerar. El curro existe entre nosotros y es un problema, una forma de corrupción”.
Prensa y Justicia
Por otra parte, además de destacar la transparencia con la que pasó estos casi cuatro años por el Ejecutivo, Fernández aseguró que tampoco cercenó la libertad de prensa, ni se entrometió en la Justicia.
“En toda la democracia no hubo la libertad de prensa que existe hoy en la Argentina, hasta hay un abuso desmedido de la libertad de prensa: se miente, se difama, se injuria, pero no reaccionamos. Confiamos en que la ciudadanía descubra al mentiroso, al periodista corrupto que recibe plata para decir lo que dice. Esperemos que esos periodistas muestren sus bienes y nos expliquen cómo siendo locutores de un programa tienen semejantes departamentos”, sostuvo, como también dijo que él nunca llamó a ningún medio para quejarse por una nota. “Así me va, pero me voy a descansar en paz”, ironizó.
Mientras, y pese a que aclaró que la mayoría de los trabajadores judiciales son “gente honesta y decente”, dirigió un mensaje indirecto a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia. “Hoy los jueces andan con vidrios polarizados y escondidos para que no los reconozcan”, indicó.
Por último, les pidió a los auditores presentes en el acto que si ven inconductas en algún organismo del Estado las denuncien en la Sindicatura General de la Nación (Sigen) y la Oficina Anticorrupción. “Si ven algo indebido, díganlo, necesitamos que lo digan. No sean cómplices de los que delinquen. No hagan silencio. No van a poder descansar en paz antes de morirse”, cerró.
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