Fernández fue al conurbano en modo campaña, a la espera de la oficialización de la dupla Tolosa Paz-Gollán

Alberto Fernández y Axel Kicillof caminan entre la gente, sonríen y se sacan decenas de fotografías en el centro de vacunación que funciona en el predio de la Universidad Nacional Arturo Jauretche, en Florencia Valera. “Es volver a vivir”, suelta el Presidente, que ya se mueve en modo campaña.

Mientras se termina de resolver la fórmula que encabezará la boleta de diputados en el principal distrito electoral del país, la presencia del jefe del Estado y el gobernador bonaerense es una muestra de lo que vendrá: “Alberto, Axel, Cristina y Sergio serán las caras de la elección”, describe un hombre de confianza del Presidente.

“Estamos muy bien. Está bastante definido, estamos bien. Ya está bastante avanzado”, dice Alberto Fernández, quien presenta como primera opción a Victoria Tolosa Paz y al ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán. Pero no lo confirma, aún restan más de 48 horas para que se venza el plazo para la inscripción y todo puede cambiar.

A su regreso de Florencio Varela lo esperaba en su despacho el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, para “seguir punteando” la lista.

Mientras tanto, todos miran de reojo al Senado, donde manda la vicepresidenta Cristina Kirchner, pero nadie emite una señal. Lo mismo ocurre desde el Instituto Patria. A esta altura parece diluirse la posibilidad de un encuentro cara a cara entre el Presidente y la expresidenta. “Todo se puede resolver por teléfono”, explican desde ambas trincheras.

Sí, está descartado que el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, su funcionario de máxima confianza, sea parte de la oferta electoral. Algunos veían detrás de esta maniobra la mano de Cristina Kirchner para tomar el control del gabinete. Pero lo cierto es que el Presidente y el mandatario provincial coinciden en que el armado electoral debe impactar lo menos posible en los gabinetes. Tampoco es una opción las candidaturas testimoniales; las enseñanzas del pasado aún se borran.

Los tonos de los discursos muestran con claridad dónde pondrá énfasis el Frente de Todos. Vacunas y la comparación con la gestión de Mauricio Macri. El hecho de que el expresidente se haya corrido de la escena pública no le preocupa al Presidente. “No está Macri, pero está [María Eugenia] Vidal”, dice a LA NACION en un breve cruce al término del acto. Y agregó: “Me preocupa mucho la negación. El desastre que dejaron fue tremendo. Tremendo”.

Un rato antes, durante su discurso, el Presidente criticó con dureza a la exgobernadora y precandidata a diputada por la Ciudad de Buenos Aires. “Hay que tener cara para decir ‘no vamos a abrir más universidades porque los pobres no llegan’. Yo tengo una tranquilidad... se mudó de la provincia de Buenos Aires y a la Capital. Con esa universidad no va a poder”, fue el dardo que lanzó Fernández contra Vidal.

Ante la atenta mirada de varios intendentes, como Fernando Espinoza (La Matanza), Andrés Watson (Florencio Varela), Mayra Mendoza (Quilmes) y el exdiputado Carlos Kunkel, para quien el Presidente tuvo un afectuoso abrazo, Fernández arremetió contra Juntos por el Cambio. “Cuando llegaron ellos nos hicieron creer que el Estado estaba de más, cerraron escuelas y endeudaron a la Argentina. Y hoy nos dicen cómo gobernar…”, manifestó.

En un encendido discurso, Kicillof también cargó contra Juntos por el Cambio que, a la misma hora, desde La Plata, presentaba a Diego Santilli como precandidato a diputado nacional.

“Se llamen como se llamen, le cambien el logo, el nombre, los colores, para los argentinos el neoliberalismo y su forma actual, el macrismo, significa siempre lo mismo: ajuste, deuda, desempleo, falsas promesas. Sin memoria no hay futuro”, señaló el gobernador bonaerense.

Durante su presentación, Alberto Fernández habló sobre el avance del programa de vacunación, uno de los principales ejes discursivos que pondrán en juego durante la campaña.

“Ahí está la puerta de salida, está acá nomás. No está tan lejos”, sostuvo, y añadió: “Hoy, el 50% de los argentinos está vacunado al menos con una dosis. Esa dosis nos da mucha tranquilidad, porque nos da un nivel de inmunidad muy alto. Sabemos que el padecimiento de la enfermedad va a ser menor. Cuando crucemos esa puerta y la mayoría estén vacunados, ahí volveremos a nuestra vida”.

El Presidente, que estuvo acompañado por los ministros Gabriel Katopodis (Obras Públicas) y Nicolás Trotta (Educación); el secretario general de la Presidencia, Julio Vittobello; el vocero presidencial, Juan Pablo Biondi, y su segundo, Marcelo Martin, anunció la ampliación de las becas “Manuel Belgrano”, destinadas a estudiantes de universidades nacionales y provinciales de carreras estratégicas.

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