Estados Unidos pospone, sin nueva fecha, la reunión entre Joe Biden y Alberto Fernández
Tenían previsto encontrarse el martes en la Casa Blanca; la cancillería argentina informó que Washington postergó el encuentro por que el norteamericano tiene coronavirus
- 5 minutos de lectura'
El gobierno argentino informó que el encuentro entre los presidentes de los Estados Unidos, Joe Biden, y la Argentina, Alberto Fernández, se suspendió por el diagnóstico de Covid positivo que recibió el mandatario norteamericano. La reunión, que iba a ser el martes próximo, se postergó sin nueva fecha prevista.
A su vez, fuentes de la Casa Blanca confirmaron que la reunión entre Biden y Fernández se pospondrá; y adelantaron que anunciarán la nueva fecha “en los próximos días”. El presidente norteamericano trabajará aislado durante al menos cinco días, de acuerdo al protocolo oficial ante cotagios de Covid-19.
La suspensión era esperable. Biden dio positivo a un test de Covid-19 ayer por la mañana. La Casa Blanca informó que recibió cuatro dosis de la vacuna contra el coronavirus, tiene “síntomas muy leves” y permanecerá aislado durante al menos cinco días, y hasta que dé negativo a una prueba del virus.
Fuentes oficiales del gobierno explicaron que el nuevo encuentro no tiene fecha definida aún porque está sujeta a la reprogramación de toda la agenda del mandatario estadounidense. No obstante, consideraron una señal positiva que pidieron a la Embajada argentina en Washington que esta tarde vayan a la Casa Blanca los equipos de avanzada del gobierno argentino de las áreas de ceremonial y protocolo, seguridad, y prensa -que ya estaban en la capital estadounidense en vistas al encuentro de este martes- para hacer la recorrida de rigor.
Esa invitación, entienden las fuentes del gobierno nacional, muestra “la voluntad” de la administración de Biden para que el encuentro se realice lo antes posible.
La noticia sobre el contagio de Biden generó una inquietud inmediata porque, a sus casi 80 años, integra el grupo más vulnerable al virus. El médico presidencial, Kevin O’Connor, dijo en una carta difundida por la Casa Blanca que Biden había dado positivo al realizar una prueba de antígeno de rutina, que luego fue confirmado con un nuevo hisopado y un test PCR. El médico dijo que Biden tenía síntomas “muy leves” –goteo nasal, tos seca ocasional y fatiga– y que al estar vacunado y haber recibido dos refuerzos espera una “respuesta favorable”. Por precaución, Biden comenzó a tomar el antiviral Paxlovid para evitar cualquier riesgo de enfermedad severa.
De inmediato, se especuló con que la reunión con Fernández quedaría suspendida. El protocolo de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, según sus siglas en inglés) establece un período de aislamiento de cinco días completos luego de un test positivo de Covid-19. Bajo ese criterio, Biden podría retomar su agenda el martes, el mismo día previsto para la visita del Presidente Fernández. Pero Jean-Pierre y el coordinar de la Casa Blanca para la respuesta a la pandemia del coronavirus, el doctor Ashish Jha, dijeron en una conferencia de prensa que Biden iba a permanecer aislado hasta que diera negativo a un nuevo test del coronavirus.
El Gobierno había buscado la reunión con Biden y la foto en el Salón Oval durante dos años, con altas gestiones de Argüello y el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, quienes tejieron un buen vínculo de trabajo con el asesor de Seguridad Nacional de Biden, Jake Sullivan, y con González, el principal funcionario de Biden para la región.
Más allá de los cortocircuitos, las diferencias y las tensiones que generaron las posturas –erráticas, para sus críticos– del gobierno argentino en temas delicados de la política exterior, como las violaciones de derechos humanos en Cuba, Nicaragua y Venezuela, o los giros que marcó la Casa Rosada con la invasión de Rusia a Ucrania, la administración de Biden siempre le abrió las puertas al Gobierno y buscó mantener una relación constructiva, arraigada en una buena voluntad que parece inquebrantable. Alberto Fernández fue un crítico del gobierno de Donald Trump, y buscó cultivar una buena sintonía con la administración bidenista. El respaldo de la Casa Blanca ayudó a llevar a buen puerto el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), una prioridad para la Argentina.
El encuentro entre Biden y Fernández se confirmó unos días antes de la Cumbre de las Américas que se hizo el mes último en Los Angeles, en un llamado entre ambos mandatarios. Fernández llevó luego un duro discurso a esa cumbre que no alteró la buena predisposición de la Casa Blanca o el buen momento que atraviesa la relación con Estados Unidos.
Para el Gobierno, el encuentro en el Oval y la reunión bilateral era una oportunidad idílica para reforzar la relación y rubricar el respaldo de Washington a la Argentina en un momento crítico para la economía, castigada por un incesante azote de los mercados en medio de una desconfianza rampante por el rumbo económico del país. Las cotizaciones libres del dólar parecen en un espiral ascendente sin techo a la vista que eleva la presión sobre la inflación, y el Gobierno se ha quedado sin fuentes de financiamiento más allá del Banco Central para cubrir el déficit fiscal.