Espionaje ilegal: procesaron a Gustavo Arribas, Silvia Majdalani y 36 acusados más

El juez federal de Lomas de Zamora, Juan Pablo Augé, procesó hoy a los exjefes de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante el gobierno de Cambiemos, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, tras concluir que lideraron una asociación ilícita abocada al espionaje ilegal contra referentes de la oposición, de la propia coalición gobernante, gremialistas, miembros de la Iglesia y periodistas.

Augé dispuso que tanto Arribas como Madjalani continúen en libertad, sin disponer su prisión preventiva, pero les trabó embargos por 8 millones de pesos a cada uno, y avanzó contra otros altos funcionarios, cuadros medios y agentes de la AFI que participaron en los operativos que violaron la Ley de Inteligencia Nacional.

En su resolución, de más de 1500 carillas, el magistrado también decretó la falta de mérito de Darío Nieto, uno de los exsecretarios privados del entonces presidente Mauricio Macri, aunque sí procesó al extitular del Servicio Penitenciario Federal (SPF),Emiliano Blanco, y a la entonces coordinadora de Documentación Presidencial, Susana Martinengo, y la embargó por $2,5 millones.

Augé admitió así los pedidos de procesamientos, como también de falta de mérito que presentaron los fiscales federales Cecilia Incardona y Santiago Eyherabide a fines de diciembre, en un dictamen interactivo de 1026 páginas.

Para los fiscales, Arribas, Majdalani y un grupo integrado por decenas más "formaron parte de una organización ilícita" que entre 2017 y 2019 "se dedicó a la obtención, análisis, intercambio y almacenamiento de información sobre distintas personas, por el solo hecho de sus opiniones políticas, su calidad de dirigentes o exfuncionarios del Estado".

"Ciclo de inteligencia"

El juez coincidió con los fiscales. Estimó que Arribas, Majdalani y otros procesados "integraron una asociación de carácter permanente con distribución de funciones, jerarquías y responsabilidades, de conformidad con el denominado ‘ciclo de inteligencia’, creada con la finalidad de obtener información, producir inteligencia o almacenar datos sobre un número indeterminado de personas por el solo hecho de sus acciones privadas, u opinión política, o de adhesión o pertenencia a organizaciones partidarias, sociales, sindicales, comunitarias, cooperativas, asistenciales, culturales o laborales".

Para alcanzar esos objetivos ilegales, abundó Augé, los espías recurrieron a la "captación de imágenes, interceptación de comunicaciones telefónicas, así como por la actividad lícita que desarrollen en cualquier esfera de acción, todas acciones expresamente penadas por la Ley Nacional de Inteligencia".

Por ese motivo, el magistrado a cargo de la pesquisa tras el apartamiento del otro juez de Lomas de Zamora, Federico Villena, procesó a Arribas, Majdalani, Blanco, Martinengo y otros 34 acusados de integrar una asociación ilícita destinada al espionaje: Alan Ruiz, Andrés Rodríguez, Juan De Stefano, Bernardo Miguens, Diego Dalmau Pereyra, Jorge Sáez, Leandro Araque, Facundo Melo, Emiliano Matta, Mercedes Funes Silva, Andrea Fermani, Daiana Baldassarre, Denise Tenorio, Dominique Lasaigues, Belén Sáez, Javier Bustos, Jonathan Nievas, Mariano Flores, Martín Terra, Jorge Ochoa, Gustavo Ciccarelli, Aníbal Meza, Matías Fernández, Sebastián Siri, Oscar Lema, Juan Carlos Silveira, Cristian Suriano, Miguel Ángel Perrota, Fernando Carra, Mariano Ruda Bart, Darío Picabea, Fernando Whaler, Sebastián Iglesias y Claudio Marcus.

"En el caso de Gustavo Arribas, Silvia Majdalani, Cristian Suriano y Emiliano Blanco", fundamentó Auge, "aprovecharon la estructura de la AFI y del Servicio Penitenciario Federal para organizar, comandar, reclutar, establecer funciones y responsabilidades para el funcionamiento de la empresa criminal. Lo dicho facilitó la toma de decisiones y la distribución de funciones, puesto que se aprovecharon las jerarquías en pos de un rápido y fluido funcionamiento de la asociación" ilícita.

Esa asociación acumuló múltiples objetivos, tanto del propio oficialismo, como de la oposición, además de otras figuras públicas. Entre ellos, Cristina Fernández de Kirchner, Horacio Rodríguez Larreta, Florencia Macri, Diego Santilli, Graciela Caamaño y Luis Barrionuevo, Hugo y Pablo Moyano, Omar "Caballo" Suárez y Juan Pablo "Pata" Medina, los diputados Emilio Monzó, Nicolás Massot y Waldo Wolff, el camarista federal Martín Irurzun, los periodistas Hugo Alconada Mon y Rodis Recalt, Cristóbal López y Fabián de Sousa, Carlos Santiago Kirchner, Lázaro Báez, Julio De Vido, Roberto Baratta y José María Olazagasti, Amado Boudou, Carlos Zannini, y el obispo Jorge Lugones, entre otros.

Para el juez Augé, la asociación ilícita liderada por Arribas y Majdalani "no se trató de una mera suma de coincidencias y personas, sino de la creación y puesta en funcionamiento de una organización criminal coordinada, estructurada, estable y robusta, en la que todos sus eslabones cumplieron con su parte del acuerdo".

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