Coronavirus en la Argentina: Alberto Fernández recibió otra vez a los intendentes Juanchi Zabaleta y Jorge Macri
LA NACIONMaia Jastreblansky
Como hace seis días, Alberto Fernández recibió hoy a los intendentes de Hurlingham, Juan Zabaleta, y de Vicente López, Jorge Macri. Esta vez, el Presidente mantuvo con los jefes comunales una "reunión reservada" que no quedó registrada en fotos, a diferencia de la semana pasada, cuando se habían encontrado para intercambiar opiniones sobre el impacto del coronavirus en la Argentina.
Zabaleta (Frente de Todos) y Macri (Juntos por el Cambio) aceitaron una interlocución directa con el Presidente. Portavoces de otros intendentes del oficialismo y de la oposición, Fernández se siente cómodo trabajando con ellos y con ambos intercambia mensajes y llamados casi a diario.
De hecho, en las últimas horas, ambos intendentes se mostraron juntos en televisión para defender las medidas que viene tomando el Gobierno para sostener la cuarentena. Del otro lado, Fernández destacó en sus últimas intervenciones públicas el rol de los intendentes del conurbano, a los que calificó de "fundamentales".
Según pudo reconstruir LA NACION, hoy Zabaleta y Macri tenían como mandato transmitir la preocupación por la situación de la caja de los distritos.Los intendentes del conurbano están de acuerdo en mantener una estricta cuarentena para evitar un desborde sanitario en sus territorios. Pero, tras más de un mes de parálisis, comenzaron a reclamar por recursos para afrontar gastos corrientes, ante la caída en picada de la recaudación. Ante todo, piden dinero para pagar la nómina salarial de abril de sus empleados públicos, y afrontar los gastos extra en salud, seguridad y asistencia social.
El reclamo fue transmitido por un grupo de intendentes oficialistas del conurbano a Axel Kicillof el pasado domingo en un encuentro en la municipalidad de Hurlingham. El gobernador escuchó el mismo pedido, ayer, en boca de otros tres jefes comunales del interior.
Los intendentes advierten que podrían enfrentar serios problemas financieros en los próximos meses si no son auxiliados ahora y en ese contexto dos de sus representantes hoy tocaron la puerta de Olivos.
Al salir de la quinta presidencial, se cruzaron con Sergio Massa, que tendrá un rol clave para impulsar el proyecto del kirchnerismo para establecer un nuevo impuesto.
Codo a codo
El Presidente viene reforzando el trabajo conjunto con los intendentes. Detrás de los intercambios de elogios se esconde una profunda preocupación común por la situación sanitaria y económica en el conurbano. El Presidente sabe que solo saldrá airoso de la crisis del coronavirus si logra contener los contagios en ese punto denso del país, donde la propagación es mucho más dificil de controlar, y si evita desbordes sociales en un contexto económico que apremia con el correr de los días.
La semana pasada, el Presidente había recibido a Zabaleta y Macri con el objetivo de repasar el operativo para que los fiscalizaran los precios máximos de sus distritos. Esa tarde, Fernández les manifestó que necesitaba que el conurbano aguante "veinte días más". "Ayúdenme, son mi brazo ejecutor", les dijo, según pudo reconstruir LA NACION.
El Presidente les dio a los intendentes -vía decreto- la potestad para controlar precios en los comercios del conurbano. También los considera una pieza clave para controlar que llegue la ayuda alimentaria a los barrios y para procurar sumar camas sanitarias para atender lo peor de la pandemia.
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