En octubre será el juicio a la mujer de Soria

SAN CARLOS DE BARILOCHE.- Susana Freydoz, la esposa del fallecido gobernador Carlos Soria, estará en el banco de los acusados en el juicio oral que, a partir del 15 de octubre, llevará adelante la Cámara Criminal Primera de General Roca por el homicidio de su marido, muerto de un disparo en el rostro en la madrugada del 1° de enero.

Soria gobernó Río Negro sólo 21 días. En la chacra de Paso Córdoba donde celebró con su familia el Año Nuevo, murió cuando recibió un disparo de un revólver calibre 38 gatillado por su mujer -según determinó la Justicia-, con quien tenía tres hijos y había compartido 35 años de matrimonio.

Freydoz fue procesada por el delito de homicidio calificado por el vínculo y uso de arma de fuego. Sin embargo, nunca estuvo presa. El primer mes estuvo alojada en la casa de una hermana en la vecina localidad de Allen y luego fue internada con custodia policial en una sala del área de salud mental del hospital público de Cipolletti, a 37 kilómetros de General Roca, donde aún permanece.

Será Roca -ciudad de la cual su hijo mayor Martín es intendente- adonde será trasladada el 15 de octubre en calidad de imputada para seguir el juicio oral y público, que se extenderá durante ocho audiencias y en el que pasarán 33 testigos, entre familiares, peritos y agentes de seguridad.

La Cámara Criminal Primera de Roca tendrá una conformación especial para este caso, con la presidencia del juez Carlos Gauna Kroeger y los jueces subrogantes María Evelina García y Fernando Sánchez Freytes.

La causa penal

Según pudo conocer La Nacion, la cédula de notificación a las partes fue emitida el viernes pasado. Allí el tribunal detalló que el juicio se desarrollará entre el 15 y el 29 de octubre. El juez de instrucción Emilio Stadler elevó a juicio el caso por el delito de homicidio doblemente agravado, que prevé una pena máxima de prisión perpetua en el Código Penal.

Para procesarla, el magistrado consideró el informe del perito de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Risso, quien señaló que Freydoz pudo comprender la criminalidad de sus actos, aunque contempló la posibilidad de un atenuante por encontrarse en un estado de emoción violenta por la discusión que habría mantenido con su marido antes del disparo.

La defensa apuntará a determinar la inimputabilidad de la mujer, considerando el informe realizado por el perito de parte, Carlos Cornaglia, quien sostuvo que Freydoz no pudo comprender la gravedad de la situación por hallarse con un trastorno mental potenciado por el abuso de psicofármacos -que consumía desde hacía dos años- y bebidas alcohólicas que ingirió la noche de Año Nuevo.

El juicio por la muerte de Soria vuelve a poner en escena el estrecho lazo entre la tragedia familiar y la crisis institucional, que derivó en la asunción del vicegobernador Alberto Weretilneck, del Frente Grande, como gobernador.

A casi nueve meses de aquel cimbronazo, la situación del gobierno nuevamente es de crisis, con reproches del peronismo hacia el proceder del sucesor de Soria.

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