Elecciones: Alberto Fernández ya eligió candidatos pero sigue la tensión con el kirchnerismo
El Presidente se pronunció por sus favoritos: Tolosa Paz en provincia y Santoro en ciudad; se espera el veredicto de Cristina; se despejan varias incógnitas de las listas de cara a la semana de definciones
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Victoria Tolosa Paz es la persona que Alberto Fernández quiere para encabezar la lista del Frente de Todos en la provincia de Buenos Aires y para defender al Gobierno en unos comicios que -considera- serán un plebiscito a su gestión. Que ella pueda ir primera en la nómina, o no, dependerá ahora del veredicto que emita el kirchnerismo, encarnado en Cristina, La Cámpora y Axel Kicillof. Para ellos, lo que está en juego en la provincia es su fuente de sustentación de poder.
“Todavía falta”, dijo con media sonrisa uno de los principales armadores del Frente de Todos. ¿Qué falta? “La cumbre del G-2”, explicó un funcionario bonaerense de la primera línea de batalla. Tras una larga instalación de nombres -que rompió el pacto de hermetismo que se juraron los caciques del oficialismo- todos esperan que el Presidente y Cristina resuelvan las principales candidaturas en los próximos días.
En la línea de partida hay cinco o seis figuras, todos escenarios que ya fueron medidos en las encuestas con una conclusión inequívoca: nadie agrega votos ni mide más que la “marca” Frente de Todos. Nada está definido y tampoco se descarta del todo un viejo axioma kirchnerista: el factor sorpresa.
Lo que está claro es que los primeros puestos de la lista representarán a los distintos accionistas de la coalición de gobierno. Así, si Tolosa Paz es el número puesto de Fernández (y resta ver si puede encabezar), todos dan por seguro que en el top five habrá un intendente, un cuadro afín a La Cámpora y algún funcionario nacional, además de la cuotaparte que le corresponde a Sergio Massa.
Entre los intendentes, Martín Insaurralde (Lomas de Zamora) subió sus acciones por ser el anfitrión de dos actos, uno con la vicepresidenta y otro con Fernández. Tiene a su favor su sociedad política con Máximo Kirchner. Sin embargo, en el conurbano ya varios caciques aseguran que se trata de una lectura errada y que Insaurralde se quedará en su silla. Ahora asoman en las conversaciones otros jefes comunales como Ariel Sujarchuk (Escobar), Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas) y Mariano Cascallares (Almirante Brown).
Kicillof reclamará que los principales candidatos se calcen la camiseta de la gobernación bonaerense. “Lo que quiere Axel es que defiendan la gestión de la provincia”, explicaron en su entorno. La razón para no impulsar un nombre es sencilla: Kicillof no quiere ceder ministros por una elección legislativa. Los armadores del oficialismo, sin embargo, ya sumaron a la lista corta al viceministro de Salud, Nicolás Kreplak, que abreva en La Cámpora.
El mayor foco de crispación de los últimos días se dio por la inclusión de dos pesos pesados del gabinete nacional en la coreografía de nombres. El “operativo clamor” subterráneo de un sector del kirchnerismo para instalar como un “buen candidato” al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, llevó a Fernández a clausurar esa discusión con el nombre de Tolosa Paz (ver aparte). El Presidente no está dispuesto a resignar a su mano derecha. Tampoco quiere dejar ir a Gabriel Katopodis, que ocupa una silla estratégica en el Ministerio de Obras Públicas. El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, en cambio, sí tiene chances de recalar en la lista de candidatos.
Ciudad
“Lo que espera Alberto es que el día después del cierre de listas estén todos los sectores del Frente de Todos entusiasmados y él fortalecido como presidente”, dijo a LA NACION un hombre de interlocución frecuente con el jefe de Estado. Fernández, según hizo circular entre sus íntimos, ya tiene definidos a sus favoritos. Además de Tolosa Paz quiere que Leandro Santoro, encabece en la Ciudad.
En el distrito porteño, salvo algún cambio de última hora, se hará la voluntad presidencial. La duda es qué mujer acompañará a Santoro. Cecilia Nicolini, asesora presidencial y clave en la negociación por las vacunas, sonó como favorita pero hoy en el PJ porteño la desestiman como candidata. Hay un reclamo de “más peronismo en la lista” y “más CGT”. “Se busca a una compañera feminista”, dijo un referente al tanto de las conversaciones. La Cámpora buscará que Carlos Heller renueve su banca, ubicado en el podio. Y Víctor Santamaría, que busca hacer valer su poder, pretende ubicar en un lugar expectante a Gisella Marziotta. No está claro si encabezará la nómina de legisladores porteños o se ubicará más abajo en la lista nacional.
“Hay tensiones típicas de un cierre de listas, pero la unidad está garantizada”, aseguró uno de los hombres que ocupó gran parte de la semana a la cuestión electoral. La principal incógnita de la semana de definiciones es si el kirchnerismo le permitirá a Fernández colocar a sus dos preferidos con tipografía grande en la boleta.
“Alberto le quita dramatismo a los nombres y ahora quiere gestionar la unidad”, transmitió un funcionario cercano al Presidente.
La vicepresidenta, en tanto, regresó a la Ciudad el miércoles tras pasar varios días en El Calafate, donde preparó la audiencia para reclamar la nulidad de la causa por el pacto con Irán. Ahora, su atención está focalizada en la batalla electoral. Deberá definir, no solo la lista bonaerense, sino también otros distritos que le son muy caros, como Chubut, donde pone en juego tres bancas del Senado.
Más allá de los candidatos, en el Frente de Todos está implícito de que la campaña la liderarán Fernández, Cristina, Kicillof y Massa. Vacunas y recuperación económica, serán los lemas. El Gobierno machacará con “promesas cumplidas”, como el aborto legal, los medicamentos gratuitos, Ganancias, congelamiento de tarifas y el acuerdo con los bonistas. El kirchnerismo apelará a los “años felices” de su anterior gestión. Todos polarizarán con Mauricio Macri.
“Primero, Alberto, Cristina y Sergio irán cada uno por separado y focalizará en su público. Más cerca del final desembocarán todos juntos”, graficó uno de los encargados de la comunicación de campaña.