Elecciones 2023 | Javier Milei ganó las PASO, Patricia Bullrich se impuso en la interna de Juntos por el Cambio y el Gobierno quedó tercero
La Libertad Avanza se impone en todo el país y da la sorpresa en las PASO; la exministra de Seguridad se quedó con la interna de Juntos por el Cambio y Massa está tercero; “esto dará fin al kirchnerismo”, dijo el libertario
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LA NACION
El escrutinio provisorio de las PASO confirmó la sorpresiva tendencia que comenzó a insinuarse apenas cerraron los comicios: Javier Milei surge como el candidato presidencial más votado individualmente y su fuerza, La Libertad Avanza, quedó primera.
Con el 83,1% de las mesas escrutadas, el postulante de La Libertad avanza obtiene el 30,8% de los votos. Juntos por el Cambio se ubica segundo, con 28%, mientras que Unión por la Patria quedó tercero, con 26,76%. Patricia Bullrich superó en la interna a Horacio Rodríguez Larreta por más de cinco puntos. La pelea del oficialismo, en tanto, se resolvió sin sorpresas, con el ministro de Economía, Sergio Massa, aventajando a Juan Grabois, pero con una cosecha total que deja al Gobierno en estado de shock.
Juntos por el Cambio dirimió su interna entre Bullrich y Rodríguez Larreta, con la exministra de Seguridad como ganadora. De todos modos, la elección de la principal coalición opositora enciende alarmas camino a las generales. Unión por la Patria, en tanto, está en el tercer lugar, aunque podría mejorar cuando se agilice el conteo en la provincia de Buenos Aires. Un dato: Milei duplica en votos a la ganadora de la interna de JxC y también supera holgadamente a Massa.
A las 23.42, Milei irrumpió en el escenario del Hotel Libertador, en el centro porteño, con su grito de guerra: “Aguante la libertad, carajo”. Y arengó al cántico que estalló con la crisis de 2001: “Oh, que se vayan todos, que no quede ni uno solo”. Y agregó: “Esto dará fin al kirchnerismo y vamos a ponerle fin a la casta política”. Más tarde, agregó: “En primera vuelta”.
“Estamos frente al fin del modelo de la casta, ese que dice que detrás de cada necesidad hay un derecho, cuya mayor aberración es la justicia social”, afirmó Milei, en alusión a dos máximas del peronismo. Luego dijo que la Argentina tiene la carga fiscal más alta del mundo y más de 100 años de déficit. “Hoy dimos el primer paso para la recuperación de la Argentina”, prometió.
“Pensar que hace dos semanas venían operándonos, diciendo que no íbamos a quedar ni terceros... Ok”, continuó el libertario, entre las risas de sus asistentes. Fue entonces que levantó la voz, para repartir a críticas a sus rivales en las PASO y el tratamiento que recibió en medios y encuestas. “Hoy, 17 de 24 distritos se pintaron de violeta. ¡Vamos la libertad carajo!”, gritó, para destacar también a Carolina Píparo como la segunda candidata bonaerense más votada y, dijo, la mejor alternativa “para echar a Kicillof”. Luego insistiría, ahora hablando de sí mismo, sobre la misma idea: que su candidatura es la mejor opción para remover al kirchnerismo del poder. Una primera y clara alusión al “voto útil”.
Apenas unos minutos antes comunicó su victoria Patricia Bullrich. “En un país normal, estaríamos festejando. Nos eligieron para liderar un cambio que deje atrás la corrupción y que deje atrás el despilfarro. Un cambio que deje atrás una educación presa de una disputa política. Hoy hemos dado un paso importante que nos abre una esperanza”, dijo Bullrich, a las 23.30. Y agregó: “Quiero ratificar que Juntos por el Cambio hizo una gran elección”. Luego, le agradeció a Larreta y Gerardo Morales, sus rivales en la interna. “Los vamos a convocar para ganar las elecciones generales y ser el gobierno que les cambie la vida a los argentinos”.
“Quiero felicitar a Javier Milei por la enorme elección que ha hecho. El también dijo que hay que terminar con la cueva de La Cámpora. La sociedad demanda un cambio profundo”, señaló la exministra macrista. Rodríguez Larreta, que habló después, no felicitó al candidato libertario.
Antes de la medianoche, Mauricio Macri tomó la palabra y habló de “cambio de era”. Dijo que “la mayoría de los argentinos apoyó masivamente un cambio”.
Pasada la medianoche, Juan Grabois se subió al escenario del búnker principal de Unión por la Patria, donde le entregó a Massa la plataforma electoral de su fuerza y sus propuestas de gobierno. Una de las principales pasa por desconocer el acuerdo con el FMI. Antes, le agradeció a Cristina Kirchner, a quien reivindicó y definió como proscripta. También apuntó con nombre y apellido contra Néstor Grindetti y Bullrich por la muerte de Morena Rodríguez y la detención de sospechosos que siguió a ese crimen en Lanús.
“El pueblo habló y eso es siempre una buena noticia”, afirmó a su turno Axel Kicillof, quien leyó su discurso. El gobernador bonaerense advirtió por el alto nivel de abstención. Dijo que prefiere las críticas de los bonaerenses antes que su silencio o que se queden en su casa, sin votar. “Tenemos que ser prudentes para interpretar los resultados de esta noche”, señaló, para destacar que este domingo se eligieron candidatos, no funcionarios. Finalmente, felicitó a Massa por “bancar la parada”.
A las 0.35, Massa tomó la palabra, que comenzó hablando de “un nuevo escenario político” que dejó en evidencia la elección dividida en tercios. “Empiezan en la Argentina esta noche semanas trascedentes. Empieza a discutirse qué país vamos a discutir los próximos años: con apertura indiscriminada de importaciones o defendiendo la industria nacional y las pymes”, afirmó, con la mira en Milei y Bullrich.
La lista de Massa se extendió sobre las banderas del “centro” político y del peronismo: la defensa de la universidad pública, del sistema público de jubilaciones y la salud pública, entre otras, para plantear que sus rivales buscan anularlas. “Vamos a dejar hasta nuestra última gota de transpiración para ganar en octubre y ganar en noviembre”, afirmó, dando por hecho que las únicas chances del oficialismo por retener la presidencia están en el ballottage. Y concluyó su discurso con una arenga a los militantes: “Tenemos 60 días para darla vuelta y ganarle a aquellos que, convocando desde el odio, hoy construyeron un principio de mayoría”.
La provincia y la ciudad
La provincia de Buenos Aires, principal distrito electoral del país, sintió el cimbronazo libertario. En el bastión del kirchnerismo, el gobernador Kicillof, que va por su reelección, quedó primero, aunque amenazado. Fue el candidato más votado a nivel individual y su espacio, Unión por la Patria, fue la fuerza política con mayor caudal de votos, en una elección que deja como conclusiones una corta ventaja de Néstor Grindetti por sobre Diego Santilli en la interna de Juntos por el Cambio, y a la candidata de Javier Milei, la diputada Carolina Píparo, en el segundo lugar en el conteo individual de los candidatos. El gobernador ganó en el conurbano y quedó detrás de Juntos por el Cambio en el interior.
Su continuidad en la gobernación requerirá un buen resultado de Massa en octubre, por el efecto arrastre de la boleta sábana. Tiene la ventaja constitucional de que podría ser reelegido si en la general saca un voto más que su rival, ya que en la provincia no hay ballottage.
El ministro de Economía y precandidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, envió a Cecilia Moreau, una de sus espadas, a decir que hizo “una buena elección”. Si se le suman las adhesiones cosechadas por Grabois, su rival de la interna que fue alentado a participar por el kirchnerismo, se proyecta una pelea de tercios entre La Libertad Avanza, Juntos por el Cambio y Unión por la Patria. Este escenario podría derivar en un ballottage, pero sin el oficialismo. Desde antes de las PASO, el Gobierno ya advertía una fuga de apoyos y asimiló puertas adentro que quedará lejos del 48% que obtuvo Alberto Fernández en las PASO de 2019.
La participación ciudadana alcanzó el 69% del padrón, por encima de 2021, que fue de 67%. El récord en las PASO fue en 2011, año de su estreno, con el 78,66% de concurrencia. Julio Vitobello, secretario general de la Presidencia, pidió “paciencia” para conocer los resultados. “No podemos precisar un horario”, dijo el funcionario de Alberto Fernández pasadas las 18.15. Los primeros datos oficiales se dieron a conocer después de las 22.40. El escrutinio provisorio se demoró por la complejidad del recuento con multiplicidad de boletas en la provincia de Buenos Aires, pero también se prevé un retraso en territorio porteño a partir de las fallas en las urnas electrónicas, por lo que se extendió el horario de votación en algunos establecimientos.
De los 27 precandidatos presidenciales que participaron de las PASO es muy probable que haya una profunda depuración y queden solamente en carrera cinco fórmulas para competir en los comicios generales del 22 de octubre. Cruzaron el umbral del 1,5% las fórmulas de Juan Schiaretti-Florencio Randazzo (Hacemos por Nuestro País) y Myriam Bregman-Nicolás del Caño, quienes derrotaron a Gabriel Solano-Vilma Ripoll en la interna del Frente de Izquierda.
En la ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri venció por poco más de un punto al radical Martín Lousteau, uno de los que convenció al jefe de gobierno con desdoblar la elección local y realizarla de manera electrónica. La polémica por las fallas de las urnas derivó en una dura crítica de la jueza electoral de la ciudad de Buenos Aires, María Servini, que dijo que hubo “un preocupante grado de improvisación”. Entre ambos, obtuvieron más de 55%, lo que mantiene a JxC como la fuerza hegemónica en territorio porteño. Leandro Santoro, de UP, estaría en el 22% mientras que Ramiro Marra, el candidato de Milei, logró un 13%, de acuerdo a los primeros datos oficiales.
Juntos por el Cambio montó un solo búnker en Parque Norte para dar señales de unidad rumbo a las generales. Allí está Mauricio Macri, quien reconoció al llegar que Milei “fue la sorpresa”. El expresidente lanzó su mensaje cuando aún no había datos oficiales.
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