Elecciones 2021: el Presidente se focaliza en la primera y tercera sección en busca de dos millones de votos
El mandatario recorrerá varias localidades antes del cierre, en Merlo; tras varias semanas atravesadas por el desánimo, en la Casa Rosada hablan de un “mesurado optimismo”
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El sprint final de la campaña estará centralizado en las dos principales secciones electorales bonaerenses, la primera y la populosa tercera. Sin tiempo para nuevas aventuras y con el presidente Alberto Fernández como principal escudero de la estrategia, el Frente de Todos apuesta todos los cañones para “convencer” un universo de dos millones de personas que no fueron a votar en las PASO.
El equipo del Presidente trabaja en la agenda que se pondrá en marcha a partir de mañana con recorridas y mano a mano. El resto del gabinete nacional también hará lo mismo. La última semana antes de la elección será puerta a puerta, cara a cara. “Les vamos a pedir el voto”, se sinceró uno de los hombres más cercanos al jefe del Estado.
Tras varias semanas atravesadas por el desánimo generalizado y los conflictos internos, hoy el Gobierno se mueve con un “mesurado optimismo”. Cerca de Fernández dan por descontado una recuperación después del mazazo electoral que provocó un terremoto interno.
“Escuchamos el reclamo de la gente e hicimos los cambios que había que hacer. Hoy los salarios le ganan a la inflación, esperamos una temporada récord de turismo por el PreViaje y aumentó el consumo”, describieron fuentes oficiales, que evitan hablar de la inflación o la suba del dólar paralelo que esta semana tocó los 200 pesos.
Así, después de una semana casi sin actividad electoral, el Presidente se prepara para encabezar el desembarco en el corazón del conurbano bonaerense donde hay habilitadas para votar casi 9 millones de personas. El principal número es el de la participación: el 12 de septiembre votó el 68 por ciento; es decir, poco más de 2,5 millones de potenciales votantes.
En las primarias las dos principales coaliciones se repartieron un triunfo en cada sección. El Frente de Todos se quedó con la Tercera, mientras que la boleta que encabezó Diego Santilli –también aceleró las recorridas junto con Facundo Manes– lideró en la Primera.
El peronismo se hizo fuerte sobre su base electoral en Almirante Brown, Avellaneda, Berazategui, Ezeiza, Florencio Varela, La Matanza y Lomas de Zamora, pero tuvo un traspié que encendió la luz de alarma en Quilmes, donde la camporista Mayra Mendoza perdió. Igualmente, con una participación de casi el 70%, el oficialismo ganó en la sección por una diferencia importante: 8,5%.
En la Casa Rosada y en La Plata advirtieron que todavía pueden crecer bastante en estos municipios y dispusieron un plan para detectar a aquellos que acompañaron a la fórmula de Alberto Fernández y Cristina Kirchner hace dos años. “Tenemos un núcleo importante que no votó”, reconoció un funcionario involucrado en la estrategia de la campaña que aspira a una “movilización máxima”.
En la Primera, en tanto, asoma el trabajo más desafiante para Alberto Fernández y el gobernador Axel Kicillof. En este territorio, que incluye a los enclaves más importantes de Juntos como Vicente López, gobernado por Jorge Macri; San Isidro, por Gustavo Posse, y Tres de Febrero, que Diego Valenzuela, la oposición conquistó al 37,43% del electorado, mientras que el kirchnerismo se quedó con 33,13%.
La gran sorpresa del Frente de Todos fue la caída en San Martín, distrito que conduce el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, uno de los funcionarios más cercanos al Presidente.
Pero esta sección también incluye otros distritos donde el peronismo dejó muchos votos y que ahora busca recuperar como José C. Paz, Malvinas Argentinas –Leonardo Nardini fue uno de los jefes comunales que asumieron responsabilidad en el gobierno de Kicillof tras la derrota–, Hurlingham, Ituzaingó y Merlo, tierra de Gustavo Menéndez, que será sede del acto de cierre de campaña el próximo jueves tras la reprogramación obligada por la operación de la vicepresidenta Cristina Kirchner.
“Será una gran oportunidad para mostrar y contrastar dos maneras de entender el futuro de la Argentina: los que decimos que sí a la recuperación económica y los que dicen que no y solo ponen palos en la rueda”, sostuvieron fuentes oficiales sobre la puesta en escena de los actos de cierre que protagonizarán la semana próxima Juntos y el Frente de Todos.
En paralelo, el oficialismo se prepara para recibir una paliza electoral en provincias como Ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Entre Ríos, Chubut y Santa Fe. Cuando restan siete días para la elección, la esperanza está puesta en los votos que puedan sumar en Buenos Aires y la recuperación en La Pampa.