En un clima tenso, el Senado debatirá hoy el proyecto de la ley de alquileres
LA NACIONGustavo Ybarra
En un clima de virtual ruptura de relaciones entre la oposición y el oficialismo, que responde a las directivas de Cristina Kirchner, el Senado se dispone a tratar hoy el proyecto de ley de alquileres,luego de que la semana pasada los senadores de Juntos por el Cambio bloquearan su tratamiento sobre tablas, al no facilitar el apoyo de los dos tercios del cuerpo. La iniciativa fue aprobada por la Cámara de Diputados en noviembre del año pasado.
La decisión de la vicepresidenta de impulsar el debate de proyectos que no tienen relación con la pandemia de coronavirus, desconociendo el protocolo de sesiones virtuales que ella mismo firmó un mes atrás, se tradujo en un duro enfrentamiento entre el Frente de Todos y los senadores de Juntos por el Cambio y del interbloque Federal.
Con esta tensión como telón de fondo, Cristina Kirchner convocó a una sesión para hoy, a las, 14, en la que incluyó un proyecto que promete renovar la polémica con la oposición.
Se trata de un texto del oficialista Oscar Parrilli (Frente de Todos-Neuquén), que busca suspender por 180 días la inscripción de sociedades por acciones simplificadas (SAS), herramienta creada durante el macrismo para favorecer a los emprendedores pero que el kirchnerismo sostiene que ha sido utilizada para encubrir maniobras de lavado de dinero.
Todo indica que la oposición rechazará, como lo hizo la semana pasada, la jugada del oficialismo y denunciará la violación del decreto de la presidencia del Senado que estableció un protocolo para las sesiones virtuales, el cual limita los debates por videoconferencia a proyectos que tengan que ver con la emergencia sanitaria decretada el 20 de marzo último.
"La ruptura de lo que se votó por unanimidad correrá por cuenta del Frente de Todos", afirmó Luis Naidenoff (UCR-Formosa), jefe del interbloque de Juntos por el Cambio.
En protesta por la decisión del oficialismo de discutir dos decretos de necesidad y urgencia del gobierno de Macri, vinculados al traslado del control de las escuchas judiciales a la Corte Suprema, la oposición bloqueó el jueves pasado el tratamiento de los proyectos de ley de alquileres y de educación a distancia. Lo hizo negándose a aportar los dos tercios para habilitar el debate sobre tablas y desconectándose de la videoconferencia.
Esto provocó la reacción de la vicepresidenta, que tomó como una humillación el abandono opositor del recinto virtual. Según varias fuentes legislativas, Cristina Kirchner le trasladó su enojo con caja destemplada al jefe de la bancada oficialista, José Mayans (Frente de Todos-Formosa), y ordenó a sus senadores desconocer de manera definitiva el protocolo de sesiones remotas y avanzar con la agenda de revisión e investigación de leyes y acciones de gobierno de la administración de Mauricio Macri.
Así lo anunció esta semana el propio Mayans, quien intervino en un plenario de comisiones con el único fin de advertirle a la oposición el cambio de reglas de juego y que el Frente de Todos dejaría de cumplir con la limitación legislativa por la pandemia.
"Ya que algunos decidieron que no van a dar los dos tercios, nosotros tenemos que trabajar con la herramienta que tenemos, que es la mayoría. A partir de acá, una vez que haya quórum, el cuerpo puede tratar los temas que se consideren convenientes, sin limitaciones", sentenció el jefe de la mayoría oficialista del Senado.
Ley de alquileres
Salvo la iniciativa de Parrilli, los otros dos proyectos incluidos en el temario para la sesión de hoy cuentan con el apoyo de la oposición. Con los días de publicación previa que exige el reglamento, tanto el tema alquileres como el de la educación a distancia se podrán debatir sin necesidad de mayorías especiales previas. En ambos casos, si el Senado los aprueba sin modificaciones se convertirán en ley.
En el caso de alquileres, el proyecto reúne consenso aun cuando el texto aprobado por la Cámara baja es cuestionado por su técnica legislativa, amén de reunir el rechazo de asociaciones de propietarios, cámaras inmobiliarias y de colegios profesionales, como el de Abogados de la ciudad de Buenos Aires.
Se trata de una modificación del Código Civil y Comercial que establece nuevas reglas de juego en la relación entre locatarios e inquilinos, como la extensión de tres años de los contratos, que hoy es de dos, y el establecimiento de un mecanismo de actualización mediante el uso de una fórmula que combina los índices de precios al consumidor y el de variación salarial (Ripte).
El de educación a distancia, en tanto, habilita el uso de plataformas digitales para la enseñanza en los niveles primarios y secundarios mientras dure el distanciamiento social obligatorio dispuesto como consecuencia de la pandemia de coronavirus.
Por Gustavo Ybarra
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