El Presidente canceló su viaje a Francia por la situación sanitaria

En un contexto de preocupación creciente por la llegada de nuevas cepas de coronavirus, y luego de varias horas de marchas y contramarchas, el presidente Alberto Fernández decidió cancelar el viaje a Francia, que tenía previsto para esta noche.

“No era momento para ir”, expresaron con resignación desde un despacho de la Casa Rosada. El plan presidencial era participar el miércoles del foro sobre igualdad de género organizado por su par francés Emmanuel Macron, con quien Fernández ya se vio a principios de mayo, como parte de su gira europea.

Luego de unas horas de consultas internas e internacionales, Fernández le comunicó la decisión a Macron a través de una carta en la que le expresó que le hubiera encantado viajar para participar con él de la apertura del foro, pero que le resultaba “imposible” hacerlo. “La situación sanitaria me obliga a acompañar el esfuerzo de mi pueblo en el marco del respeto conjunto de las normas preventivas establecidas”, escribió el presidente argentino. “Agradezco su amistad y el apoyo incondicional que ha brindado a mi país desde que asumí como Presidente”, afirmó Fernández en otro tramo de su misiva, que finaliza con su firma y la frase “con el afecto de siempre” a su lado.

“Estamos hablando con los franceses. La verdad es que Macron nos ayudó mucho en la negociación con el Club de París y el FMI pero no es seguro que viajemos”, advertían ya ayer a LA NACION desde Balcarce 50. A esa altura, Fernández ya era consciente de la repercusión negativa que tendría su viaje en un contexto de quejas por la severa restricción de vuelos desde el Exterior, medida que comenzó a ponerse en marcha hoy.

“Cumplir” con el presidente francés, a quien el Gobierno le asigna un rol fundamental en la postergación de los pagos al Club de París que negoció el ministro de Economía, Martín Guzmán, era la razón de mayor peso que esgrimían en la Casa Rosada para realizar el viaje, aunque el foro era la única actividad oficial prevista y la mayoría de los líderes mundiales que habían comprometido su presencia se fueron dando de baja y prometieron asistencia virtual.

El Presidente planeaba viajar con una comitiva “mínima”, dijeron en el Gobierno, solo integrada por su secretaria de Legal y Técnica, Vilma Ibarra; la ministra de la Mujer, Elizabeth Gómez Alcorta, y el vocero presidencial, Juan Pablo Biondi. El propio canciller Felipe Solá, en Europa para asistir a la cumbre de cancilleres del G20, no estaba previsto como parte de la delegación.

Para colmo, líderes mundiales como la canciller alemana Angela Merkel ya habían decidido no concurrir de manera presencial a la cumbre, denominada Foro Generación Igualdad, que se extenderá hasta el viernes. Merkel, cuenta pendiente del Presidente en su recorrida de mayo pasado (se encontraron días más tarde de manera virtual), dejará su puesto en septiembre, luego de 16 años ininterrumpidos en el poder, por lo que ha reducido sus visitas al exterior.

Macron había invitado a Fernández a participar del foro tras felicitarlo por la aprobación en la Argentina de la legalización del aborto que, según le dijo en una videoconferencia en febrero pasado, había generado “mucha repercusión” en Europa.

Está prevista la participación en el evento de los mandatarios de España, Países Bajos, Suecia, Finlandia, Kenya, Túnez, Chipre, Estonia y el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres. El foro será en formato virtual, pero la apertura se realizará en forma presencial. Junto a Macron se prevé la presencia-presencial o virtual, aún sin confirmación por uno u otro modo-de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris; el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.

La carta de Alberto Fernández al presidente francés

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