Alberto Fernández promovió a Alejo Ramos Padilla como juez federal con competencia electoral en Buenos Aires
LA NACIONHernán Cappiello
En medio de una jornada donde el foco de la atención y la emoción estuvo puesto en la despedida de Diego Armando Maradona, se conoció que el Gobierno envió al Senado el pliego del juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, para ocupar el estratégico juzgado federal con competencia electoral de La Plata, encargado de intervenir y dirimir las disputas políticas en el distrito electoral más importante del país, que está vacante desde hace 11 años.
Ramos Padilla es el juez federal a cargo del caso contra exespía Marcelo D'Alessio y quien procesó al fiscal Carlos Stornelli y al periodista Daniel Santoro por extorsión. La oposición denunció que estos procesamientos obedecen a un intento de perjudicar la causa de los cuadernos de las coimas que investigaba Stornelli.
El presidente Alberto Fernández envió al Senado el pliego del juez federal en un mensaje firmado por la ministra de Justicia, Marcela Losardo, y el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
Ramos Padilla quedó primero en el concurso realizado por el Consejo de la Magistratura, que envió su nombre en una terna acompañado por los secretarios judiciales Jorge Di Lorenzo y Laureano Durán.
El pliego de Ramos Padilla seguramente atravesará la instancia del Senado, controlado por el kirchnerismo, y luego el presidente Fernández podrá firmar el decreto que lo designe en el nuevo cargo.
Su rol será clave en todo lo relacionado con el control de las elecciones en la provincia de Buenos Aires. El juzgado federal N°1 de La Plata es el que debe intervenir ante posibles controversias en los comicios del principal distrito del país: desde la presentación de listas, las impugnaciones y la aprobación del financiamiento partidario, hasta las denuncias por fraude y los cuestionamientos a los resultados electorales.
El juzgado está vacante desde 2009, cuando falleció el juez Manuel Blanco. Desde entonces fue ocupado en forma provisoria por la jueza porteña María Servini, el juez de La Plata Adolfo Ziulu y el juez federal de Tres de Febrero Juan Manuel Culotta.
Ramos Padilla investigó las actividades de D'Alessio, a quien vinculó con sectores de la AFI, funcionarios judiciales, dirigentes políticos y periodistas. Hijo del camarista Juan Ramos Padilla, quien no oculta su afinidad por el kirchnerismo, Alejo Ramos Padilla también goza de la bendición del oficialismo por las decisiones que apuntaron al gobierno de Cambiemos y su pasado como abogado de organismos de derechos humanos.
Por Hernán Cappiello
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