El Presidente les reclamó "responsabilidad" a los gobernadores por el apoyo legislativo
El PJ había condicionado su respaldo a leyes clave; Frigerio recibirá el martes a los mandatarios
Después de la advertencia del grueso de los gobernadores del PJ de insistir con la devolución del 15% de la masa coparticipable que retiene el gobierno nacional, el propio Mauricio Macri salió ayer a marcarles la cancha y les reclamó "responsabilidad".
Las palabras del Presidente están en línea con la estrategia de la Casa Rosada de comenzar a endurecer la postura (al menos en público) frente a los mandatarios, que condicionan el apoyo legislativo al acuerdo con los fondos buitre a que el Gobierno achique los plazos para la entrega de los recursos a las provincias.
Para bajar el nivel de tensión, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, fijó para el martes que viene una reunión en Balcarce 50 después del pedido que hicieron anteayer los gobernadores del peronismo para que los recibiera el Presidente. El reclamo en conjunto de los mandatarios tuvo además el aval de los legisladores del partido.
Por el momento, no está en la agenda de Macri un encuentro con ellos. El Presidente derivó nuevamente el tema a sus ministros. La propuesta con la que insistirá Frigerio es avanzar en la conformación de una mesa permanente de diálogo.
En el Gobierno creen que la advertencia de los mandatarios provinciales está relacionada con la interna dentro del peronismo y los celos hacia el referente del Frente Renovador, Sergio Massa, que intenta acaparar la bandera de los gobernadores. Anoche, Massa se reunió con el jefe de Gabinete, Marcos Peña.
En la Casa Rosada entienden que por esa disputa de poder dentro del PJ es que se dio la reacción de anteayer. Los gobernadores, y sobre todo aquellos que no tienen deudas con la Nación, comenzaron a presionar para adelantar los plazos para la devolución de los fondos coparticipables, que esperan se acorte a tres años.
La semana pasada, Macri firmó un decreto que fijó en cinco años el tiempo para el reparto de esas partidas. Lo hizo ante la necesidad de evitarse una derrota parlamentaria frente a la decisión de Massa de no acompañar el anterior DNU que había firmado el Presidente por el que anulaba esa devolución del 15% que había dado la ex presidenta Cristina Kirchner antes de dejar el poder. Finalmente logró la aprobación y postergó los plazos del debate.
Factor de presión
El debate por los fondos coparticipables resurge ahora que la Casa Rosada necesita sí o sí el apoyo de los gobernadores para aprobar el acuerdo con los fondos buitre. Los mandatarios aprovechan el momento político de necesidad por parte del Presidente y apuestan a condicionarlo.
De todas maneras, más allá de la invitación para la semana que viene a la Casa Rosada, el mensaje que hizo público Macri y que sus ministros transmiten a los gobernadores es que no está dispuesto a aceptar cambios en el proyecto de ley para pagarle a los holdouts, iniciativa que hoy comienza a debatirse en la Cámara de Diputados.
El Gobierno le enrostra a los mandatarios provinciales que sin ese acuerdo no habrá plata para obras, porque nadie conseguirá financiamiento externo. Ya lo dijo el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, cuando presentó el acuerdo, y lo repitió ayer en una reunión que mantuvo con un grupo de ministros de Economía de las provincias y ante legisladores de la oposición.
Macri no dejó tampoco demasiado margen. "Lo que le cambia la vida a la gente es la inversión, no el gasto", les dijo ayer desde Chubut, donde se reunió con el gobernador Mario Das Neves en busca de apoyo legislativo (ver aparte).
Para que no quedaran dudas, Macri dijo que todos, en referencia a los mandatarios provinciales, deben "ser responsables de invertir en las soluciones".
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