El optimismo de Milei por la aprobación de la ley, la cifra de inflación que alienta internamente y la agenda internacional que se abre
El mandatario partirá este lunes a Davos; en la Argentina seguirá la discusión parlamentaria, mientras en el oficialismo hay convencimiento de que se podrá hacer lugar a cambios y sacar lo principal para fines de este mes
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A una semana de comenzado el debate sobre la ley ómnibus en el ámbito parlamentario, y mientras la oposición muestra reservas y pide cambios, en Casa Rosada sobrevuela el convencimiento de que el proyecto “va a salir”. El propio mandatario, Javier Milei, se mostró “optimista” sobre el tema en una entrevista radial este jueves y así cuentan que está quienes lo trataron en los últimos días. Optimista y “completamente convencido de lo que está haciendo”, así lo describen. Ese optimismo, explican, podía vérsele también en las últimas horas, luego de que se conociera el dato de inflación del mes de diciembre, que se ubicó en 25,5%. Si bien admitían que entienden que el número es, objetivamente, malo, resaltaban que el panorama fue “mejor de lo esperado”.
A punto de viajar a Davos, Suiza, para participar del Foro Económico Mundial, Milei seguirá de cerca lo que pase en el Parlamento en su primera salida internacional desde que es mandatario en ejercicio. “Si hay mejoras, las tomamos, pero que sale, sale”, dicen muy cerca suyo en Balcarce 50 en referencia al proyecto y a los posibles cambios que probablemente se introduzcan en algunos aspectos tras el debate en el plenario de comisiones. A la par de eso admiten que “lo que puede pasar es que haya cosas (del proyecto) que salgan en distintos momentos”, en referencia al resto del año legislativo y no solo en el período de sesiones extraordinarias que concluye el 31 de enero. Tras lo que rápidamente insisten en que que “el core del proyecto, todo lo que tiene que ver con la coyuntura, tiene que salir ahora”, destacaron las altas fuentes consultadas por LA NACION.
En esa línea recalcan que la reforma que se busca tanto con el mega DNU como con la ley ómnibus, es “apenas un tercio de las que hay que hacer”, para que el país salga de la crisis en la que está inmerso.
En las últimas horas en el primer piso de Casa Rosada siguieron con atención la suba del dólar, que terminó cerrando con una tendencia a la baja. Si bien los movimientos despertaron algunas alertas, la baja ayudó a aflojar tensiones. El origen del movimiento lo ubicaron en lo que sucedía en el Congreso. “Si los políticos hacen estupideces, el mercado pasa la cuenta”, apuntan.
Sobre el tema de jubilaciones, otro de los temas sensibles y que genera controversias con la oposición, en las altas esferas oficialistas detallan que están a la espera de ver “en qué deriva la discusión (parlamentaria), pero si no hacemos nada, las jubilaciones pierden dos puntos del PBI”.
Cerca del presidente cuentan que el de los jubilados es uno de los sectores que más le preocupan, junto con el segmento que va de 0 a 14 años. “Eso es lo más sensible. Es el futuro”, refirieron. Ese sector está en manos de su ministra y amiga personal, la titular de Capital Humano, Sandra Pettovello. La funcionaria se sumará en Roma a la comitiva que a principios de febrero acompañará a Milei a la capital italiana para la canonización de Mama Antula, quien se convertirá así en la primera santa argentina. La ceremonia, en San Pedro, será el marco en el cual se dará la primera reunión entre Milei y el Papa Francisco, como contó este viernes LA NACION.
Según cuentan en las filas libertarias los planes de la flamante cartera fue parte de lo conversado entre Milei y Francisco en la primera conversación telefónica que mantuvieron horas después del aplastante triunfo del economista por sobre Sergio Massa, en noviembre pasado. Por eso es que Pettovello, que además tiene buena relación con distintos referentes de la iglesia católica, se sumará a la comitiva del viaje en Roma. Será la segunda luego de haber pasado antes por Jerusalén, en un viaje que ampliará la exposición mundial del mandatario.
Por lo pronto, esta semana, más allá del marco de gravedad que atraviesa el país, en la sede de Gobierno había optimismo dentro de la situación por partida doble: por un lado, por el acuerdo con el FMI, al que se llegó este miércoles, y del que resaltaban que se logró en pocos días, y por el dato de inflación de diciembre, que fue del 25,5%, pero que se consideró positivamente porque sostenían que cuando llegaron al poder, un mes atrás, “la inflación estaba viajando al 45% mensual”. Por lo que consideraban que con esa base, “30% ya era un “numerazo”, porque significaba que a las tercera semana se paró la inflación”. Creen también que “parte de la emisión salvaje” que se hizo en la administración anterior, “todavía está en la calle” y eso continúa repercutiendo en las variables económicas, aunque apuntan a que vaya mermando.
Por lo pronto, y mientras se mira lo que sucederá en el Parlamente, en el círculo cercano del presidente insisten en describirlo como “convencido” de lo que está haciendo, que “arreglar el problema, lo va a arreglar” y que “las mejoras se van a ir viendo a lo largo del tiempo”.
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