El oficialismo no logró dar vuelta la elección en La Pampa, clave para el Senado

Por primera vez desde el regreso de la democracia la oposición se impuso en una elección general en la provincia de La Pampa. El golpe no pudo llegar en momento más inoportuno para Cristina Kirchner, ya que el peronismo perdió un escaño clave en el Senado.

Si bien Juntos por el Cambio se había impuesto en las primarias, como también lo había hecho bajo el sello de Cambiemos en 2017; es la primera vez que el peronismo pampeano pierde una elección con cargos en juego, en este caso tres bancas en la Cámara de Diputados y otras tantas en el Senado.

A pesar de los esfuerzos del gobierno del peronista Sergio Zilioto por revertir los diez puntos de desventaja de septiembre, la coalición opositora de radicales y macristas logró retener gran parte del voto de las cinco listas que participaron en las primarias y volvió a imponerse.

Con el escrutinio casi concluido, se habían contabilizado más del 99% de las mesas, Juntos por el Cambio ganaba la categoría a senador por seis puntos de ventaja (48 a 42). Logró, así, quedarse con uno de los escaños que había puesto en juego el Frente de Todos.

De esta manera, en diciembre ingresarán a la Cámara alta el radical Daniel Kroneberger y la joven macrista María Victoria Huala. Por el peronismo resulto electo Daniel Bensusán, ministro de Gobierno de la provincia.

La derrota del peronismo dejó afuera de la Cámara alta a María Luz Alonso. Militante de La Cámpora, la joven se convirtió en una de las personas de mayor confianza de Cristina Kirchner, al extremo que la vicepresidenta la designó al frente de la Secretaría Administrativa de la Cámara alta.

En la categoría de Diputados se repitió el mismo resultado (48 a 42), lo que le permitió a Juntos por el Cambio sumar una banca en detrimento del oficialismo, que buscaba renovar dos escaños.

Así, a partir de diciembre ingresarán a la Cámara baja el macrista Martín Maquieyra y la diputada provincial del radicalismo Marcela Coli. Por el peronismo fue electa Varinia Marín, hija del exgobernador Rubén Marín.

Viejas deudas

El resultado se explica en el fuerte impacto de las políticas del Gobierno de Alberto Fernández con el sector agropecuario, con medidas restrictivas de la actividad que recrean el enfrentamiento del sector con el kirchnerismo.

Pero también tuvo fuerte injerencia la interna peronista y el malestar que las listas armadas por el gobernador Zilioto generaron en Carlos Verna, uno de los líderes del peronismo pampeano.

A la ausencia de candidatos de General Pico, ciudad de la que es oriundo Verna, se suma el fuerte perfil kirchnerista de los postulantes del Frente de Todos.

Es conocido el enfrentamiento que Verna mantuvo con Cristina Kirchner a lo largo de los años.

En 2009 el por entonces senador ayudó a quitarle el control del Senado al Frente para la Victoria, sumándose a un conglomerado opositor.

Fue la respuesta del senador al intento de Cristina Kirchner de usarlo como chivo expiatorio para desviar la atención de las denuncias sobre un pedido de coimas que tuvo como protagonista a la por entonces senadora por Tucumán Malvina Seguí.

Dos años después, Verna volvió a la carga y le negó la primera candidatura a diputada nacional a la camporista Alonso, exigida por Cristina Kirchner desde la Casa Rosada.

Como represalia, la protegida de Cristina Kirchner participó en la elección con la boleta del Partido Humanista pegada de la papeleta presidencial que logró mantenerla en la presidencia por otros cuatro años más.

Verna nunca perdonaría aquella jugada que consideró una afrenta para su condición de líder y estratega del peronismo pampeano.

La rueda del tiempo quiso que, una década después, María Luz Alonso ingresara en las boletas del peronismo pampeano como segunda candidata a senadora nacional y que, de manera sorpresiva, el PJ perdiera por primera vez una elección con cargos en juego desde 1983.

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