El nieto de Carlotto visitó en Santa Cruz a su otra abuela
Se reunió en Caleta Olivia con su familia paterna y recorrió la ciudad donde vivió su padre; le harán varios homenajes
RIO GALLEGOS.- El nieto recuperado de Estela Carlotto, Ignacio Hurban, viajó dos mil kilómetros, desde Olavarría hasta Cañadón Seco, para reencontrarse con su abuela paterna, su tío Jorge Montoya y recorrer las calles por donde transcurrieron la infancia y la juventud de su padre.
Hurban, quien ya adelantó su intención de añadirse el nombre Guido -tal como lo llamó su madre Laura, al nacer-, llegó a Caleta Olivia anteayer y extenderá la visita hasta mañana. La Comisión de Fomento de Cañadón Seco lo honrará como visitante ilustre y realizará un homenaje a su padre Walmir Oscar "Puño" Montoya.
El nieto recuperado 114 es hijo de Laura, la hija desaparecida de Estela de Carlotto y el "Puño" Montoya, ambos militantes montoneros desaparecidos y asesinados durante la dictadura militar.
En Caleta Olivia viven Hortensia Ardura, de 92 años, la otra abuela de Hurban, y su tío Jorge Montoya. Los Montoya son una familia muy conocida en la ciudad y Hortensia educó en las aulas a varias generaciones de santacruceños.
La visita del nieto se gestó en el primer encuentro que los Montoya tuvieron con él en Buenos Aires, adonde viajaron a poco de conocerse la noticia y la identidad del músico de Olavarría. "Haberte conocido es un regalo por adelantado de mi cumpleaños", le habría dicho la mujer. Allí surgió, a propuesta de Hurban, la posibilidad de viajar para compartir el cumpleaños 92 que se celebra hoy.
"Fue un encuentro muy emocionante", relató a LA NACION, Jorge Soloaga, el jefe comunal de Cañadón Seco, quien ayer a la mañana fue sorprendido por la visita de Hurban. "Abrí la puerta y estaba él, que se presentó con mucho respeto y humildad", relató Soloaga, quien lo acompañó a recorrer el pequeño pueblo, que nació como un campamento petrolero a mediados de los años 40.
A instancias de Soloaga, en la calle principal del pueblo está la Plaza de la Memoria, con la gigantografía de tres jóvenes oriundos del pueblo asesinados durante la dictadura militar, Walmir Oscar Montoya, Segundo Reynaldo Rampoli y Eduardo Clivio. Allí, Hurban se tomó una foto junto a la imagen de su padre.
"Fuimos a la sala de música, a la que le pusimos el nombre de su padre. Él quería conocerla y lo vi muy conmovido", relató Soloaga. Hurban se emocionó aún mas al saber que la batería del lugar era una réplica de la que usaba su padre.
El intendente lo invitó a quedarse hasta el lunes, para poder organizar un homenaje y entregarle la resolución que lo nombra visitante ilustre, además de copias de las disposiciones que dieron origen a la Plaza de la Memoria y a la sala de música en honor de su padre. Podrían participar músicos que formaron parte de la banda Nosud ("Nosotros y ustedes"), donde "Puño" Montoya tocaba la batería.
Los Montoya tienen previsto llevarlo a la estancia Bahía Langara, a 20 km de Caleta Olivia, donde nació su abuela y donde la familia esparció las cenizas de su padre hace cinco años, luego de que sus restos fueran identificados en una fosa común en el cementerio de Berazategui.
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